Estados Unidos negocia entre presiones y contra reloj los aranceles con sus socios: del 15% a la UE al 50% para Brasil
- Este viernes, 1 de agosto, entran en vigor los llamados aranceles "recíprocos" que Trump anunció en abril
- La Unión Europea, Reino Unido o Japón han conseguido mejoras, mientras China, Canadá o India siguen negociando
"La fecha límite del 1 de agosto se mantiene firme y no se prorroga". Así de contundente se mostró este miércoles el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, acerca de la entrada en vigor de los llamado aranceles "recíprocos" que el país pretende imponer a prácticamente todo el planeta desde este viernes. En los últimos días se han sucedido los acuerdos, por ejemplo, con la Unión Europea, Japón o Taiwán, si bien otros socios comerciales apuran los últimos coletazos de la negociación para intentar reducirlos.
El objetivo de estos gravámenes es revertir el déficit comercial respecto a Estados Unidos, aunque en algunos países —como España— no sea así. No obstante, los expertos alertan de que la entrada en vigor de estas tarifas puede traducirse en un aumento de la inflación e, incluso, en una recesión económica. El mismo Trump ha reconocido que podría haber un periodo de "transición" dolorosa para los ciudadanos estadounidenses tras su puesta en marcha.
El acuerdo con Canadá o India, en el aire
A falta de pocas horas para que cierre el plazo establecido por la Administración estadounidense, países como Canadá o India siguen sin tener un acuerdo atado.
En el caso del país asiático, Trump amenaza con imponer un arancel del 25% a partir del 1 de agosto a los productos indios importados, que incluyen una penalización por mantener los vínculos comerciales con Rusia a pesar de las sanciones. Fuentes del Gobierno de la India aseguraron este miércoles que han "tomado nota" de las declaraciones del presidente estadounidense y "están estudiando" las implicaciones que puede tener.
Tampoco hay un acuerdo cerrado con Canadá. De hecho, se han alejado las posiciones en las últimas horas después de que el gobierno canadiense anunciase este miércoles su intención de reconocer el Estado Palestino, algo que para Trump dificulta "mucho" llegar a un pacto comercial que evite que las importaciones canadienses excluidas del tratado comercial que les vincula (T-MEC) sean gravadas con un arancel del 35 %.
México logra una prórroga sobre la bocina
En la víspera del fin del plazo, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha pactado con Trump una prórroga de 90 días del acuerdo comercial vigente. "Seguirá pagando un arancel del 25% sobre el fentanilo, un arancel del 25% sobre los automóviles y un arancel del 50% sobre el acero, el aluminio y el cobre", ha precisado el magnate en un mensaje en la red social Truth al término de su conversación telefónica.
Según Trump, el país vecino se compromete a eliminar "inmediatamente sus barreras comerciales no arancelarias" y a mantener la "cooperación en la frontera" en cuestiones de seguridad, drogas e inmigración, mientras continúan negociando los términos de sus relaciones futuras. México, a cambio, ha logrado evitar el aumento de gravámenes y gana tiempo para "construir un acuerdo de largo plazo", en palabras de Sheinbaum en X tras la "muy buena llamada" con Trump.
Arancel del 50% a Brasil por "politizar" el juicio contra Bolsonaro
No es la primera vez que Donald Trump mezcla lo político con la amenaza de gravámenes. El magnate ha decidido aplicar un arancel para Brasil del 50% en represalia por el juicio que enfrenta el expresidente Jair Bolsonaro por golpismo.
La Casa Blanca justificó los aranceles alegando que Brasil representa "una amenaza inusual y extraordinaria" para la seguridad nacional y la economía de EE.UU. Ante ello, Lula ha respondido en una entrevista con The New York Times, que recoge Efe, que "nunca negociará como si fuera un país pequeño contra uno grande" y dijo que Brasil "ya ha vivido dictaduras" y "no quieren más".
Según la Confederación Nacional de la Industria (CNI) de Brasil, este gravamen del 50% reducirá en un 0,16% el PIB brasileño y destruirá al menos 110.000 empleos, con efectos potencialmente dañinos para sectores estratégicos de una economía ya en proceso de desaceleración.
Se reanudan las conversaciones con China
Entretanto, Estados Unidos y China han retomado esta semana sus negociaciones en Suecia con el fin de prorrogar la pausa arancelaria de 90 días que ya acordaron a finales de mayo en Ginebra (Suiza), que vence el 12 de agosto.
