Enlaces accesibilidad
Coronavirus

Trabajos de verano en tiempos de coronavirus: del socorrista y camarero al técnico de desinfección y auxiliar de playas

Por
Miembros de la Unidad Militar de Emergencias (UME)muestran los procedimientos y la metodología que debe aplicarse en la desinfección y protección de ámbitos patrimoniales
Miembros de la Unidad Militar de Emergencias (UME)muestran los procedimientos y la metodología que debe aplicarse en la desinfección y protección de ámbitos patrimoniales

El coronavirus ha dejado el mercado laboral roto en pedazos, con cientos de miles de puestos de trabajo y negocios destruidos en prácticamente dos meses y un escenario de máxima incertidumbre, como mínimo, en lo que resta de año.

Según los datos adelantados este lunes por la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, las medidas de confinamiento adoptadas para luchar contra la pandemia generaron la destrucción de 898.822 empleos durante la segunda quincena de marzo, aunque a partir de entonces el descenso se detuvo y comenzó una contención gracias a las medidas adoptadas, en especial, los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE).

A esto hay que sumar el comienzo del Plan de desescalada, que ha permitido retomar la actividad de muchos negocios, sobre todo aquellos dedicados al comercio y la hostelería, los grandes afectados por las medidas de confinamiento puestas en marcha tras el decreto de estado de alarma. Según Díaz, con datos hasta el 12 de mayo, se han recuperado algo más de 100.000 empleos.

El mercado laboral, por tanto, comienza a reconquistar parte del terreno perdido desde la llegada del coronavirus, pero lo hace de una forma diferente, adaptándose a las necesidades de esta denominada “nueva normalidad” hasta que llegue la ansiada vacuna.

Nuevos perfiles profesionales

Así, durante los próximos meses se seguirán demandando profesionales relacionados con el sector agroalimentario, desde reponedores de supermercado a temporeros del campo, como también repartidores o profesionales sanitarios, porque a los enfermos de COVID-19 hay que sumar los de patologías que estas semanas no se han tratado.

Con la progresiva recuperación de la actividad, durante la campaña de verano volverán las contrataciones de socorristas, camareros o personal de apoyo en el sector turístico, así como de otros profesionales temporales que tienen previsto cubrir bajas o reducciones de planillas durante esta época del año.

Todo ello sin olvidar los efectos que la implantación del trabajo a distancia está provocando en el mercado laboral, con una mayor demanda de informáticos para instalar equipos y mejorar las redes.

14 horas - El nuevo mercado laboral: más repartidores, sanitarios y trabajadores de supermercados - Escuchar ahora

Sin embargo, durante los próximos meses también aparecerán nuevos perfiles ligados a reforzar los servicios de prevención como los controladores de temperaturas en los accesos a recintos o edificios, técnicos de desinfección de ropa o espacios y auxiliares de playas.

Así lo recoge un estudio elaborado por Adecco, quien asegura que estos profesionales serán muy necesarios en la época post COVID-19 y que estarán muy focalizados en tareas que tienen que ver con mantener los protocolos de higiene y seguridad.

Rastreadores de contagios

Una de las figuras profesionales de la que todo el mundo habla en las últimas semanas es la del rastreador de contagios. En su mayoría son sanitarios que se encargan de localizar y aislar a todas las personas que han estado en contacto con un paciente que ha dado positivo por coronavirus y de ellos depende, en buena medida, cortar las nuevas cadenas de transmisión del virus para evitar un rebrote.

Aunque profesionales del sector nos cuentan que estos perfiles no son nuevos en el ámbito de las enfermedades infecciosas, ya que son habituales en la tuberculosis, la enfermedad meningocócica o el sarampión, los “rastreadores” han cobrado relevancia en las últimas semanas debido al prioritario papel que juegan en la fase de desescalada.

Así, todas las comunidades autónomas se han lanzado a contratar este tipo de perfiles en su lucha contra la COVID-19. Por ejemplo, el vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio Aguado, anunció la contratación de 400 técnicos de Salud Pública que harán funciones de "rastreadores" para identificar contactos estrechos de contagiados con coronavirus y hacerles seguimiento diario.

Según la Asociación Nacional de Funcionarios de Sanidad de Condados y Ciudades de Estados Unidos (NACCHO, por sus siglas en inglés), para hacer frente a una epidemia como la actual son necesarios 30 rastreadores por cada 100.000 habitantes. Si se tiene en cuenta este cálculo, en España harían falta aproximadamente 14.000 rastreadores para contener la transmisión del coronavirus.

Controladores de playas

Otro de los empleos que se demandarán con fuerza este verano es el de auxiliar de playas. Entre sus funciones, este profesional deberá vigilar a los bañistas, controlar los aforos e informar de las medidas de seguridad y protección para evitar contagios.

Una de las regiones pioneras en implantar esta figura es Andalucía. La Junta anunció este domingo que pondrá en marcha un plan de empleo con cerca de 3.000 vacantes para contar con playas seguras frente al coronavirus. Según su presidente, Juanma Moreno, la selección de esas 3.000 personas se hará de la bolsa única de empleo de la Junta de Andalucía, que ha puesto en marcha esta administración hace unos meses y en la que se han inscrito más de 564.000 personas.

Estos nuevos profesionales recibirán formación antes de distribuirse por todos los municipios del litoral andaluz y trabajarán en coordinación con los socorristas y con las fuerzas de seguridad de los municipios del litoral para contar con un "ingente ejército para organizar la apertura de las playas", recalcó Moreno.

Profesiones que se reinventan

Además de las profesiones de nueva creación, hay otras que se han visto obligadas a reinventarse a consecuencia del coronavirus. Una de las más importantes es la figura del “técnico de desinfección”, quien anteriormente vivía de la desinfección y control de plagas de grandes espacios industriales, sanitarios o piscinas y ahora tiene por delante la limpieza de todo tipo de espacios: desde comercios hasta viviendas, pasando por oficinas y tanatorios.

Debido al aumento de demanda, algunas empresas nos cuentan que están desbordadas y cifran el incremento de clientes en un 3.000 %, según Jacinto Díez, director de comunicación de Rentokil Initial.

Las mañanas de RNE con Íñigo Alfonso - Las empresas de desinfección, desbordadas en el inicio de la fase 1 - Escuchar ahora

En esa apuesta por la capacidad de reinventarse en tiempos difíciles, la profesora de Recursos Humanos y autora del libro ‘Te van a despedir y lo sabes’, Pilar Llacer, asegura que "siempre es necesario tener un Plan B porque no sabemos cuándo volverá la normalidad”, por lo que hay que “formarse sin esperar nada más".

Siempre es necesario tener un Plan B

Llacer nos explica que la formación es fundamental porque "reinventarse no es fácil" y "no es el momento de lamentarse" sino de formarse porque se han abierto muchísimas plataformas gratuitas.

La profesora ha indicado que el mercado laboral ya ha cambiado y que las empresas van a tener presupuestos muy restringidos y muchos profesionales tendrán que reinventarse, observar "qué se va a necesitar y transformarse" para aquellos sectores que van a crear empleo.