La Policía desarticula una organización criminal responsable de uno de los mayores fraudes de IVA en hidrocarburos
- Hay ocho detenidos y se calcula que la banda podría haber defraudado cerca de 300 millones de euros
- Contaban con un arsenal de 44 armas en una vivienda de Ávila donde habían montado un taller clandestino
La Policía Nacional, en una operación conjunta con funcionarios de la Agencia Tributaria, ha desarticulado una organización que, presuntamente, habría cometido uno de los mayores fraudes de IVA que se haya perpetrado nunca en el comercio de hidrocarburos. Se calcula que pueden haber defraudado cerca de 300 millones de euros. Por el momento, hay ocho personas detenidas y se investiga a otras diez como responsables de varios delitos contra la Hacienda Pública, blanqueo de capitales, organización criminal y tenencia ilícita de armas.
En los registros los agentes se han incautado de dinero, relojes de lujo y activos financieros. También se han bloqueado varias cuentas con más de 12,5 millones de euros. Además, se han requisado más de 3,6 millones de litros de carburante y se han bloqueado coches e inmuebles de lujo. Además, se ha intervenido una vivienda en la que se ha localizado una fábrica clandestina de armas de fuego e importantes cantidades de munición de guerra.
Carburante a precios imbatibles por fraude fiscal
La investigación comenzó a principios de 2023 cuando los agentes tuvieron conocimiento de grandes movimientos económicos de empresas dedicadas al comercio de hidrocarburos compatibles con un posible caso de blanqueo de capitales. Esto puso de manifiesto la existencia de dos operadoras petrolíferas que estaban incumpliendo sistemáticamente con sus obligaciones fiscales con el impago del IVA. Tras las primeras pesquisas, se descubrió que podía existir una única organización criminal detrás de ambas operadoras petrolíferas que estarían llevando a cabo estas transacciones ilegales con la consiguiente preocupación del resto de empresas del sector de los hidrocarburos. El entramado criminal ofrecía el producto a precios muy por debajo del valor habitual real del mercado fruto de los incumplimientos fiscales.
Cuando se avanzó en las averiguaciones, se comprobó cómo esta red criminal podía estar vendiendo el carburante incluso a precio inferior al de adquisición, es decir, realizando venta a pérdidas. Al no ingresar en la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT) el IVA repercutido, les permitía ofrecer gasolina y gasóleo a empresas intermediarias y estaciones de servicio a precios mucho más bajos que los de cualquier competidor que sí cumpliera con sus obligaciones tributarias.
Además, tampoco cumplían con la normativa sectorial relativa a biocarburante que obliga a pagar una compensación –que ha supuesto otro impago de unos 40 millones de euros- en caso de no utilizar biocombustible, obteniendo así un amplio margen económico con el que poder ofrecer sus suministros.
La red tenía su propio depósito fiscal de combustible
Los pesquisas han dado como resultado que se haya descubierto que esta red criminal contaba con su propio depósito fiscal para almacenar el carburante, algo poco común en el sector donde lo habitual es contratar los servicios de terceras empresas. Además, esta organización tenía vocación de continuidad en esta actividad delictiva, ya que, fruto de los beneficios ilícitos obtenidos con el primer operador petrolífero, pudieron crear y dar de alta un segundo operador para continuar con la actividad criminal. Asimismo, llegaron a crear hasta un tercer operador petrolífero, con el cual comenzaron igualmente a operar fraudulentamente, si bien fue dado de baja del Registro de Extractores de Depósitos Fiscales (REDEF) por la AEAT con celeridad impidiendo así que pudiera seguir extrayendo y vendiendo producto, motivo por el cual la cantidad defraudada por este tercer operador no llegó a alcanzar cuota de delito.
La organización tenía una estructura jerarquizada liderada en la cúspide por dos socios bajo cuyo mando se encontraban los directivos financieros que controlaban las cuentas y se encargaban de toda la contabilidad empresarial.
El testaferro de los dos millones de euros
En el último escalón se encontraban los trabajadores, de los cuales muchos de ellos desconocían la actividad criminal llevada a cabo. Sin formar parte de esta estructura, había también varios testaferros, a quienes seleccionaban para que prestasen su identidad y así figurar ellos como responsables de las obligaciones tributarias generadas por los operadores petrolíferos, llegando uno de ellos a percibir retribuciones de alrededor de dos millones de euros.
Una vez los investigadores lograron identificar a todos los miembros de esta organización, se estableció un dispositivo policial el pasado día 2 de diciembre realizando nueve entradas y registros simultáneos –siete domicilios en Madrid y Ávila y dos oficinas en la capital madrileña–, donde se intervinieron más de 140.000 euros, 167 relojes de lujo valorados en unos dos millones de euros, y activos financieros que superan los 14 millones de euros. Además, se han bloqueado cuentas con más de 12,5 millones de euros, más de 3,6 millones de litros de carburante, 60 vehículos de alta gama con un valor superior a los tres millones de euros y 46 inmuebles de más de cinco millones de euros.
Un taller clandestino de armas y un vehículo de guerra
En una de las viviendas ubicada en Ávila, los agentes encontraron un auténtico taller clandestino de armas de fuego y munición de guerra. Se intervinieron 44 armas de fuego, algunas con el número de serie borrado y modificadas con silenciadores, munición de guerra y un vehículo blindado bélico con una ametralladora de gran calibre instalada en la parte superior.
Finalmente, se ha detenido a ocho personas y se ha tomado declaración en calidad de investigadas a otras diez personas más, entre las cuales se encuentran los líderes de este entramado. Hasta el momento, se tiene constancia de que el fraude del IVA asciende a casi 300 millones de euros entre los años 2023 y 2024. Por la cifra presuntamente defraudada, se trataría de una de las mayores operaciones contra el crimen organizado en este tipo de delitos.