Continúan las protestas del metal en Cádiz y causan cortes de tráfico en la segunda jornada de huelga indefinida
- Rechazan el preacuerdo alcanzado por UGT y la patronal en la madrugada del lunes
- Se registran retenciones desde primera hora de la mañana y algunos incidentes
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Las protestas del sector del metal continúan en Cádiz durante la segunda jornada de huelga indefinida con la que buscan mejorar sus condiciones laborales en el nuevo convenio. Desde primera hora del martes, las barricadas y los piquetes informativos han causado cortes de tráfico y han provocado retenciones en distintos puntos de la provincia: a la entrada del polígono tecnológico TecnoBahía, las entradas de Cádiz y los accesos a la factoría de Moeve en Puerto Mayorga, entre otros.
En esta manifestación, con unos mil participantes, la más multitudinaria hasta ahora, ha recorrido las principales calles de la capital hasta llegar a la sede de la patronal, Femca, para reclamar una nueva negociación y anunciar una gran protesta con familiares mañana.
Además, grupos de manifestantes han arrojado clavos, pinchos metálicos y otros objetos punzantes a la calzada con la intención, según la Policía Nacional, de dañar los neumáticos de los vehículos. Según fuentes policiales, estas acciones están afectando a la circulación y suponen un "grave riesgo para la seguridad vial". Algunos de los piquetes han lanzado también tuercas, rodamientos y otros elementos metálicos contundentes contra los agentes.
Las movilizaciones han colapsado la autovía A-7 por los piquetes que desde las cinco de la mañana bloqueaban los principales accesos a las industrias del Campo de Gibraltar. El alcalde de La Línea de la Concepción, Juan Franco, ha lamentado el "caos circulatorio" que se ha provocado en su ciudad, ya que se han bloqueado los dos accesos al municipio. Ha denunciado "situaciones que están rozando la peligrosidad social".
Ante la inseguridad, el crucero 'Ventura', que tenía previsto hacer este martes escala en el puerto de Cádiz, ha cancelado esta parada para evitar riesgos.
El Servicio Extrajudicial de Relaciones Laborales (Sercla) de la Junta de Andalucía ha citado esta tarde en Sevilla a los sindicatos y patronal para retomar las negociaciones sobre el convenio colectivo del sector del metal de Cádiz, según CC.OO.
Rechazo al preacuerdo de UGT con la patronal
La huelga continúa después de que en la víspera UGT no recibiera el apoyo al preacuerdo que firmó en solitario con la patronal, la Federación de Empresas del Metal de la Provincia de Cádiz (FEMCA), durante la madrugada del lunes. Esto ha marcado una escalada de tensión en la segunda jornada de huelga indefinida.
El secretario de FICA UGT, Antonio Montoro, ha defendido este martes que el preacuerdo "no se ha entendido" y, en declaraciones enviadas a los medios de comunicación, ha dicho que continuarán negociando un documento que permita avanzar en derechos de los trabajadores.
Por su parte, el sindicato CGT ha decidido mantener su propia convocatoria de huelga con presencia en los principales accesos a polígonos y centros productivos del sector, y el anuncio de una asamblea, junto a la Coordinadora de Trabajadores del Metal, en el astillero de Cádiz.
Los trabajadores reclaman que el nuevo convenio recoja una subida salarial de acuerdo al Índice de Precios de Consumo (IPC), recuperar el concepto tóxico, penoso y peligroso perdido con la crisis de 2012, y un "protocolo de regulación" sobre los fijos discontinuos dentro del sector. También reclaman que se incluya el plus de astillero, la subrogación de las empresas auxiliares y que se aborden cuestiones como las incapacidades temporales y el salario de nuevo ingreso que quiere imponer FEMCA, algo que acentuaría la brecha salarial, según los sindicatos UGT y CC.OO.
"Secuestro a la clase trabajadora"
"Está muy bien criticar los acuerdos, quizá muchas de esas opiniones no están siquiera contrastadas con la realidad del preacuerdo, pero también hay que aportar soluciones", ha indicado UGT en un mensaje dirigido a otras formaciones sindicales. Además, añaden que "no se basa todo en criticar lo que se hace".
Montoro ha subrayado que lo firmado con la FEMCA, tras unas sesenta horas de negociaciones, es un preacuerdo "para seguir negociando" que "sienta las bases de los puntos clave" que se debaten en el convenio colectivo.
CC.OO. ha tachado de "un secuestro a la clase trabajadora" que el preacuerdo contemple una vigencia del convenio hasta el 2032 y CGT ha opinado que el hecho de que se garantice la subida de los salarios hasta ese año "no es una conquista, es un derecho humano para no seguir empobreciendo a la clase trabajadora". Sin embargo, UGT pone en valor que el convenio permitiría que al final de esos nueve años se restituyan derechos perdidos.
En un comunicado, ha subrayado además, que "teniendo en cuenta como está el contexto socioeconómico actual" esa duración "será una garantía" y dará "una estabilidad para la consecución de nuevos proyectos industriales, y más carga de trabajo en la provincia de Cádiz, al generar confianza en los futuros inversores".
Frente a las protestas y críticas, UGT trata de defender su preacuerdo: "Lo fácil, es destruir y oponerse a todo, por sistema" mientras que "lo difícil es ejercer la responsabilidad y conseguir acuerdos que den estabilidad y paz social a los trabajadores", ha añadido UGT.
