(Alarma)

(Cristales rotos)

(Música)

¡Hola, Claners!

Bienvenidos y bienvenidas a "Aprendemos en Clan".

Hoy tenemos un caso que resolver.

-¡Ah! ¿Qué está pasando aquí?

-Hola Nacho, pues algo está pasando, sí.

-¡Ya lo sabía!

Mi sentido "mapacho" nunca falla, James.

Esto...

¿Qué está pasando?

-Pues lo que está pasando es que hoy vamos a hablar de...

-¡Espera un momento, espera!

Déjame que yo lo deduzca.

Lo que está pasando aquí...

Todas las pistas indican que vamos a hablar de mí, ¡por fin!

-Casi, pero no, Nacho.

Hoy vamos a hablar de detectives.

-Pues lo que yo estaba diciendo, vamos a hablar de mí.

Porque yo soy detective.

-¿Detective tú? ¿Desde cuándo?

-Yo "detectiveo" todos los días, James.

Me paso el día "detectivando".

Una vez "detectivé" tan fuerte, que...

que... que...

-Ay, Nacho, mira, dos cosas.

Primero: los detectives no "detectivean",

sino que investigan.

Y la segunda cosa es:

¿Desde cuándo eres tú de la policía?

-¿Eh? ¿La policía?

¿Y qué tiene que ver la policía en esto?

-Hombre, la mayoría de detectives son parte de la policía.

-¡Ah!

¡Ya lo sabía!

Si yo soy policía.

Muy policía.

De hecho, "policío" todos los días.

Me paso la vida "policiando".

Una vez "policié" tan, tan fuerte...

-Anda, deja de inventarte palabras y vamos a escuchar a Delia,

que ella nos habla de la policía.

(Sirena)

¡Hola, niños y niñas!

Hoy me han dejado ser policía por un día.

Y justo tengo una emergencia:

¡Valentina ha desaparecido!

Aquí patrulla alfa:

¿Se sabe si la han secuestrado

o si se ha escapado por su propia pata? Cambio.

(RADIO) "Aquí patrulla épsilon.

No lo sabemos con seguridad, cambio."

Voy a ver si encuentro pistas, cambio.

Tenía muchas ganas de que me dejaran ser policía por un día.

Y es que me encanta ser maestra.

Pero quería ayudar a los demás de otra manera.

Y es que creo que la labor de los policías

y de la Guardia Civil es superimportante en la sociedad.

Yeah!

¿Cuál crees que es la función principal

de los policías y de la Guardia Civil?

¡Pues claro!

La policía y la Guardia Civil protegen a las personas

y las ayudan en caso de emergencia o accidente.

Si algún día tienes algún problema o te has perdido

y no estás cerca de tus padres o profesores,

puedes pedirle ayuda a un policía.

Él o ella te acompañará y te ayudará hasta que lleguen tus padres.

Hay pueblos y ciudades donde no hay Policía Nacional,

sino que hay Guardia Civil.

Ellos también te ayudarán.

Además, si lo necesitas,

también puedes llamarlos por teléfono.

Tan solo tienes que marcar el 112.

(Teléfono)

Otra de las labores principales de la policía y de la Guardia Civil

es tratar de prevenir delitos

e investigar aquellos que ya se han cometido.

¿Sabes cómo se desplazan los policías?

¡Exacto! En vehículos policiales.

Casi siempre los verás en coches o motos

porque con ellos pueden llegar rápidamente

al lugar donde se los necesita.

También tienen otros vehículos.

A veces van en avioneta o en helicóptero

para ver todo desde arriba.

Y en los sitios donde hay mar

pueden ir en lanchas o incluso en motos de agua.

También a veces los verás a caballo o en bicicleta.

Aunque los policías están aquí para ayudarte,

tienes que intentar evitar situaciones

que puedan ponerte en peligro.

No hables con desconocidos.

Ni aunque te digan que son conocidos de tu padre o de tu madre.

Nunca te subas al coche o te alejes con una persona que no conoces.

Tampoco debes aceptar nunca regalos, comida o chucherías de desconocidos.

Si vas caminando por la calle

y alguien te persigue o te intimida,

díselo a un policía.

En Internet no debes publicar cosas que no quieres que se sepan.

Nunca des tus datos personales.

