Chile da su mayor giro a la derecha en 35 años de democracia. El ultraconservador José Antonio Kast cosecha un triunfo histórico.
De 59 años, abogado, ultracatólico e hijo de inmigrantes alemanes con pasado nazi, Kast ha pedido paciencia a los chilenos porque, dice, les queda un año muy duro. Su hermano trabajó para la dictadura de Pinochet y, aunque en esta campaña no ha mencionado al régimen militar para evitar polémicas, el nuevo presidente electo es un defensor de su legado.
Tras la victoria de Kast en las elecciones chilenas, la investigadora del CIDOB, Anna Ayuso, rebaja en 'Las Mañanas de RNE' el impacto del discurso del candidato de ultraderecha en la política del país: "Una cosa es lo que Kast piense y otra lo que va a poder hacer". Ayuso asegura que Chile es un país "diferente" y pese la cercanía de José Antonio Kast con la doctrina de Pinochet cree que "no es posible" una vuelta "hacía atrás".
Ayuso explica que la victoria de Kast es "histórica" por la suma de las derechas, pero a la vez pronostica que será difícil gobernar porque los diferentes partidos "no piensan" todo lo mismo y van a tener que negociar pese a ser el "grupo mayoritario"
El ultraderechista José Antonio Kast, que defiende gran parte del legado del dictador Augusto Pinochet (1973-1990), ha ganado con amplia ventaja a la comunista Jeannette Jara en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales chilenas de este domingo. Estados Unidos ha felicitado al ganador y ha considerado que, bajo su liderazgo, Chile pondrá fin a la inmigración ilegal y revitalizará de la relación comercial bilateral.
Según los datos difundidos por el Servicio Electoral de Chile (Servel), el líder del Partido Republicano ha obtenido el 58,16% de los apoyos y la aspirante de la coalición de izquierdas apoyada por el actual Gobierno de Gabriel Boric ha cosechado el 41,84%. Al conocerse los datos, Jara ha reconocido su derrota y ha comunicado que ha llamado a Kast para desearle éxito.
El aún jefe de Estado, Boric, ha llamado al ya presidente electo para felicitarle por el triunfo. Por su parte, Kast ha deseado que sea "una transición muy ordenada y respetuosa" y le ha adelantado que "por supuesto" que después del 11 de marzo, cuando tomará posesión, le gustaría "mucho" contar con sus opiniones.
Esta es la tercera vez que Kast, abogado de ascendencia alemana de 59 años, intenta llegar al Palacio de la Moneda, tras las elecciones de 2017, en las que no pasó de la primera vuelta, y 2021, cuando fue superado porBoric.
En Reino Unido, el líder ultra Nigel Farage es el favorito en todas las encuestas para ganar las próximas elecciones. A pesar de ello, tanto él como su formación han protagonizado varios escándalos recientemente.
Denuncia una campaña política en su contra y niega acusaciones como la de que era admirador de Hitler en su juventud.
50 años después de la muerte del dictador Francisco Franco, las nuevas generaciones no ven la dictadura como algo necesariamente negativo, pese a no vivirla. Según el CIS, el 20% de los jóvenes entre 18 y 24 años cree que la dictadura fue "buena o muy buena". Los expertos creen que esta tendencia se debe a que no se ha abordado el franquismo de manera adecuada en la educación obligatoria y a que los jóvenes ven como han perdido estatus respecto a sus padres. Además, la extrema derecha ha normalizado ciertos postulados franquistas. Las redes sociales también juegan un papel en este blanqueamiento ya que propagan bulos y mitos del franquismo. Es un reportaje de Mar Lupión.
En Chile, dos modelos políticos totalmente opuestos competirán por la presidencia. La comunista Jeannette Jara y el ultraconservador José Antonio Kast han pasado a la segunda vuelta. Por votos, ha ganado la candidata oficialista pero la ultraderecha ha tenido una enorme subida en las urnas.
