Enlaces accesibilidad

Las cajas de ahorro alemanas ganan al Santander la batalla por el color rojo

  • El Supremo alemán da la razón a las Sparkassen frente al banco español
  • Las cajas pueden mantener el color rojo como propio en el registro

Por
Logo de las cajas alemanas en un edificio
Logo de las cajas alemanas en un edificio.

El Tribunal Supremo alemán ha resuelto que las Sparkassen, las cajas de ahorro germanas, pueden mantener el color rojo como marca propia en el país, con lo que el Banco Santander pierde la batalla judicial en la que reclamaba que ese color era también distintivo de su identidad corporativa.

Según la sentencia hecha pública este jueves, las cajas de ahorro pueden mantener el color rojo como propio en el registro de patentes y marcas.

El tribunal, con sede en Karlsruhe, consideró que las cajas de ahorro han demostrado de forma suficiente a través de estudios demoscópicos que el rojo es identificado por los consumidores alemanes como distintivo de estas entidades financieras.

La disputa comenzó después de que las Sparkassen registraran el color de marca "rojo" (HKS 13) como símbolo distintivo propio en el sector de servicios financieros y banca minorista.

Reclamación del Santander al registro de marcas

El Santander, entidad española que usa también ese color y que cuenta con alrededor de 320 filiales en Alemania, reclamó al registro que se eliminara esa entrada, pero las autoridades de patentes y marcas rechazaron su petición.

La entidad recurrió entonces al Tribunal Federal de Patentes alemán, que el año pasado le dio la razón al estimar que no estaba probado que las cajas de ahorro cumplieran las condiciones para reclamar el uso en exclusiva del rojo. Según el citado tribunal, ese privilegio sólo debía otorgarse a empresas o productos que obtuvieran el reconocimiento de al menos un 75% de la población.

Tras analizar los estudios de opinión presentados tanto por las cajas de ahorro como por el Santander, el Supremo considera que es cierto que cuando el grupo alemán registró el color -en 2002- no podía considerarse que fuera su marca distintiva, pero estimó que sí lo era el año pasado, cuando dictó sentencia el Tribunal Federal de Patentes.