Además, en las redes sociales

tus amistades deben ser las mismas personas

que conoces en la vida real.

Mucha gente miente en Internet.

Recuerda: la función principal de los policías

es proteger a la gente.

También se encargan de hacer cumplir la ley

y de evitar los delitos.

Si algún día estás en apuros

y no tienes a tus padres cerca,

pide ayuda a un policía.

Falsa alarma:

tras una inspección ocular,

no he conseguido encontrar pruebas de que Valentina

haya sido secuestrada.

Debe haberse escondido, como siempre.

Cambio y corto.

Me ha encantado esto de ser policía por un día.

Tú también deberías probar a ser policía por un día

y ayudar a los demás.

Aunque ayudar a los demás debe ser cosa de todos los días.

-Yeah!

-¡Hasta pronto, niños y niñas!

¡Uh!

"Mapachiona" la policía.

¡Ya sé lo que voy a ser de mayor, James!

¡Voy a ser... guapísimo!

Y también detective.

-¿Estás seguro?

Oye, que para ser detective hay que estudiar mucho

y saber muchas cosas. -¡Oye!

Lo dices como si yo no supiera un montón de cosas.

-No, no, en serio, es que tienes que saber muchas,

pero que muchas cosas de ciencia.

-Pero... ¿ciencia?

¿Qué tendrá que ver la ciencia en esto?

-Hombre, Nacho, la ciencia es muy importante para la policía,

¿no te suena la Policía Científica?

-Sonarme no me suena.

¿La guardamos en algún sitio?

-¿Guardarla? No, Nacho.

La Policía Científica no se guarda.

Vamos a escuchar a Orilo y Arlequina,

ellos nos hablan de la Policía Científica.

¡Orilo! Hoy tenemos una misión muy importante.

¡Vamos a ayudar a la policía con la ciencia!

-¡Claro que sí!

La ciencia es de vital importancia

para resolver los crímenes.

Por ejemplo:

Gracias a la ciencia podemos descubrir las huellas dactilares.

-¡Ay, sí! Y el ADN.

Que nos permite saber si una determinada muestra

de un resto humano corresponde

con un determinado sospechoso.

-¿Y qué me dices de la balística?

Si encontramos una bala,

gracias a la ciencia

podemos saber de manera inequívoca

cuál fue el arma que la disparó.

-O el reconocimiento biométrico,

una técnica supernovedosa

que, midiendo las proporciones de la cara,

puede identificar una cara entre multitud de ellas.

-Arlequina, ¿qué es lo que vamos a investigar hoy?

-La desaparición de la tarta de zanahoria de mi abuela.

Aquí estamos, Orilo, en la escena del crimen, ¡ja!

He aquí el plato que albergaba

la tarta de zanahorias de mi abuela.

Y aquí, una taza sospechosa.

-Arlequina, la ciencia no solo ayuda a la policía

con las técnicas de laboratorio.

También la ayuda con el método científico,

que es utilizado para hallar al criminal.

-Sí, debemos tratar este escenario del crimen

como si fuera un auténtico laboratorio.

-Y lo primero que hay que hacer es acotarlo.

Arlequina, acotemos la escena del crimen.

Y lo siguiente es...

te voy a dar tres opciones.

Tenemos que...

¡Eso es!

Tenemos que ponernos a observar.

Observando la escena del crimen

debemos elaborar una hipótesis.

Una idea de lo que ha ocurrido

que nos ayude a dirigir la investigación.

-¡Mira, mira Orilo!

Aquí veo... ¡migas!

Eso significa que no se han llevado la tarta,

sino que se la han comido.

Además, en esta taza quedan restos de leche.

Yo creo que lo que hicieron fue comerse la tarta,

y después beber leche para pasarla.

-¡Qué buena observación, Arlequina!

Coincido totalmente contigo.

Ya tenemos una hipótesis que nos va a ayudar

a dirigir la investigación.

¿Cuál es nuestro siguiente paso, Arlequina?

Os voy a dar tres opciones.

¡Eso es!

Tenemos que hacer pruebas.

Imagínate, Arlequina, que estas migas no fuesen

de la tarta de zanahoria de tu abuela

y fuesen de un merengue cualquiera.

