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El Gobierno prevé crear 1,1 millones de empleos hasta 2026 y que la tasa de paro baje del 10%

  • Así se recoge en el Programa de Estabilidad 2023-2026 que el Gobierno ha remitido este viernes a la Comisión Europea
  • El Ejecutivo mantiene el crecimiento en el 2,1% este año y el 2,4% en 2024, impulsado por el consumo y la inversión

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Imagen de la vicepresidenta primera, Nadia Calviño, a su llegada a la reunión del Eurogrupo

El Gobierno sigue confiando en la buena marcha de la economía española en 2023 y mantiene en el 2,1% la previsión de crecimiento para este año, en línea con lo proyectado en octubre y con el dato avanzado este viernes del Producto Interior Bruto (PIB) en el primer trimestre, con un alza del 0,5%. Entre otros factores, prevé que la demanda interna sea el principal motor de crecimiento durante este año, y especialmente el consumo privado, a la vez que el mercado de trabajo sigue resistiendo pese a las consecuencias de la guerra en Ucrania: estima que se crearán 1,1 millones de empleos entre 2023 y 2026 para acabar con una tasa de paro por debajo del 10% en dicho periodo.

Así se recoge en el Programa de Estabilidad 2023-2026 que el Gobierno ha remitido este viernes a la Comisión Europea, en línea con el compromiso de todos los estados miembros de hacerlo antes del 30 de abril. Estas proyecciones son la base para establecer las estimaciones de déficit y deuda pública sobre las que el Ejecutivo debería empezar a confeccionar los Presupuestos del próximo año, algo que en esta ocasión será difícil teniendo en cuenta la celebración de elecciones generales a final de año.

En este sentido, el Ministerio de Asuntos Económicos ya adelantó este jueves su compromiso de rebajar el objetivo de déficit al 3% del PIB en 2024, un año antes de lo previsto en la anterior senda, con el fin de cumplir con las reglas fiscales europeas que volverán a estar vigentes el próximo año. Se trata, aseguró la vicepresidenta primera, Nadia Calviño, de una "noticia importante" que confirma "el fuerte compromiso del Gobierno con la responsabilidad fiscal".

Así, el Ejecutivo mantiene el objetivo de déficit público al 3,9% del PIB para este año, la reduce hasta el 3% en 2024, mientras que para 2025 calcula que diminuirá al 2,7% y para 2026, al 2,5%. En el caso de la deuda, la proyección del Gobierno es que siga "su senda de reducción" tras la caída de cinco puntos el pasado año para absorber cuanto antes el impacto de la pandemia, hasta situarse por debajo del 110% del PIB en 2024, un año antes de lo previsto.

Se trata de unas proyecciones, señalan desde Asuntos Económicos, guiadas por un "principio de prudencia" dada la "incertidumbre" por las consecuencias de la guerra en las cuentas públicas. "Esta nueva senda se desarrolla en un contexto de incertidumbre derivado de la invasión rusa de Ucrania, lo que conlleva políticas presupuestarias prudentes y realistas desde la búsqueda de la justicia social y la eficiencia económica", defiende el Ministerio que dirige Calviño.

Se crearán 1,1 millones de empleos hasta 2026

Entre las principales novedades, el Gobierno destaca que seguirá siendo el motor del crecimiento económico, que sumará 1,1 millones de ocupados más hasta 2026, adicionales al millón creado después de la pandemia y que, en palabras del Ministerio, "permitirá alcanzar niveles récord de ocupación".

“El dinamismo de la actividad y la reforma laboral están llevando a un fuerte crecimiento del empleo, más estable y de mejor calidad. La ocupación registró en 2022 su mayor crecimiento en 15 años, mientras la tasa de temporalidad se ha reducido con rapidez y se acerca ya a la media europea”, recalca el documento. De esta forma, el Gobierno prevé que el desempleo siga descendiendo de aquí a 2026: la tasa de paro finalizaría este año en el 12,2%, posteriormente se reduciría hasta el 10,9% en 2024, al 10,3% en 2025 y al 9,8% en 2026.

No obstante, cabe señalar que el Ejecutivo retrasa un año la caída del paro por debajo del umbral del 10%, que el pasado año estaba prevista en el 2025. "Las reformas estructurales continuarán teniendo su efecto en los próximos años y llevarán el paro estructural hasta el 9,0% y la tasa de temporalidad convergerá con los niveles europeos (14%)", apunta el Ejecutivo.

El crecimiento se mantiene en el 2,1% en 2023

La fortaleza del mercado de trabajo, unida al aumento del consumo y las inversiones y reformas del Plan de Recuperación, que aportará la mitad de crecimiento en 2023, harán que el crecimiento del PIB español se sitúe a la cabeza de la Unión Europea, según el Ejecutivo. Asimismo, el sector exterior mantendrá una contribución "ligeramente positiva" durante el periodo de previsión.

De esta forma, se mantiene el repunte del 2,1% en 2023 y del 2,4% para 2024, "nuevamente liderada por el despliegue del Plan de Recuperación, que compensaría el impacto negativo del tono contractivo de la política monetaria", apunta el Ministerio. Posteriormente, y ya en la fase final del Plan, el crecimiento se moderará hasta el 1,8% y el 1,7% en 2025 y 2026, respectivamente.

Las últimas proyecciones se remontan a octubre del año pasado, cuando el Gobierno presentó los Presupuestos de 2023, que dibujaban un escenario similar, muy dependiente de la elevada inflación. Desde entonces, y ante la reducción de los precios en los últimos meses de año, la mayoría de organismos nacionales e internacionales han decidido elevar el crecimiento de España para este año y el próximo, aunque todos los debajo de la previsión del Gobierno.

La revisión más prudente la ha hecho la Comisión Europea, quien augura que la economía española crecerá un 1,4% este año. El Banco de España, por su parte, prevé que el PIB crezca un 1,6% y el Fondo Monetario Internacional (FMI) la eleva hasta el 1,5%.

Aunque en el cuadro macroeconómico no se incluyen previsiones del IPC, el Gobierno ha estimado para 2023 un deflactor del PIB del 4% y un deflactor del consumo privado del 3,9%. Por su parte, la estabilización de la tasa de variación del deflactor del PIB en torno al 2% se ha retrasado hasta el periodo 2025-2026. Se trata de indicadores que si bien no coinciden con la inflación tal y como la calcula el Instituto Nacional de Estadística (INE), pueden dar pistas de cómo se comportarán los precios en el conjunto del año.