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El Gobierno croata prohíbe las fiestas y los regalos navideños en la administración pública

  • El Gobierno quiere ahorrar y mitigar los efectos de la crisis financiera
  • En España se han ordenado medidas similares en el ministerio de Industria y en Valencia

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El Gobierno croata ha prohibido las fiestas de Navidad y Año Nuevo en la administración pública por la crisis financiera internacional.

Las organizaciones y empresas públicas croatas tampoco podrán comprar regalos con cargo a los fondos públicos del Estado. A esto se suma que el gobierno ha decidido congelar los sueldos el próximo año.

El primer ministro, Ivo Sanader, ha afirmado que no hay motivos para el alarmismo, aunque el país tiene que ser serio. "Para este objetivo hemos prohibido comprar regalos de Navidad y Año Nuevo, así como la organización de recepciones de Navidad y Año Nuevo".

"Creo que con eso, unido a las medidas ya propuestas, podemos evitar una crisis más profunda durante el próximo año", ha añadido Sanader.

El gobierno ha prometido equilibrar las cuentas públicas en 2009. Si al final lo consigue, será la primera vez que Croacia lo consiga desde su independencia de la antigua Yugoslavia en 1991.

El país tiene una fuerte dependencia de los ingresos derivados del turismo y ha cundido el miedo de que el número de visitantes caerá bruscamente este próximo año.

Ahorro en España

Esta semana también se han producido medidas similares en España. El ministro de Industria, Miguel Sebastián, y la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, también han dado órdenes de austeridad.

Miguel Sebastián ha dado orden de suspender todos los actos navideños "como un gesto ante la crisis". El ministro ha cancelado también las cenas, los regalos, las copas y los aperitivos que corrieran a cargo de los fondos públicos.

La alcaldesa valenciana también ha dicho que "hay que apretarse el cinturón". Rita Barberá ha pedido a sus concejales que cancelen el envío de postales navideñas y que reduzcan al máximo el gasto corriente durante el año 2009. El alumbrado navideño también se verá reducido en aras de un mayor ahorro.