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Bankia perdió 19.200 millones de euros en 2012, la mayor pérdida empresarial de la historia

  • La entidad ha recibido casi 18.000 millones del fondo de rescate europeo
  • El total de ayudas públicas inyectadas desde 2010 asciende a 36.000 millones
  • Su presidente afirma que es "la única entidad" que puede devolver esas ayudas
  • BFA perdió 21.200 millones de euros, según ha informado a la CNMV

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Bankia pierde 19.193 millones de euros en 2012, la mayor pérdida empresarial de la historia

BFA-Bankia perdió 19.193 millones de euros en 2012, la mayor pérdida empresarial de la historia de España. Antes de que la entidad fuera nacionalizada, la entidad reformuló sus cuentas de 2011 para reconocer unas pérdidas de 2.979 millones de euros que corregían el beneficio de 300 millones anunciado tres meses antes.

Bankia es una de las entidades españolas que ha tenido que recibir ayuda del fondo de rescate europeo, que le ha inyectado 17.960 millones de euros, incluido el anticipo de 4.500 millones que le había adelantado el FROB. Así, en total, la Comisión Europea ha calculado que la ayuda estatal recibida por BFA–Bankia  "en forma de medidas de recapitalización y relativas a activos tóxicos", unida al rescate europeo, se ha elevado hasta 36.000 millones de euros.

Pese a esas cifras, el presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, ha destacado en una rueda de prensa que la entidad es  "tremendamente solvente y sólida" y que, ahora, "el reto es hacerla rentable". Pese a reconocer ese desafío, el presidente ha afirmado que Bankia es, en estos momentos, "la única entidad que puede devolver las ayudas a los contribuyentes españoles".

El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, ha destacado en una rueda de prensa que la entidad es "tremendamente solvente y sólida" y que, ahora, "el reto es hacerla rentable". Pese a ese desafío, el presidente ha afirmado que Bankia es, en estos momentos, "la única entidad que puede devolver las ayudas a los contribuyentes españoles".

En la presentación de resultados, el banquero ha  recordado que las pérdidas anunciadas están en línea con la  previsión adelantada a finales de noviembre, por lo que no deben ser una  sorpresa.

Mensaje de "tranquilidad" a los siete millones de clientes

"Bankia tiene una calidad a prueba de bombas", ha sentenciado  Goirigolzarri, que también ha reconocido la pérdida  de "atracción" de clientes y la salida de depósitos durante el episodio  de nacionalización. Sin embargo, ha insistido en que la  entidad ha remontado en los dos últimos meses del año esta circunstancia  producida en el verano y ha vuelto a niveles similares a marzo de  2012, antes de la nacionalización.

Goirigolzarri ha querido trasmitir un mensaje de "tranquilidad" a  los más de siete millones de clientes de Bankia y ha descartado  perder cuota de mercado frente a las grandes entidades que no han  requerido ayudas públicas. "La marca está golpeada, pero la  transformación de la entidad ha sido radical", ha enfatizado.

En las cuentas de 2012 presentadas este jueves se recogen también las retribuciones de las dos direcciones que tuvo la entidad el año pasado. Los seis altos cargos de la dirección encabezada por Rodrigo Rato recibieron 3,25 millones de euros entre retribuciones e indemnizaciones (solo en salario, Rato percibió 322.000 euros entre enero y mayo y su consejero delegado, Francisco Verdú, 466.000).

La alta dirección que los sustituyó se redujo a tres personas, que cobraron entre mayo y diciembre 745.000 euros (354.000 euros corresponden al actual presidente Goirigolzarri).

El detonante del rescate europeo de la banca

En mayo del año pasado, BFA-Bankia informó de que necesitaba 19.000 millones de euros de ayuda para poder sanear sus cuentas, una cantidad que -en el momento en que se anunció- suponía más del doble del total de las ayudas públicas concedidas hasta entonces a la banca por el Estado. Esta solicitud de Bankia, desbordó las previsiones del Gobierno y precipitó la petición del rescate bancario a la UE, que se formalizó a principios de junio.

Según ha informado este jueves la entidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la matriz de la entidad, Banco Financiero y Ahorro (BFA) cerró el año pasado con una pérdida de 21.238 millones de euros, después de realizar unas provisiones y dotaciones de 26.845 millones, que incluyen los ajustes derivados del traspaso de activos al banco malo o Sareb.

