Von der Leyen anuncia que el plan para dejar de depender del gas ruso estará listo en 15 días tras varios retrasos
- El objetivo de la UE es poner fin a la dependencia de combustibles fósiles rusos para 2027
- El Ejecutivo comunitario destaca las asociaciones con EE.UU., Noruega, Japón o Corea para diversificar el suministro


La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha anunciado este jueves que en dos semanas se presentará su estrategia para garantizar la independencia de la Unión Europea de las importaciones de combustibles fósiles rusos. Este es un plan que la líder alemana había comprometido para sus primeros 100 días de mandato y que ya se había retrasado en varias ocasiones.
La política europea ha indicado que, de esta manera, los Veintisiete dejan de "depender de una potencia hostil" para las necesidades energéticas en la cumbre sobre el futuro de la seguridad energética. La reunión se ha celebrado este jueves en Londres y ha participado también el primer ministro británico, Keir Starmer.
La presentación de esta hoja de ruta se había retrasado ya en dos ocasiones. Esta demora ha sido atribuida por el comisario de Energía y Vivienda, Dan Jorgensen, a la dificultad para poner fin a la dependencia de combustibles fósiles rusos en la UE en 2027. Asegura que, "de haber sido fácil, se habría logrado hace tres años".
Destacan los esfuerzos realizados
Al respecto, la presidenta del Ejecutivo comunitario ha destacado los esfuerzos que ha realizado el bloque para pasar de importar el 45% del gas de Rusia en 2022 al 18% actual.
"Pasamos de uno de cada cinco barriles de petróleo a uno de cada cincuenta y pasamos a no importar carbón de" ese país. Afirma que la UE ha conseguido reducir sustancialmente la financiación de la economía de guerra rusa y reforzar la seguridad energética.
Además, ha precisado que, para este logro, han sido cruciales las asociaciones energéticas de la UE, para diversificar el suministro, con Estados Unidos, Noruega, Japón o la República de Corea.
"Estas asociaciones energéticas, incluidas las importaciones de Ganas Natural Licuado (GNL) de EE.UU., siguen teniendo una importancia estratégica para la UE", ha subrayado.
Reino Unido no se queda de "brazos cruzados"
El primer ministro británico también ha destacado la necesidad de cooperar en materia energética para lograr "que la energía no sea una fuente de vulnerabilidad, sino de fuerza". Ha indicado que otro de los objetivos es proteger a todas aquellas familias y empresas que "han pagado el precio de la militarización de la energía por parte de Rusia".
"Estamos pagando el precio de nuestra exposición durante muchos años a la montaña rusa de los mercados internacionales de combustibles fósiles, dejando la economía vulnerable a los designios de dictadores como Putin", ha lamentado Starmer.
Además, ha defendido la determinación actual para afrontar el problema "en un mundo más incierto" ante el que no piensa quedarse "de brazos cruzados", sino que dará "un paso al frente".