Estaríamos llevando la investigación

hacia un callejón sin salida.

-¡No, no, no!

Las tengo que probar para asegurarme.

Aquí tengo mis pinzas.

Cogeré una de las migas...

¡No hay lugar a dudas!

Orilo, esto es la tarta de zanahorias de mi abuela.

¡Pero qué estoy viendo!

-¿Qué estás viendo? -¡Mira Orilo!

Aquí hay una huella dactilar.

-¡Coincido totalmente contigo!

Las huellas dactilares son una gran herramienta.

Con unos polvillos parecidos a los polvos de talco,

la policía busca y puede visualizar esas huellas dactilares

y entonces deben capturarlas.

¿Cómo lo hacen, Arlequina?

-Mira Orilo, ahora has puesto aquí estos polvillos.

Con una cinta adhesiva podemos capturar la huella

y pegarla sobre una cartulina negra

para poder visualizarla mucho mejor.

(RÍE)

Y ya esto sí nos dará los resultados.

-Arlequina, es genial que la ciencia pueda ayudar a la policía

a resolver crímenes, es algo muy importante.

-¡Oh!

¡Mira Orilo!

Están llegando los resultados por burofax.

Vamos a saber quién fue el culpable.

¿Quién se comió la tarta de zana...?

-Orilo, pero...

¡que te la has comido tú!

-Es verdad, Arlequina, ¡lo confieso!

Es que tenía tan buena pinta...

Y olía tan bien

que no me pude resistir.

-Orilo, solo te puedo decir una cosa:

la próxima vez, comparte.

Nos vemos en nuestra próxima aventura.

¡Adiós!

(Música)

El detective Mapacho aguardaba a solas

en el misterio que le deparaba la noche

mientras las gotas de lluvia

golpeaban suavemente el tejado.

-¿Qué haces, Nacho? ¿Y esa gabardina?

-De repente,

se abrió la puerta.

Entró una persona que medía,

por lo menos,

ocho metros.

Era sospechoso.

¡Estaba claro!

Su barba y sus tirantes así lo indicaban.

-¡Ya lo entiendo!

Estás haciendo de investigador novelesco.

-¡No, listillo!

Hago de detective,

no de investigador.

Nacho Mapacho a tu servicio.

-Bueno, investigador, detective...

ya sabes, son sinónimos.

-¿Eh? ¿Quién es sinónimo?

¿Otro sospechoso?

-No, la palabra.

Ya sabes, sinónimos, antónimos.

-¿Eh?

¿Antónimo?

Ah...

¡Antónimo era otro sospechoso!

"El caso se ponía cada vez más interesante",

dijo el detective Mapacho mientras esbozaba una leve sonrisa.

-Anda, escucha a Juan Carlos,

que él nos habla de qué son los sinónimos y los antónimos.

¡Hola superlingüistas! ¿Qué tal?

Las palabras nos ayudan a comunicarnos.

A entender el mundo que nos rodea

y a expresar lo que sentimos.

¡Menos mal que existe!

Hoy vamos a jugar con las palabras.

¿Te apuntas?

En este juego tienes que encontrar la palabra escondida

que signifique lo mismo que la que aparece destacada

en esta frase.

A ver cuál de estas significa lo mismo:

¡Eso es!

"Enorme", porque puedo decir

que la comisaría de policía es enorme.

Y el significado de la frase no cambia.

Vamos a probar con otra frase.

A ver, ¿cuál puede ser?

¡Eso es! ¡Muy bien!

Consiguieron detener un incendio,

que es lo mismo que si digo "consiguieron detener un fuego".

Pues a estas palabras que significan lo mismo a pesar de ser distintas

las llamamos "sinónimas".

Aquí tienes otros ejemplos de palabras sinónimas.

Ahora vamos con palabras que signifiquen lo contrario.

Estas me encantan, son superdivertidas.

¡A jugar!

Si digo...

Arriba de la colina hay una casa.

¿Qué palabra será la contraria?

¡Eso es!

Abajo.

Lo contrario es:

Abajo de la colina hay una casa.

Vamos con otra.

¿Cuál será la palabra que significa lo contrario?

¡Eso es!

Este verano la playa estaba limpia.

Es todo lo contrario de "está sucia".

Bueno, tenemos más ejemplos,

como por ejemplo difícil y fácil.

