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Alemania se ralentiza debido al frenazo a sus exportaciones impuesto por la crisis europea

  • La mayor economía europea se contrajo un 0,5% en el último trimestre de 2012
  • Es el mayor retroceso en su actividad económica de los últimos tres años
  • Berlín consiguió cerrar el año sin déficit público

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La economía alemana ha empezado a ralentizarse y, en el último trimestre del año pasado, se contrajo un 0,5%. Así lo muestran los datos preliminares publicados este martes por la Oficina Estadística Federal (Destatis), quien advierte que es el mayor retroceso trimestral registrado en casi tres años. Esta desaceleración económica se explica por el frenazo en sus exportaciones, perjudicadas por la persistencia de la crisis en la zona euro, su principal mercado.

Con ese dato del cuarto trimestre, el crecimiento del producto interior bruto (PIB) alemán en todo 2012 se limitó a un 0,7%, algo inferior al 0,8% previsto por los expertos, y muy lejos del 3% con el que cerró 2011 y del 4,2% logrado en 2010, el máximo conseguido desde la reunificación del país.

Berlin consigue el déficit cero

A pesar de la ralentización, el país ha conseguido terminar el año sin déficit público, ya que el conjunto del sistema público (Gobierno federal, estados, municipalidades y Seguridad Social) ha terminado 2012 con un superávit del 0,1%, el primer equilibrio presupuestario que registra desde 2007.

En el caso del Ejecutivo federal, la diferencia entre ingresos y gastos se redujo hasta dejar el déficit en 22.400 millones de euros, por debajo del 0,35% de déficit estructural que se ha autoimpuesto Berlín por ley, aunque lo ha conseguido con cuatro años de adelanto a lo exigido en esa norma.

Según los economistas consultados por Reuters, esa reducción del déficit no se ha conseguido por los recortes del gasto del Estado, sino por el aumento del empleo y el aumento en los ingresos de las empresas, que han permitido el incremento de los ingresos fiscales.

A eso se ha unido el menor coste en la financiación de su deuda, por la que -en los momentos más delicados de la crisis de la deuda en Europa- han llegado a registrarse rentabilidades negativas, es decir: Alemania ha conseguido financiación en los mercados sin tener que pagar ningún interés por ella, porque los inversores compraban sus títulos soberanos huyendo de la inseguridad de otros países, como España o Italia.

En 2013, el PIB también crecerá menos

Esa desaceleración de la locomotora económica de la Unión Europea continuará en 2013, según el informe que publicará este miércoles el Ministerio de Economía y que este martes ha filtrado la prensa germana. En él, el Gobierno calcula un repunte del 0,5% en la actividad económica, la mitad de la previsión que berlín adelantó en octubre tras revisar una aún más optimista.

Según el Ejecutivo de Merkel -que se enfrenta a unas elecciones en septiembre-, el arranque del año será complicado, pero irá mejorando con el paso de los meses, lo que permitirá al país eludir el regreso a la recesión.

En esa línea, los analistas destacan que el sector privado creció en diciembre pasado por primera vez en ocho meses y que el índice de confianza empresarial mejoró después de cinco meses de caídas.

Las exportaciones se debilitan

Detrás del resultado de 2012 está, sobre todo, un crecimiento menor al esperado de las exportaciones alemanas, debido a la caída de la demanda en Europa, la incertidumbre en EE.UU. y el enfriamiento de las economías de los países emergentes.

Las ventas en el exterior se incrementaron un 4,1%, muy por debajo del 7,8% que aumentaron el año anterior, según destaca Destatis. La oficina estadística germana también apunta como causa que las inversiones en equipamiento cayeron un 4,1% el año pasado, en contraste con el 7,3% que habían crecido en 2011.

Por el momento, los ciudadanos alemanes siguieron consumiendo, ya que el gasto de los hogares subió un 0,8% a lo largo del año, algo menos del 1,7% que había crecido en 2011.