Trump, Zelenski o Milei: asistencias y ausencias de líderes internacionales al funeral del papa Francisco
- La ceremonia tendrá lugar en la Plaza de San Pedro del Vaticano a las 10.00 hora local
- DIRECTO: sigue la última hora de la muerte del papa Francisco
El papado de Francisco abarcó una época de inestabilidad y transformación geopolítica, marcado por conflictos internacionales en curso y continuos desafíos diplomáticos. En 2022, el pontífice aseguró que estábamos viviendo "una Tercera Guerra Mundial a pedacitos, en capítulos, con guerras en todas partes". Este sábado, representantes de algunos de los países que han protagonizado esas tensiones, coinciden este sábado en la Plaza de San Pedro del Vaticano en el funeral del pontífice, que cuenta, en su mayoría, con líderes occidentales, pero también con otros llegados de todas partes del globo.
Según el Vaticano, han confirmado su asistencia 162 delegaciones, de las cuales cerca de 50 han enviado a sus respectivos jefes de Estado y 10 a miembros de sus casas reales. En la ceremonia despiden no solo al cabeza de la Iglesia católica, sino también al jefe de Estado del Vaticano, por lo que su dimensión diplomática es muy distinta a la de las exequias de Benedicto XVI, cuando el Vaticano solo invitó a los presidentes de Italia y Alemania (el país de origen del entonces pontífice).
El reparto de asientos es similar al que se hizo en el entierro de Juan Pablo II. A la cabeza de la primera fila, se sitúan la delegación de Italia junto a la de Argentina, por ser el país natal de Francisco. A continuación, se sientan las casas reales —incluyendo los reyes Felipe y Letizia— seguidos de la realeza no católica. De ahí hacia atrás se sitúan el secretario general de la ONU, António Guterres, los representantes de la Unión Europea y los jefes de Estado de los distintos países, colocados por orden alfabético del país al que representan pero en francés (el idioma diplomático del Vaticano).
Trump, con la intención de hablar de comercio
Uno de los primeros en confirmar su asistencia fue el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que a su llegada a la Casa Blanca inició una guerra comercial que ha causado estragos en los mercados mundiales. "Melania y yo iremos al funeral del papa Francisco, en Roma. ¡Estamos deseando estar allí!", indicó el lunes el mandatario —que fue uno de lo primeros en viajar Roma— en un mensaje publicado en su red social, Truth Social.
Ha dicho, además, que quiere aprovechar para hablar con el resto de líderes mundiales. "Me gustaría atenderlos a todos, aunque tenemos muchos allí y todos quieren reunirse para hablar de comercio", ha sostenido.
Trump y otros líderes internacionales durante el funeral del papa Isabella BONOTTO / AFP
El líder estadounidense, que había protagonizado algunos desencuentros con el pontífice principalmente relacionados con la causa migratoria, había lamentado previamente su fallecimiento con una escueta publicación. "¡Descanse en Paz el papa Francisco! ¡Que Dios le bendiga a él y a todos los que le querían!". Un día antes de su muerte, Francisco había recibido en el Vaticano al vicepresidente estadounidense, J.D. Vance. También ha acudido al funeral el expresidente Joe Biden.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, quien también se ha desplazado a Roma y, aunque sus delegaciones están separadas, ha protagonizado un encuentro con Trump —que el presidente de EE.UU. ha calificado de "muy productivo"— previo a la ceremonia, que se produce en un momento de tensiones entre ambos por las negociaciones para la paz en Ucrania. Según imágenes publicadas por la oficina presidencial ucraniana, el presidente francés, Emmanuel Macron, y el primer ministro británico, Keir Starmer, también estaban presentes en el encuentro, que ha durado unos 15 minutos.
Según el portavoz de Zelenski, los equipos de los respectivos líderes están trabajando para acordar una segunda reunión más tarde, tras el funeral.
Zelenski en el funeral del papa Francisco REUTERS/Kai Pfaffenbach
Tras la muerte de Francisco, Zelenski destacó que el pontífice —quien pidió en varias ocasiones el fin de la guerra en Ucrania— rezó siempre por "la paz en Ucrania y por los ucranianos", a la vez que ha resaltado su compromiso "con Dios, con la gente y con la Iglesia".
Los líderes europeos acuden al funeral
Los presidentes de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, el presidente del Consejo Europeo, António Costa y la presidenta de la Eurocámara, Roberta Metsola, han asistido al funeral de Francisco. Previamente, los principales dirigentes de la instituciones europeas lamentaron la muerte del pontífice, a quien se refirieron, según Von der Leyen, como una guía para avanzar hacia "un mundo más justo, pacífico y compasivo".
