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Francia anuncia recortes históricos para conservar la triple A y lograr el déficit cero en 2016

  • Sube el IVA al 7% y el impuesto de sociedades un 5%
  • Adelanta un año, en 2017, la jubilación a los 62 años

Ver también: Especial crisis de deuda en Europa

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En Francia, el gobierno ha presentado el segundo plan de ajuste en tres meses

El Gobierno francés ha anunciado su segundo plan de ahorro en cuatro meses, para mantener la triple A, la máxima calificación financiera, lo que le obliga a efectuar recortes para llegar al objetivo de déficit cero en 2016. Las medidas supondrán un ahorro de 7.000 millones en 2012 y de 17.000 millones en 2016.

El primer ministro galo, François Fillon, consensuó anoche el paquete de ajuste con el presidente, Nicolas Sarkozy, según fuentes gubernamentales, que precisaron que las nuevas medidas entrarán en vigor entre 2012 y 2016. Durante su comparecencia, ha aprovechado para felicitar a los responsables políticos griegos por el acuerdo para aprobar el rescate con un gobierno de unidad nacional.

Fillon ha señalado que el presupuesto para 2012 será  "uno de los más austeros que ha conocido Francia desde 1945". En concreto, disminuye las cuentas públicas en 1.500 millones de euros.

El primer ministro francés ha explicado que un incremento del IVA en la hostelería, la restauración y la renovación de la  vivienda, del 5,5% al 7% permitirá recaudar 1.000 millones adicionales.

Subida del impuesto de sociedades

Francia también ha aumentado un 5% el impuesto de sociedades para las grandes empresas que facturan más de 250 millones de euros. Además se adelanta a 2017, doce meses, la entrada en vigor de la reforma de las pensiones, que retrasa dos años la edad de jubilación. Con esa medida, el Ejecutivo cuenta ahorrar unos 8.000 millones de euros en los próximos años.

Con estas medidas, el Gobierno francés pretende actualizar sus cuentas para que la ralentización económica que auguran no afecte a sus objetivos de reducción del déficit. La previsión inicial era un crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) del 1,75%, una cifra que recientemente ha rebajado al 1%.

Fillon ha justificado las medidas en el riesgo de una quiebra y en la amenaza de que el incremento desmesurado de la deuda no lleve a las agencias de calificación a retirar a Francia la triple A que ahora le permite estar en el vagón delantero de la comunidad internacional.

La quiebra no es algo abstracto

Moody's ya amenazó con retirar la máxima calificación a un país que a finales de septiembre pasado debía el 86,2% de su PIB.  La "quiebra no es algo abstracto", alerta un Fillon que pide "sacrificios" a los ciudadanos y las empresas, al tiempo que se compromete a apretar el cinturón de las finanzas públicas.

La segunda economía de la zona del euro quiere así alejarse de la incertidumbre que pesa sobre la deuda soberana de otros socios de la divisa europea, en concreto de Italia, la tercera economía de la moneda única, que sufre la presión de los mercados y los desmentidos sobre la dimisión de Berlusconi.

La oposición ha criticado que el anuncio de los recortes corresponda al primer ministro, mientras que el presidente aparece siempre cuando se trata de anunciar noticias positivas. Aunque todavía no se ha postulado como candidato, todo apunta a que Sarkozy optará a su reelección en primavera.