O estrecho y ancho.

O corto y largo.

(RÍEN)

¿Y si intentamos hablar diciendo lo contrario

de lo que realmente queremos decir?

Le damos la vuelta con un antónimo.

¡Eso es!

Lo contrario sería:

Eso es más cercano a la realidad.

Otra más.

Lo contrario sería:

Y la última:

Lo contrario sería:

Hoy hemos aprendido que los sinónimos son

palabras distintas que tienen el mismo significado

y los antónimos son palabras que significan

totalmente lo contrario.

Nuestra lengua es tan rica que tiene mucha variedad de palabras

que expresan lo mismo.

Y otras para decir cosas totalmente opuestas.

Practica en casa. ¡Nos vemos pronto!

Está muy claro.

Dos pasos hacia delante.

Uno y dos.

A ver:

Otro hacia la izquierda.

Y otro hacia la derecha.

Es aquí, seguro.

-Nacho, ¿qué haces?

-Detective Mapacho para ti.

¿Qué voy a hacer?

¡Estoy investigando!

A ver...

Dos pasos más...

Vale... ¡ah!

¡Eso me conduce a ti!

¡Eres tú el culpable!

-¿Cómo? ¿Yo?

¿Culpable de qué?

-No te hagas el inocente conmigo.

¡Me has cogido la comida que tenía para merendar!

-A ver, déjame ver ese mapa de flechas.

Hombre, es que aquí pone símbolos de más que, menos que,

¡eso es una operación matemática!

-Ya lo sé, James,

¡está clarísimo!

Mi instinto matemático me ha conducido hasta ti.

¡Tú eres el culpable!

-Que no.

Mira, le vamos a preguntar a Miguel y que él nos lo explique.

Ya verás cómo nos da la razón.

¡Hola matemaníacos y matemaníacas!

Hoy voy de policía matemático.

Los policías matemáticos utilizamos símbolos

que son como las señales de tráfico.

Gracias a las señales de tráfico podemos saber

los coches y los peatones cuándo podemos avanzar o no.

O hacia dónde tenemos que ir.

¿Quieres saber para qué se utilizan los símbolos?

¡Pues aquí tenemos a los cocodrilos comilones!

Son el equivalente a los símbolos matemáticos

Y dirán: ¿Y para qué nos sirven estos símbolos matemáticos?

Pues estos símbolos nos van a servir para comparar números.

Recuerden una cosa:

el cocodrilo siempre tiene hambre.

Así que la boca siempre va a apuntar al número mayor.

Salvo cuando son iguales y el cocodrilo se queda sin comer.

¡Ahora vamos a jugar!

Vamos a utilizar los símbolos matemáticos.

Vamos allá con el primer ejemplo.

Vemos aquí el 5, ¿y qué otro número?

El 8.

Y tenemos que compararlos.

Podemos decir:

Vamos a recordar a los cocodrilos comilones.

Recuerda que el cocodrilo siempre tenía hambre.

Es decir, que siempre apuntaba hacia el mayor la boca.

Entonces, ¿cómo sería?

Pues sería este símbolo que ven aquí.

5 es menor que 8.

El símbolo matemático sería el siguiente.

5 es menor que 8.

¡Genial!

Vamos allá con otros dos números.

El 17.

¿Y qué otro número?

El 12.

Venga, tenemos que compararlos.

Podemos decir:

Recuerden a los cocodrilos comilones.

El cocodrilo tiene siempre hambre.

Entonces, ¿cómo hacemos?

Si la boca del cocodrilo va hacia el número mayor,

¿esto qué sería?

17 es mayor que 12.

17 es mayor que 12 que, matemáticamente,

sería así:

17 es mayor que 12.

¡Estupendo!

Les voy a proponer un reto mucho más complicado.

Tienen que estar muy pendientes.

Vamos a verlo.

Por aquí pongo 4 más 5

Bien.

En el otro lado voy a poner la siguiente operación:

2 más 7.

Y tenemos que compararlas.

Comparar las operaciones.

4 más 5, ¿qué puede ser?

Bueno, lo primero que tenemos que hacer, ¿qué será?

Pues será resolver las operaciones.

¿Cuánto nos da 4 más 5?