Tras el resultado de la primera vuelta de las elecciones presidenciales de Chile, el candidato de ultraderecha José Antonio Kast, lidera las opciones para convertirse en el nuevo presidente. Según el investigador principal para América Latina del Real Instituto Elcano, Carlos Malamud, Kast podría "concentrar el voto de las 3 derechas" del país ya que el sus candidatos le han dado su apoyo públicamente. Aún así, Malamud recuerda que "las elecciones hay que ganarlas" y cree que Kast "no está exento de cometer errores" antes de la cita electoral del 14 de diciembre. Ante el avance de la ultraderecha en Chile, Malamud apunta a que se debe a un "descontento" con el gobierno de Gabriel Boric y a que los jóvenes ven la dictadura de Pinochet como algo "remoto" y dan la democracia por "conquistada".
Segundo capítulo de "Después de Franco… ¿qué?", monográfico especial con motivo del 50 aniversario de la muerte del dictador.
El sector inmovilista del régimen, "el búnker", creyó erróneamente que las instituciones y el pueblo permitirían mantener un franquismo sin Franco. Por eso fueron hostiles desde el principio al proceso de transición. Fuerza Nueva, dirigida por Blas Piñar, fue el partido más representativo de esa extrema derecha que rechazaba en bloque la democracia liberal. Aunque el peso electoral de los nostálgicos fue mínimo, su influencia tuvo gran importancia por conexiones con el mundo económico y los aparatos del Estado. La principal amenaza para la naciente democracia fue el levantamiento militar consumado en la intentona golpista del 23F. Si Fuerza Nueva representaba el franquismo político, la Alianza Popular de Manuel Fraga pretendió recoger, en su primera etapa, el voto del llamado "franquismo sociológico": clases medias que tenían una visión positiva de la dictadura. A partir de 1982 la ultraderecha se reinventa y el discurso neofranquista cede paso a otras reivindicaciones, en buena medida importadas de sus homólogos europeos: lucha contra la inmigración, cuestionamiento de la Unión Europea, denuncia de la inseguridad en las calles... Pero ninguno de los partidos surgidos en ese espectro ideológico tuvo una relevancia significativa hasta la aparición de Vox. En la actualidad se habla del resurgimiento de un cierto franquismo sociológico entre los más jóvenes, la visión idealizada de un régimen que no vivieron.
Este documental, con guion de Luis Zaragoza y diseño sonoro de Mayca Aguilera, cuenta con las voces de los historiadores Xavier Casals, autor de libros como 'La transición española: el voto ignorado de las armas', y Carme Molinero, coautora de 'La transición: historia y relatos'. Participan también los periodistas Juan Fernández-Miranda ('Objetivo: democracia') y Mariano Sánchez Soler ('La larga marcha ultra'), además del exdirigente político y sindical Nicolás Sartorius, al que se puede leer en 'El final de la dictadura: la conquista de la democracia en España'. El programa se completa con sonidos del Archivo RTVE y del Archivo Histórico del Partido Comunista de España.
Un avión de combate de la fuerza aérea chilena bombardea el Palacio Presidencial de Santiago de Chile. Es el inicio del golpe militar comandado por Agusto Pinochet. El país se sumió en la oscuridad de una dictadura que duró casi 20 años. Cinco décadas después, tres de los principales candidatos a presidente lo siguen justificando.
El ultraderechista Johannes Kaiser tenía tres años cuando el golpe de Pinochet. Otra candidata, considerada de la derecha tradicional, Evelyn Matthei, e hija de un General de la Junta Militar, también cree que fue necesario.
"La derecha nunca abandonó el apoyo a la dictadura. Nunca pidió perdón", explica Germán Correa, exministro del Interior y profesor de sociología. Correa, que llegó a conocer al presidente Allende, unas semanas antes del golpe, sostiene que la democracia está en crisis en todo el mundo y eso explicaría esta regresión a épocas golpistas. "Es muy probable que si la derecha gana en la segunda vuelta, como vaticinan las encuestas, Chile tenga por primera vez un presidente que avala el golpe militar de 1973", avisa Correa.
El acto convocado en el campus de la Universidad de Navarra por el activista político Vito Quiles ha provocado enfrentamientos este jueves en el mismo recinto universitario. Las protestas se han extendido también a las calles de Pamplona, donde un grupo de personas se ha enfrentado a la Policía Nacional, que ha hecho uso de material antidisturbios. Según han informado fuentes policiales, no consta por el momento que se haya producido ninguna detención relacionada con estos hechos.