Ursula von der Leyen en el funeral del papa Francisco Andreas SOLARO / AFP
También han acudido numerosos líderes de los Estados miembros del club comunitario. Uno de los primeros en confirmar su presencia fue Macron, quien destacó que el papa estuvo "al lado de los más débiles". Desde Reino Unido han viajado tanto el primer ministro británico, quien tras su muerte alabó sus "incansables esfuerzos por promover un mundo más justo para todos", como el príncipe Guillermo, en representación del rey Carlos. El canciller saliente Olaf Scholz y el presidente Frank-Walter Steinmeier forman parte de la delegación de Alemania.
Macron y otros líderes internacioanales durante el funeral Isabella BONOTTO / AFP
La primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, ha cancelado su agenda internacional de los próximos días para estar presente en el funeral, pese a que tenía previsto visitar Uzbekistán y Kazajistán durante el fin de semana. "Tuve el privilegio de disfrutar de su amistad, de sus consejos y de sus enseñanzas, que nunca fallaron ni siquiera en los momentos de prueba y sufrimiento", afirmó Meloni en un mensaje de condolencia publicado en X tras la noticia de la muerte de Francisco. Acudirá, además, el presidente italiano, Sergio Mattarella.
Giorgia Meloni a su llegada al funeral REUTERS/Dylan Martinez
El presidente polaco, Andrzej Duda, también ha ido a la ceremonia, al igual que los presidentes de Lituania y Letonia, Gitanas Nauseda y Edgars Rinkēvičs, respectivamente. Asimismo, están presentes el presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, y el primer ministro en funciones, Luís Montenegro; la presidenta de Suiza, Karin Keller-Sutter; el presidente interino de Rumanía, Ilie Bolojan; el primer ministro de los Países Bajos, Dick Schoof, y la presidenta de Moldavia, Maia Sandu.
Eslovenia ha enviado tanto a su presidenta, Natasa Pirc Musar, como a su primer ministro, Robert Golob; y por parte de Eslovaquia ha acudido su presidente, Peter Pellegrini. El primer ministro de Grecia, Kyriákos Mitsotákis, y el primer ministro de Irlanda, Micheál Martin, también se han desplazado al Vaticano. En representación de Austria ha viajado el canciller Christian Stocker y desde Hungría se ha desplazado el presidente Tamas Sulyok.
En representación de Bélgica asisten el rey Felipe y la reina Matilde, así como el primer ministro belga, Bar De Wever. En nombre de la República Checa irá su primer ministro, Petr Fiala. El presidente de Finlandia, Alexander Stubb, también se personará en el funeral; al igual que el príncipe heredero Haakon de Noruega y la princesa Mette-Marit. Desde Suecia, acudirán el rey Carlos XVI Gustavo, la reina Silvia y el primer ministro, Ulf Kristersson. El duque Enrique de Luxemburgo también ha confirmado su presencia.
Los reyes Felipe y Letizia en el funeral del papa Filippo MONTEFORTE / AFP
En cuanto a España, son los reyes Felipe y Letizia quienes encabezan la representación española en la ceremonia —situados de acuerdo con el protocolo, muy cerca de Trump—. El presidente, Pedro Sánchez, no ha asistido al funeral, pero sí lo han hecho la vicepresidenta y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, quien encabeza la delegación del Ejecutivo, el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, y la vicepresidenta y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. Les acompaña el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo.
El Gobierno de Nueva Zelanda, ha enviado a su primer ministro, Christopher Luxon.
Javier Milei, entre los asistentes más sonados
El presidente de Argentina, Javier Milei, viajó el jueves a Roma para estar presente en el funeral de Francisco, con quien mantuvo una relación cuanto menos complicada. El mandatario llegó a referirse al pontífice como el "representante del maligno en la Tierra" y simpatizante de las "dictaduras sangrientas", aunque ambos mantuvieron un encuentro en el Vaticano en febrero del año pasado que sirvió para calmar las aguas.
"A pesar de diferencias que hoy resultan menores, haber podido conocerlo en su bondad y sabiduría fue un verdadero honor para mí", declaró Milei en una publicación en X al conocer la muerte del papa en la que aseguró que se trataba de una "triste" noticia.
El papa Francisco ha sido el primer papa argentino (y el primero latinoamericano) y, pese a que ha tenido durante su papado una fuerte conexión con su país de origen, en sus 12 años al frente de la Iglesia no ha visitado Argentina.