4 más 5 es ¿cuánto? Es 9.

Genial.

¿Y 2 más 7?

2 más 7 también es 9.

Estupendo.

Entonces, ¿qué pasa?

¿Qué símbolo pongo?

4 más 5 es igual...

que 2 más 7.

El cocodrilo se queda sin comer.

Matemáticamente pondríamos así:

Lo siguiente, este símbolo.

El igual.

Es un símbolo muy poderoso.

¿Por qué?

Porque lo que quiere decir es que la cantidad

que está en este lado es igual, la misma,

que la cantidad que está en el otro.

Recuerda, hemos visto los símbolos matemáticos

que nos ayudan a comparar números.

Hemos visto el símbolo del mayor que, el menor que

y del igual.

Y también hemos hecho el equivalente con nuestros cocodrilos comilones.

¿Te apetece hacer tus propias señales de tráfico

de cocodrilos comilones?

¡Ánimo!

Hasta la próxima, matemaníacos y matemaníacas.

¡Hombre, si es mi amiga Conexa!

¡Cuánto tiempo!

-El tiempo mañana será nublado con leves chubascos.

-Sabía que dirías eso.

Solo tengo una pregunta.

¿Dónde estuviste a las 13:14?

-Entendido, Conexa se desconectará durante 13 horas y 14 minutos.

-¡Ajá!

¡Lo que diría una culpable!

¡Lo sabía!

¿Fuiste tú la ladrona de la basura?

¿Dónde la escondes?

¡Confiesa!

-Hola Nacho.

¿Qué ocurre aquí?

-Ay, yo aquí, resolviendo un caso.

Conexa fue la que me robó mi merienda.

-¿Conexa es la culpable?

Pero a ver, ¿tienes alguna prueba?

-Sí, seguro que fue ella.

Además, no se me ocurre otra persona.

¡Eh!

¿Qué es eso de una prueba?

-Nacho, ¿no sabes lo que son las pruebas?

Mira, vamos a escuchar a Álex,

que nos enseña cómo hacer una investigación criminal.

Hola.

Necesito tu ayuda,

porque acabo de llegar a mi casa

y creo que alguien ha estado aquí.

¿Lo investigamos juntos?

Toma nota de lo que hago,

porque tenemos un reto.

Todo investigador viste adecuadamente

y usa herramientas que le ayudan en sus pesquisas.

Una lupa te ayudará a buscar pistas

y a seguir cualquier rastro.

Esta gorra y este abrigo de Sherlock Holmes

no son obligatorios,

pero ayudan a meterse en el papel de detective.

Busca tu atuendo de investigador y póntelo.

Quien entró en mi casa tenía llave.

La cerradura no está forzada.

Y al salir dio dos vueltas.

Cosa que yo nunca hago.

Mi lista de sospechosos,

imprescindible en cualquier investigación,

se reduce a mis padres y mi abuela,

que tienen llave de este piso.

Elabora una lista con el móvil de cada uno de ellos.

(Teléfono)

¡No el teléfono!

Sino la motivación del sospechoso al cometer el delito

o el beneficio que obtiene al cometerlo.

Ninguno de mis sospechosos tiene un móvil claro.

¿Para qué iba mi familia a venir a mi casa si yo no estoy?

El siguiente paso es interrogar a tus sospechosos.

Esta técnica, usando las preguntas adecuadas,

les hará confesar.

Úsala con ellos.

Si se dejan, claro.

Yo voy a rastrear todo a fondo.

Empezando por la basura.

Aquí tengo el cubo de la basura.

Los criminales a veces dejan pistas.

Por ejemplo:

Mi sospechoso o sospechosa

no recicla.

Porque ha mezclado todos los restos que ha ido dejando.

Además, el cubo estaba vacío cuando salí.

Y mira.

¡Harina!

Cáscaras de huevo.

Y una naranja cortada por la mitad.

¿Qué significará?

Exacto.

La han exprimido.

Y mira:

¿Por qué habrán rallado la cáscara?

Veamos qué más hay.

Aceite.

Leche.

¿Y estos papeles?

¡Deberían estar en el contenedor azul!

¿Qué delito se comete con leche,

huevos, corteza y zumo de naranja,

azúcar, harina,

aceite y levadura?

¡Eso es!