La Policía Nacional ha formado un cordón de agentes entre ambos grupos, que han quedado separados por unos 20 metros. Los jóvenes contrarios al acto han recorrido el campus coreando gritos como "Fuera fascistas de nuestras calles"; también han lanzado objetos y encendido bengalas. Esto ha provocado la intervención de los agentes de la Policía Nacional, que han hecho uso de material antidisturbios.
El historiador Mark Bray, especializado en antifascismo, ha huido de Estados Unidos por amenazas de muerte, ahora está en España. Para la Administración Trump, él es un cabecilla del movimiento Antifa, que ha declarado como "organización terrorista". Él denuncia una persecución. Se inició con esta lista negra que señala a profesores universitarios. La publica el movimiento ultraconservador del fallecido Charlie Kirk.
"Tengo otros amigos profesores que están en la lista de Turning Point USA y han recibido amenazas también, algunas de muerte. Mi caso es un poco excepcional, pero no es tan diferente porque desde su perspectiva la universidad es el enemigo", explica Bray.
Trump ha alabado públicamente el papel de Kirk en las universidades. "Antes eran lugares peligrosos para los conservadores... y ya no", ha dicho. Bray ve que este segundo mandato de Trump es mucho más autoritario que el primero y advierte del peligro.
"Una estrategia del fascismo es que 'oh, algunas cosas son broma'; pero ahora estamos viendo que no es una broma, que está atacando inmigrantes, gente trans y queer, gente negra, activistas, entonces estamos en peligro allá y tenemos que resistir".
Anima a los estadounidenses a organizarse y luchar por una democracia que muchos denuncian: está en retroceso. Los últimos, más de 300 antiguos altos cargos de seguridad e inteligencia.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha hecho un llamamiento a la "movilización progresista mundial" ante el avance de la ultraderecha en todo el mundo. Sánchez asegura que España no está al margen, lo ha dicho en la clausura del congreso del partido socialista europeo que se celebra en Ámsterdam.
La Ertzaintza ha detenido a 17 jóvenes este mediodía en Vitoria, acusados de desórdenes públicos, tras unos incidentes registrados por una contramanifestación de más de un centenar de personas a una concentración de Falange Española, con motivo del día de la Hispanidad, según ha informado el Departamento vasco de Seguridad
El estadio State Farm de Glendale de Arizona se ha teñido este domingo con los colores patrios de Estados Unidos. Más de 60.000 personas han despedido a Charlie Kirk, el 'influencer' ultraderechista asesinado el pasado 10 de septiembre. La ceremonia, que ha contado con la solemnidad de un funeral de Estado, ha reunido a las voces más fuertes del movimiento MAGA (Hacer América Grande de Nuevo, por sus siglas en inglés), y ha convertido el último adiós del activista en un verdadero mitin político. El Departamento de Seguridad Nacional ha elevado al máximo la protección del evento, con un dispositivo que se reserva para ocasiones de alto perfil como la Super Bowl.
Arropado por varios miembros de su Gobierno, Donald Trump ha definido a Kirk como "uno de los más grandes patriotas de la historia", "un gigante de su generación" y "el mayor evangelista de la libertad". Entre ovaciones y un discurso que ha durado casi de 40 minutos, ha denunciado al "monstruo asesino radicalizado" que, según él, lo mató "por decir la verdad". Ha insistido en que su muerte no "ha sido un ataque contra un hombre o una idea, sino contra Estados Unidos". Fiel a su estilo combativo, ha vuelto a cargar contra "la izquierda radical", asegurando que su "violencia" amenaza los dos de los grandes mantras del republicanismo: la fe y la libertad.
Durante su discurso, Erika Kirk ha afirmado "que perdona" al asesino de su marido "porque es lo que hizo Cristo". Su último adiós, salpicado por narrativas ultraarreligiosas, ha terminado por certificar la total simbiosis entre el conservadurismo cristiano y el trumpismo.