Bankia registró un ratio de solvencia del 9% el año pasado, "que ascendió al 9,44% tras el canje por acciones de los instrumentos híbridos" como las acciones preferentes, ha explicado la entidad.

Con esas cifras, Gorigolzarri ha insistido -al igual que su número dos, el director general de Presidencia, José Sevilla- que la entidad cuenta con un balance "saneado, solvente y muy líquido".

La exposición inmobiliaria se ha reducido al 3,6%

Para apoyar este argumento, Goirigolzarri ha explicado que, en la actualidad, el balance está saneado porque todas las participadas está ajustadas a precios de mercado y la entidad cuenta con una exposición al riesgo promotor "muy reducida": el 3,6% de la cartera. Esa reducción a la exposición inmobiliaria ha contribuido el traspaso de buena parte de sus activos inmobiliarios al banco malo o Sareb, por valor de 22.317 millones de euros.

Según las cuentas presentadas, después de esa transferencia, los activos dudosos aumentaron un 26,1% hasta alcanzar un saldo de 18.815 millones de euros, 3.984 millones más que los que había en diciembre de 2011. La tasa de morosidad del grupo cerró el año en un 12,99% -por encima de la media de la banca española-, mientras que el ratio de cobertura era del 61,77% a 31 de diciembre.

En cuanto a la solvencia, el sucesor de Rato al frente de Bankia ha subrayado que se prevé que la actual solvencia mejore, porque Bankia tiene un modelo de negocio que -a juicio de Goirigolzarri- va a generar capital de forma "muy importante" en los próximos años.

Por último, el banquero, que tomó las riendas de Bankia el pasado 9 de mayo, ha señalado la extraordinaria liquidez con la que cuenta ahora el grupo con unos 40.000 millones que le permiten tener cubierto el 90% de los vencimientos de los próximos seis años de sus emisiones de deuda.

Reto principal: hacer rentable la entidad para devolver el rescate

En cualquier caso, teniendo en cuenta las enormes pérdidas del grupo y las previsiones económicas de España, el presidente de la entidad admite que el principal reto es hacerla rentable y, con ello, facilitar que el Estado pueda recuperar el dinero europeo inyectado en el grupo.

"Bankia es un caso especial, porque Europa y el FROB han puesto un capital en manos de un equipo de gestores para que rentabilicen el grupo e intenten devolver las ayudas. Nosotros tenemos la posibilidad, la obligación y el compromiso de devolver las ayudas o, mejor, rentabilizar la inversión", ha señalado Gorigolzarri en la rueda de prensa, donde ha admitido que es difícil concretar cuándo podría hacerse realidad esa rentabilidad que permita la devolución.

Según el máximo responsable de Bankia, "al final del plan estratégico, en 2015, deberían ya existir alternativas", entre las que ha destacado una: "que el Estado ponga en valor su participación" al vender sus acciones en Bolsa.

Una vez cumplido el traspaso de los activos problemáticos al banco malo, Bankia necesita 24.500 millones de euros para sanear el resto de su balance. Con la ampliación de capital del grupo BFA -que hará efectiva la inyección del dinero del rescate bancario que recibió en diciembre-, se cubrirán unos 18.000 millones.

Mientras, los 6.500 millones restantes (4.500 millones solo de Bankia) se obtendrán con el canje de los productos híbridos, esto es, cuando los títulos de deuda subordinada y las participaciones preferentes se conviertan en acciones. Para ejecutar ese canje, debe fijarse el precio de conversión que, según todas las previsiones, será muy bajo y algunos analistas han llegado a adelantar que los compradores de esos híbridos perderán el 97% de su inversión.

Goirigolzarri espera que todo este proceso esté acabado en el segundo semestre.

Ha empezado a cerrar oficinas en Madrid y Valencia

El presidente también ha confirmado que Bankia ya ha comenzado a cerrar sucursales en Madrid y en la Comunidad  Valenciana, con el objetivo de que a finales de mayo la red en estas dos  regiones esté ajustada.

En total, la entidad quiere cerrar este año 1.138 oficinas y mantener operativas 1.888 sucursales en todo el país, que previsiblemente lucirán la marca única de Bankia antes del verano.

Otro de los retos del grupo para este año es reducir la plantilla en unas 4.500 personas, para lo que ya se ha logrado un acuerdo laboral, que Goirigolzarri ha destacado que se ha logrado por "gran responsabilidad de todos". Esto ha sido "por el esfuerzo de quienes salen, pero compartido por quienes nos quedamos en Bankia", ha añadido el banquero.