Un bizcocho.

¡Pero no cualquier bizcocho!

Este borde tostado indica que...

¡Han horneado magdalenas!

¡Esto es un crimen!

A ver, a ver, a ver.

Realmente, hornear magdalenas no es delito...

...todavía.

Porque como profesor de educación física

tengo mis dudas.

Así que, alguien que tenía llave entra en casa,

hornea magdalenas y se las lleva.

Eso debería estar prohibido.

¡Migas!

Um, magdalenas recién hechas.

¡Hormigas!

Y en fila.

Seguro que me llevan hasta donde están las magdalenas.

Misterio resuelto.

Efectivamente, alguien vino, hizo magdalenas,

y las dejó fuera por una razón muy simple.

Aún están calientes.

Mi lista de sospechosos se reduce a una persona.

Este olor a naranja tiene claramente el toque de mi abuela.

Así que ya sabes:

¡Hasta luego!

¡Alto!

-¿Alto?

¿Qué pasa, Nacho?

-Nada, te he visto un alto.

O sea, tú.

Debes comer mucho para ser tan alto, ¿no?

¿Basura quizá?

-Nacho, ¿otra vez con las acusaciones?

Ya te he dicho que no he sido yo. -¡No cuela, James!

Caerá el peso de la ley sobre ti.

¡Me robaste mi merienda!

-A ver, vamos a pensar un poco.

¿A qué hora se llevaron tu preciada basura?

-Pues cuando pasó el camión de basura.

¿Pero eso qué tiene que ver?

-Ahí lo tienes, Nacho, fue el camión de la basura

el que se llevó tu merienda.

-¡Ah, tiene sentido!

¡Qué confusión más tonta! ¿No?

-¿Has visto? Menos mal que no hemos llamado a la policía.

(Sirenas)

-¿Quién? ¿Yo? ¿Llamar a la policía?

¡Qué locuras dices! ¡No!

Esto... James, debo irme marchando.

Porque empieza "Está mapachando".

-Pero oye, Nacho, ¿y esas sirenas?

¡Nacho!

(Música)

Bienvenidos y bienvenidas a "Está mapachando".

El noticiero mapache

que da las noticias "pache lo que pache".

El detective mapacho está presentando.

Indirectamente desde la comisaría viene James van der Lust.

¿Qué tal estás?

-Pues la verdad es que no muy bien, Nacho,

vengo de comisaría, de un interrogatorio.

Y todo por tu llamada a la policía.

-Vaya, qué cosas pasan, ¿verdad?

Buenas noticias,

animales de todo el mundo

se convierten en detectives tras ver este programa.

Mirad cómo este gatete tan majete

sigue a un sospechoso sigilosamente.

Un buen detective.

"Mapachionantes" imágenes.

-Bueno Claners, se nos acaba el tiempo.

Hasta aquí el programa de hoy.

-Un momento, James,

¡si falta la parte más emocionante del programa!

-Espera, no me digas que has hecho una entrevista.

-Más o menos, es como una entrevista pero mejor.

El detective Nacho Mapacho

ha realizado un interrogatorio a Conexa.

Conexa.

¿Sabes por qué estás aquí?

-Hola Nacho, estoy aquí porque fui fabricada para ello.

-Sí, sí...

Yo no me refería a eso.

Dejemos las cosas claras, que ya es hora.

-La hora actuar es las 4:30.

-¡Ah!

Me estás cambiando de tema, ¿eh?

¡Acabarás entre rejas durante mucho, mucho tiempo!

-El tiempo actual es soleado con alguna nube.

-¡Te estás pasando de lista!

-La lista de la compra es:

1. Sandía.

2. Papel higiénico.

3. Garbanzos.

-¡Ah!

Tú lo has querido.

Voy a traerte una ficha policial.

Prepárate para una foto.

-Realizando foto.

-¡Ay!

¡Ay, Conexa!

Que las fotos las tengo que hacer yo.

-De acuerdo, realizando muchas fotos.

-¡Ay!

Ay, ya sé que soy guapo,

¡pero para de hacer fotos!

¡James, socorro!

Bueno, Claners, hasta aquí el programa de hoy.

Y recordad que la policía está para servir, proteger e investigar.

¡Hasta pronto!

(Música)