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ha viajado al Vaticano para asistir a la ceremonia. El mandatario ha definido a Francisco como un defensor "de los excluidos, de los más pobres, de los agraviados, de los inmigrantes, de los sin voz, de las víctimas del hambre y del abandono". Por su parte, la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, ha enviado a su secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, el mayor cargo de su gabinete.
Entre los líderes latinoamericanos que han acudido a las exequias también se encuentran el presidente de Ecuador, Daniel Noboa, y el de la República Dominicana, Luis Abinader. La presidenta de Honduras, Xiomara Castro, también confirmó sus asistencia.
Putin, una de las primeras ausencias confirmadas
El presidente ruso, Vladímir Putin, anunció desde el principio que no pensaba acudir al funeral. "No, el presidente no tiene tales planes", indicó al inicio de la semana el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov. Putin, un creyente ortodoxo confeso, envió un mensaje de condolencia por el fallecimiento del papa y aseguró que "tuvo en gran medida una actitud positiva hacia Rusia" que no olvidará. El mandatario se reunió en en tres ocasiones (la última en 2009) con el pontífice, que también mantuvo una buena relación con el patriarca de la Iglesia ortodoxa rusa, Kirill.
El Kremlin no ha enviado representación a las exequias de Francisco. El papa habló sin tapujos de la guerra en curso entre Rusia y Ucrania, ha pedido su fin e incluso sugirió que se llevara a cabo un intercambio general de "todos" los prisioneros capturados por ambos países. Putin tampoco estuvo presente en las exequias de Juan Pablo II, a las que asistieron 70 jefes de Estado, presidentes o primeros ministros, y diez monarcas.
Sobre el mandatario ruso pesa una orden de detención de la Corte Penal Internacional (CPI) por crímenes de guerra, por lo que podría ser arrestado si pisara suelo italiano. El Vaticano, sin embargo, no forma parte de los 133 países que ratificaron el estatuto de Roma, por el que se constituyó el mencionado tribunal. La CPI también emitió una orden de arresto contra el mandatario israelí, Benjamín Netanyahu, aunque fuentes del Ministerio de Exteriores de Israel informaron de que enviarían a su embajador en la Santa Sede, Yaron Sideman en representación del país.
La oficina del primer ministro expresó el jueves sus condolencias. "El Estado de Israel expresa sus condolencias más profundas a la Iglesia católica y a la comunidad católica en todo el mundo por el fallecimiento del papa Francisco. Descanse en paz", ha publicado en redes sociales la oficina. El Gobierno había publicado hace unos días un mensaje de condolencias que después borró y el Jerusalem Post citó a funcionarios del Ministerio de Exteriores que aseguran que el pontífice había hecho "declaraciones contra Israel" y que el primer mensaje en las redes sociales se había publicado por "error".
Sí que ha acudido al funeral el primer ministro de la Autoridad Nacional Palestina, Mohammad Mustafa.
Líbano, Indonesia o Filipinas envían a sus presidentes
El presidente del Líbano, Joseph Aoun, y la primera dama, Nemat Aoun, viajaron el viernes a Roma para el funeral en una visita que, además de ofrecer condolencias al papa, pretende reafirmar el papel "espiritual y misionero" del país en el mundo, según un comunicado emitido por la Presidencia libanesa. También confiró su presencia el rey de Jordania, Abdalá II, y el primer ministro de Catar, Shaikh Mohammed bin Abdulrahman Al-Thani.
Indonesia, el país con más musulmanes del mundo, ha enviado a su expresidente, Joko Widodo, (2014-2024). También ha ido el presidente de Filipinas, Ferdinand Marcos Jr., y el de Timor Oriental, Jose Ramos-Horta. La delegación de India está encabezada por su presidenta, Shrimati Droupadi Murmu y la de Bangladesh por su primer ministro, Muhammad Yunus.
China (sin vínculos diplomáticos con el Vaticano desde 1951) ha enviado a un ex vicepresidente y a su viceministro de Exteriores. El Ministerio de Exteriores mostró sus condolencias tras la muerte y dijo estar dispuesto a "trabajar" junto a la Santa Sede para "promover la mejora continua" de sus relaciones.
También asisten líderes africanos, como el presidente de Togo, Fauré Essozimna; el de Kenia, William Samoei Ruto, el de Madagascar, Andry Rajoelina; y el de Mozambique, Daniel Chapo.
Tras el funeral, mucho más austero que el de sus predecesores, el féretro de Francisco será trasladado a la Basílica de Santa María la Mayor para su sepultura. El pontífice pidió en su testamento que quería ser enterrado allí en una tumba sencilla.