En la cita de Suiza, ambos países acordaron reducir significativamente los aranceles mutuos a la importación durante un periodo de 90 días: Washington del 145% al 30% y Pekín del 125% al 10%. No obstante, no tardaron en acusarse de incumplir lo acordado y durante estas últimas semanas han intercambiado fuertes críticas por los semiconductores avanzados que impulsan la inteligencia artificial, las tierras raras y los visados para estudiantes chinos en universidades de EE.UU.
La UE acepta un arancel del 15%
A la espera del acuerdo con China, Estados Unidos sí ha logrado cerrar un pacto con su mayor socio comercial, la Unión Europea, que limita del 30% inicial al 15% el gravamen general a las importaciones comunitarias.
No obstante, la Comisión Europea asegura que se trata de un acuerdo político que no es jurídicamente vinculante y que, más allá de adoptar las medidas inmediatas comprometidas, "seguirán negociando, de acuerdo con sus procedimientos internos pertinentes, para que se aplique "plenamente". De esta forma, este gravamen aún debe ser detallado en una declaración conjunta que se espera de forma inminente.
A la espera de conocer los detalles, la Comisión Europea ha confirmado este jueves que el vino y las bebidas espirituosas estarán entre los productos afectados, pese a que el sector confiaba en quedar excluido. También se gravará con un 15% a los automóviles europeos, que en este caso muestra un cierto alivio pues el gravamen se rebaja desde el 27% inicial.
Tras conocer el pacto, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, indicó que "respalda el acuerdo" comercial entre la Unión Europea y Estados Unidos, pero que lo hacía "sin ningún entusiasmo". En Europa, los socios más críticos hasta ahora han sido Francia y Hungría.
Acuerdos de última hora con Corea del Sur y Taiwán
También han sido fructíferas las conversaciones con Corea del Sur y Taiwán en este tiempo. En el caso del primero, el presidente de Estados Unidos ha anunciado este miércoles un pacto para rebajar los aranceles a las importaciones surcoreanas del 25% al 15%. Según Trump, también contempla que el país asiático invierta 350.000 millones de dólares en EE.UU. y que adquiera 100.000 millones de dólares en gas natural licuado y otros productos energéticos .
Respecto a Taiwán, los equipos negociadores de ambos países han alcanzado este jueves "cierto consenso" en temas como aranceles, barreras comerciales no arancelarias y "resiliencia de las cadenas de suministro", ha anunciado la portavoz del Gobierno isleño, Michelle Lee, en una comparecencia de prensa que recoge Efe.
En su caso, estos gravámenes ascendían al 32% en abril, cuando Trump anunció sus denominados "aranceles recíprocos". Ahora, ambas partes están trabajando en una declaración conjunta sobre los resultados de las conversaciones.
Filipinas, Vietnam o Japón consiguen mejoras
Otros socios comerciales importantes del Sudeste Asiático, como Filipinas, Vietnam e Indonesia, también han logrado acuerdos significativos para reducir aranceles y facilitar el comercio con el gigante norteamericano.
Filipinas ha conseguido fijar su arancel en un 19%, una ligera reducción respecto a la amenaza inicial del 20%. Mientras que las exportaciones de Vietnam serán grabadas con un 20% (frente al 46% inicial) y se aplicará un arancel del 40% sobre cualquier transbordo, en referencia a la práctica de enviar productos al país norteamericano a través de un tercer país para ocultar su verdadero origen y así evitar gravámenes más altos.
Por su parte, Indonesia finalmente pagará un 19% de aranceles, poco después de que Trump amenazase con imponer un gravamen del 32%. Y Tailandia y Malasia han avanzado este jueves que sus acuerdos comerciales con la primera economía mundial podrían conocerse en las próximas horas.
En el caso de otros países como Camboya o Laos, que en principio fueron muy penalizados por Washington por actuar como punto de transbordo de productos chinos, se desconoce a cuánto ascenderán los aranceles.
Por último, hace unos días el presidente estadounidense anunció un acuerdo comercial "masivo" con Japón que resultará en una inversión de 550.000 millones de dólares en la economía estadounidense y en el pago de un arancel del 15%. Además, se reducirán los gravámenes adicionales sobre los automóviles japoneses al 12,5%, desde el 25% inicialmente planeado.
Y mucho antes, en mayo, se cerró un pacto "completo e integral" con Reino Unido, que deja el gravamen sobre productos británicos en el 10%, incluidos los vehículos Rolls Royce (cuyo arancel estaba previsto inicialmente en el 25; y que excluye a su sector aeroespacial, un área clave para su industria. Sin embargo, aún está negociando para eliminar tarifas sobre el acero y el aluminio del 25%.