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La CE y el BCE piden a España acelerar las reformas para cimentar la recuperación

  • Señalan el retraso en la ley sobre servicios y asociaciones profesionales
  • Valoran la reforma de la ley concursal y la tarifa plana de 100 euros de cotización
  • El objetivo de déficit de este año (5,8%) "debería estar bien al alcance"

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El edificio del Banco Central Europeo reflejado sobre el símbolo del euro, en Fráncfort
El edificio del Banco Central Europeo reflejado sobre el símbolo del euro, en Fráncfort.

La Comisión Europea (CE) y el Banco Central Europeo (BCE) han destacado que los "importantes retos" a los que España aún debe hacer frente obligan al país a implementar plenamente y supervisar de cerca la agenda de reformas estructurales y, si fuera necesario, incluso reforzarla.

Las dos instituciones, tras las visitas a España efectuadas en marzo y abril para la primera supervisión posterior al rescate a la banca española, han destacado que en general han continuado las tendencias positivas de progreso en las políticas, el ajuste económico y las menores tensiones financieras.

No obstante, han manifestado que "permanecen importantes retos para un crecimiento sostenido de la economía, del empleo, para las finanzas públicas y el sector bancario", señalan en un comunicado conjunto.

En opinión de la misión de la CE y del BCE, el trabajo en las reformas continúa con algunas nuevas iniciativas recientes, como la reforma de la ley concursal para facilitar la reestructuración de la deuda de empresas con problemas pero viables y la tarifa plana de 100 euros de cotización a la Seguridad Social con la que el Gobierno quiere crear empleo y fomentar la contratación indefinida.

Estas medidas "podrían apoyar un aumento a corto plazo de la contratación indefinida", han dicho los técnicos de Bruselas y Fráncfort que viajaron a España entre el 24 y el 28 de marzo y el 3 de abril para hacer su análisis posterior al rescate de la banca.

Han afirmado que algunas medidas "han sufrido retrasos", como la ley sobre servicios y asociaciones profesionales, que, además, "podrían resultar menos ambiciosas de lo inicialmente planeado", y el comienzo del funcionamiento de la autoridad fiscal independiente.

Mejores perspectivas económicas

La CE y el BCE han manifestado que "mientras hay algunas evidencias de un impacto positivo de las reformas ya implementadas en el empleo, el alcance de los retos que permanecen en el mercado laboral y más allá corrobora el caso de que se implemente plenamente, se vigile de cerca y, si fuera necesario, se refuerce la agenda de reformas estructurales".

Respecto al déficit, que cerró 2013 en el 6,62% del PIB sin contar las ayudas a la banca y supera así "marginalmente" el objetivo del 6,5% fijado por la UE, la CE y el BCE han dicho que "confirma que la consolidación fiscal continuó el año pasado".

Para la misión de supervisión, el objetivo de déficit de este año (el 5,8% del PIB) "debería estar bien al alcance" si España acomete una ejecución presupuestaria rigurosa, debido a las mejores perspectivas económicas para el país.

Los expertos de la CE y del BCE han indicado que los elevados niveles de deuda y las necesidades de desendeudamiento asociadas tanto en el sector público como privado lastran las perspectivas de crecimiento a medio plazo y mantienen la economía vulnerable.

En cuanto a la banca, han dicho que la situación de liquidez y la estructura de financiación se han fortalecido más desde comienzos de año y en 2013 el sector registró beneficios, mientras que los ratios de solvencia han aumentado, gracias en parte a la medida que reconoce parte de los activos por impuestos diferidos.

Por su parte, la reestructuración de la banca que recibió ayuda estatal "está bien en curso", han destacado la CE y el BCE, que han añadido que la implementación de las medidas para reforzar el marco regulador y supervisor han procedido según lo previsto.

Para los bancos el "principal desafío en este momento parece ser la presión sobre sus beneficios por la disminución de los volúmenes de intermediación y el deterioro de la calidad de los activos", lo que exige una supervisión estrecha y unos niveles de provisionamiento y colchones de capital adecuados, han señalado.

Respecto al banco malo -la Sociedad de Gestión de Activos procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb)- han dicho que sigue teniendo el "importante reto" de desinvertir en una importante cartera de activos al tiempo que debe maximizar su valor, han concluido las dos instituciones.