Del 'phishing' al 'deepfake': la nueva cara de los chiringuitos financieros
- ¿Qué son los chiringuitos financieros? ¿Cómo operan? ¿Cómo evitar caer en sus engaños?
- Regina Rodríguez Pomar, de la CNMV, explica en Economía de bolsillo engaños financieros
El pasado diciembre circulaba por Internet una noticia que anunciaba lo imposible: dinero fácil y rápido al alcance de cualquiera. "Un proyecto que garantiza la oportunidad de ganar desde 35.000 € al mes ¡ya está disponible para todos los españoles!", rezaba un titular firmado —en apariencia— por RTVE.
¿Quién no querría ese beneficio? ¿Y quién no se fiaría de una oportunidad así si lleva el sello de un medio de comunicación fiable? Ese es el problema. Ahí reside, precisamente, lo imposible. Porque nada lo que se veía y se decía era real. Ni la página web pertenecía a RTVE ni la inversión existía. Era una suplantación.
El diseño imitaba hasta el último detalle del portal informativo oficial de la corporación. Además, iba acompañado de una pieza en la que el presentador del Canal 24 Horas, Lluís Guilera, explicaba cómo hacerse rico mientras el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, lo ratificaba. Pero no. Todo era falso.
En realidad, se trataba de un montaje de vídeo ultrafalso (deepfake) que utilizaba la imagen de ambos sin consentimiento para promover una plataforma financiera fraudulenta. O lo que es lo mismo, un chiringuito financiero que, en este caso, había empleado la "técnica de los clones" consistente en "utilizar una página web o dirección de correo muy parecida o difundir información en redes y grupos de WhatsApp", explica la directora del departamento de protección al inversor y educación financiera de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Regina Rodríguez Pomar. Y todo ello con un solo objetivo: que alguien pique.
"Hay que tener mucho cuidado con estas entidades", avisa Rodríguez en Economía de bolsillo, con Lourdes Castro. Funcionan como una tapadera para apropiarse del capital de sus víctimas a través del engaño.
"Los chiringuitos financieros son empresas o personas que prestan servicios o actividades de inversión sin la correspondiente autorización", define. En España, ofrecer ese tipo de servicios exige un control. "Para poder darlos —insiste la experta— hay que estar inscrito en los registros oficiales de la CNMV".
Es la manera más segura de protección. Estar en esa lista significa que "se ha comprobado el cumplimiento de unos requisitos" sometidos a una "supervisión continua" que hace que "los inversores gocen de unas garantías que no tienen si invierten con empresas que no están registradas".
Más chiringuitos y más sofisticación
Y que, además, cada vez son más abundantes. En 2018, la CNMV lanzó 63 advertencias, en 2024 más de 500. "El número ha crecido de forma exponencial en los últimos años", confirma Rodríguez. Por un lado, porque "nuestra supervisión es más eficaz al disponer de más medios y recursos", pero, por otro también porque "se han incrementado los intentos de fraude".
"Según datos del Ministerio del Interior, las estafas a través de Internet crecieron un 480% en el periodo de 2016 a 2024 y, según la información que nos ha aportado la Fiscalía, los delitos financieros son el segundo delito que más ha aumentado desde la pandemia", detalla.
La explicación, dice, es simple: más tiempo online y en redes sociales equivale a más vulnerabilidad. "Para los ciberdelincuentes es mucho más fácil y barato acceder a los inversores, a las víctimas. Sin embargo, para nosotros —inversores y víctimas— resulta más difícil de detectar", apunta. Para todos. Sin excepción. Incluso los más preparados pueden caer.
De hecho, "los principales afectados por fraude en Internet son jóvenes y profesionales liberales", señala Rodríguez. Las promesas de una vida inmediata de lujo, o al menos cómoda, es tentadora. Y la inteligencia artificial, muchas veces, demasiado convincente. Quizá decisiva. "Los ciberdelincuentes están utilizándola logrando que las estafas sean cada vez más sofisticadas", denuncia Rodríguez.
A la anteriormente mencionada técnica de los clones hay que sumarle también las "de impersonación". "Hacen que una persona muy conocida, como un político, o una empresa del mundo financiero recomiende o proponga un chiringuito", señala. Sin olvidar las referentes al phishing, es decir, métodos "para robarnos las claves y datos personales". O "las técnicas de ingeniería social con IA que recaban datos privados en las redes sociales para luego poder dirigirse con un mensaje mucho más personalizado que dificulte la detección de la estafa".
¿Cómo detectar un chiringuito?
Por eso, lo primero, incide Rodríguez es —y siempre será— la desconfianza y la cautela. Más vale prevenir que curar. Sobre todo, porque rara vez existe cura. "Es bastante complicado recuperar el dinero. Muchas veces estos chiringuitos están en otras jurisdicciones y es complejo perseguirles", lamenta. De todas formas, "si has sido estafado, pediría que lo comuniques a la CNMV para ayudarnos e realizar una investigación y, en cualquier caso, denunciar ante la Policía o la Guardia Civil".
"Las señales de alarma son, casi siempre, llamadas o mensajes que no hemos solicitado, que prometen rentabilidades exageradas en un corto espacio de tiempo —avisa— y que nos urgen a tomar decisiones de manera muy rápida" y en un lenguaje difícil, con numerosos tecnicismos.
"Utilizan estrategias de inversión incomprensibles, nunca realizan ningún tipo de análisis sobre si ese producto es adecuado o no para ti (algo que las entidades autorizadas están obligadas a desarrollar) y emplean palabras muy técnicas, que realmente no tienen ningún significado", pero que suenan muy profesionales en boca de ellos. Aunque, más aún, en la de famosos.
"Suelen citar empresas, inversores reconocidos y políticos" y subirse también al carro de las modas. "Es decir, utilizan productos populares como gancho, por ejemplo, una criptomoneda o acciones tecnológicas", destaca Rodríguez.
Sin embargo, todo aquello que parezca demasiado bueno, no lo suele terminar siéndolo. Al revés. "Un retorno alto normalmente implica un riesgo elevado. Los chiringuitos no nos van a decir que estamos asumiendo un riesgo. ¿Qué tipo de mensajes nos dan? Retornos garantizados muy altos de un 10% sin riesgo. Un X por ciento mensual pase lo que pase, o duplicaciones de dinero en un espacio de tiempo corto", advierte Rodríguez.
Un dinero que sí, esa primera vez te notificarán haber ganado, pero que jamás te darán. "En las primeras operaciones te informarán de que has obtenido un beneficio para que inviertas más", explica Rodríguez que añade: "Una prueba para detectar si estamos ante un chiringuito financiero es pedir el reembolso de ese dinero. La mayoría de las veces no te lo van a devolver. Incluso te pedirán más en concepto de tasa". Y, eso añade, es prácticamente la señal definitiva. "En caso de duda, lo primero es no realizar ninguna aportación más; lo siguiente es consultar en el registro de la CNMV para ver si es una entidad registrada y, finalmente denunciar".
Economía de bolsillo