Enlaces accesibilidad

Gobierno y oposición se enzarzan por el déficit al hilo de la situación de Grecia

  • Zapatero afirma en el Congreso que se corregirá y evita comparaciones
  • "Aprendan las lecciones de la economía griega", ha replicado Rajoy

Por
España obtendría 110 millones de euros anuales en intereses por el préstamo a Grecia

El debate sobre el mecanismo de rescate de Grecia aprobado en la Unión Europea se ha interpretado en el Congreso de los Diputados en clave nacional, con la oposición reclamando austeridad para no caer en una situación similar a la del Estado heleno, mientras que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha defendido que el Ejecutivo "ha tomado las decisiones oportunas al respecto".

"Grecia está asumiendo sus responsabilidades como miembro de la zona euro y lo está haciendo en un contexto muy complicado", ha comentado Zapatero, que ha explicado el sistema de préstamos bilaterales y del Fondo Monetario Internacional aprobado en el Consejo Europeo de primavera para apoyar al Gobierno heleno ante los diputados españoles.

Confiamos en que pueda servir para calmar a los mercados

"Confiamos en que pueda servir para calmar a los mercados", ha señalado el presidente del Gobierno, en referencia a la presión sobre la deuda griega, que está asumiendo elevados tipos de interés para poder refinanciarse.

Comparaciones con Grecia

En cualquier caso, Zapatero ha querido evitar comparaciones con la situación griega: "No tanto por España -ha dicho-, sobre cuya solvencia podemos y debemos de hablar, porque también nosotros tenemos tarea, sino por Grecia. Atraviesa una situación de dificultad, pero también ha hecho cosas bien, no sé si le ayudamos al hacer comparaciones como si fuera el ejemplo de todos los males".

El líder del Ejecutivo ha reconocido que "es evidente que los déficit públicos exigen un compromiso serio de corrección", pero ha defendido que el Gobierno si ha tomado las decisiones oportunas al respecto", detallando las medidas del plan de estabilidad financiera presentado ante la Comisión Europea.

"Si el déficit es elevado es porque este Gobierno ha mantenido sus politicas de proteccion social", ha justificado Zapatero, asegurando que "el Gobierno tiene perfectamente estructurado la reducción del déficit para llegar al 3% en 2013, haciendo esfuerzos serios". En este sentido, ha retado al líder de la oposición, Mariano Rajoy: "Cuando los compromisos no se cumplan, admitiré reproches".

Detalles sobre la aportación española

Zapatero ha explicado que España tendrá que contribuir con 3.672 millones de euros si se pone en marcha el rescate, resultado de "multiplicar los 30.000 millones por el capital de España en el BCE, que es del 12,34%". Esta cifra supone "un aumento muy moderado, del 4,78%, de la emisión neta prevista" por el Tesoro Público, por lo que, ha destacado "la financiación de la contribución de España se realizará sin perturbar de forma siginificativa del programa del Tesoro público".

Zapatero ha insistido en que se trata de "un aumento directo de la deuda pública bruta del estado, que no genera déficit; no se trata de un aumento de la deuda neta, ya que se utilizará para comprar un activo, el préstamo a Grecia".

Así, ha comentado que, si España toma prestado los fondos en torno al 2% de interés y los presta a Grecia al 5%, pagaría unos intereses de 73 millones anuales y cobraría 183 millones: "El impacto global sobre las cuentas públicas sería positivo por valor de 110 millones de euros, aunque esta ganancia esperada conlleva un riesgo, la posibilidad de que Grecia no pueda hacer frente a las obligaciones", ha admitido.

Rajoy pide que se aprenda la lección

Por su parte, el presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, no ha querido juzgar la actuación de la Presidencia española hasta que concluya -"está en juego el prestigio de España y no vamos a jugar con ello", ha comentado-, aunque ha recalcado su "preocupación" por lo que considera similitudes entre la situación griega y la española.

Estamos gastando, recaudando y llegando a un déficit similar al de los griegos

"Estamos gastando como los griegos, recaudando como los griegos y hemos llegado a un déficit similar al de los griegos. No estoy comparando una economía con la otra -ha dicho Rajoy-: podemos plantarnos el rescate de la economía griega, pero sería inimaginable que Europa se plantará el rescate de la economía española".

Así, ha reclamado al Gobierno que "aprenda todas las lecciones de la crisis griega" y reduzca el endeudamiento, ya que "el caso de Grecia, que puede no ser único, es consecuencia de la relajación de la disciplina fiscal".

Rajoy, en cualquier caso, ha señalado que "el PP apoya el plan de rescate porque es la solución menos mala", aunque ha vuelto a criticar que España tenga que "recurrir a más endeudamiento" para su aportación, por lo que ha pedido que "no se venda como un negocio".

Críticas de los grupos minoritarios

Del resto de partidos, CiU ha coincidido con el PP en que, aunque España no es Grecia, es necesario reducir el déficit, por lo que su portavoz, Josep Sánchez Llibre, jha instado a adoptar medidas estructurales para no seguir la senda griega, empezando por la reforma laboral, a la que, a su juicio, hay que llegar "con acuerdo o sin acuerdo".

El portavoz del PNV, Josu Erkoreka, centró su intervención en la Estrategia Europa 2020, de la que ha dicho será la "segunda parte" del "estrepitoso fracaso" que ha supuesto la Estrategia de Lisboa. En este sentido, ha opinado que la Estrategia que propone el Consejo Europeo supone "volver a empezar".

El grupo parlamentario de ERC-IU-ICV y las formaciones del Grupo Mixto del Congreso han cuestionado desde diferentes posiciones políticas el plan de ayuda a Grecia, al tiempo que advertían de la necesidad de impulsar reformas fiscales y financieras en España.

En concreto, el diputado de IU, Gaspar Llamazares, ha alertado sobre "el fantasma que recorre Europa", el ataque de la especulación contra las economías mediterráneas y su modelo social, y ha lamentado que la Unión Europea se haya quedado "a medio camino" con el rescate griego, donde no se ha escuchado "ninguna voz de izquierdas".