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Iberia presenta un ERE con una reducción de plantilla de 3.807 empleados

  • Son 2.735 trabajadores de tierra, 759 tripulantes de cabina y 313 pilotos
  • Justifica los despidos para "detener las pérdidas" y propone rebajas salariales
  • Tras el ERE, los pilotos se han sumado a la huelga convocada para marzo

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Iberia propone reducir su plantilla en 3.807 personas

La compañía International Airlines Group ha iniciado el proceso formal del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectará a 3.807 empleados, el 19% de la plantilla, que asciende a unos 20.000 trabajadores. La empresa, fruto de la fusión de Iberia con British Airways, lo ha comunicado en un hecho relevante a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

IAG anuncia que ha informado a los empleados, representantes sindicales y al Ministerio de Empleo de su intención de reducir la plantilla en más de 3.800 personas.    A partir de ahora, la dirección de Iberia y los sindicatos dispondrán de un plazo de 30 días para negociar el ERE. La aerolínea ha rebajado su propuesta inicial que elevaba el número de despidos hasta 4.500.

Fuentes sindicales han detallado que los despidos se producirán a partir del 14 de marzo y hasta el 31 de diciembre de 2013 y que los trabajadores afectados tendrán una indemnización de 20 días por año trabajado y un máximo de doce mensualidades.

Los despidos afectan a 2.735 trabajadores de tierra, 759 tripulantes de cabina y 313 pilotos. De los trabajadores de tierra, 360 serían empleados en el aeropuerto de Barajas y 470 en el resto de aeropuertos, 371  en el Departamento de Carga, 389 en el de Comercial , 152 en el Financiero, 531 empleados de la división de Mantenimiento, 72 del Área de Recursos Humanos, 185 repartidos entre el resto de direcciones de producción, 47 de Corporativo, y 158 del Área de Sistemas.

La compañía propone rebajas salariales

Asimismo, la compañía ha presentado un plan de acompañamiento social que pretende reducir el impacto en el empleo y que incluye otro tipo de medidas, como reducciones salariales, congelaciones, incrementos de productividad y medidas de flexibilidad.

Esta situación se produce, según Iberia, después de tres meses de negociaciones infructuosas con los representantes sindicales en los que la aerolínea ha presentado distintas alternativas que permitían alcanzar los objetivos de rentabilidad sin tener que recurrir a los despidos.

La empresa justifica el ERE como "parte del plan de transformación de Iberia cuyo objetivo es introducir cambios estructurales permanentes en todas las áreas de negocio de la compañía con el fin de detener las pérdidas, lo que le permitirá crecer de forma rentable en el futuro".

Fomento pide responsabilidad y los pilotos irán a la huelga

Horas antes, la ministra de Fomento, Ana Pastor, ha vuelto a apelar a la responsabilidad de la dirección de Iberia y de los sindicatos para alcanzar un acuerdo que evite la convocatoria de 15 días de huelga en un sector clave para la economía y el turismo español.

"En España no nos podemos permitir perder más de 10 millones de euros al día, porque esa pérdida va a repercutir en todos nosotros", ha asegurado la ministra, mientras aseguraba que hay que encontrar "puntos de entendimiento, porque de ellos nos beneficiamos todos y si hay desencuentros, perdemos todos". Por ello, ha pedido a la empresa y a los sindicatos que "arrimen el hombro y ayuden a que este país salga de la crisis".

Sin embargo, una de las primeras consecuencias ha sido que los pilotos de Iberia, que han tachado de "inaceptable" el ERE presentado por la compañía, han confirmado que se sumarán a la convocatoria de huelga de marzo planteada por el resto de los trabajadores de  Iberia.

En un comunicado, el sindicato de pilotos Sepla ha recordado a la dirección de la aerolínea que ya existe un Expediente de Regulación de Empleo "voluntario", que cubre las necesidades actuales de la compañía y señala que sigue "firmemente comprometido con los acuerdos de unidad  sindical suscritos entre todos los sindicatos con representación en  Iberia".

Es la primera vez en la historia de Iberia que los sindicatos convocan cinco días consecutivos de huelga, en varias tandas, a los que podrían seguir más después de Semana Santa, según han advertido los propios sindicatos, si no se logra un acuerdo.