El tercer día de huelga de los trabajadores de seguridad del aeropuerto Madrid afecta a un millar de pasajeros
- Durante el lunes cerca de 2.200 viajeros perdieron sus vuelos debido a las largas colas
- El consejero de Presidencia de Isabel Díaz Ayuso, Miguel Ángel García, asegura que es un "plan elaborado por Moncloa"
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Este martes por la mañana, 890 personas han perdido su vuelo con Iberia en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas como consecuencia de las colas que causa la huelga de personal de seguridad de la empresa Trablisa, encargada de los controles de acceso.
Son los afectados hasta el mediodía, después de que en la víspera casi 2.200 pasajeros perdieran su vuelo. Por ello, Iberia recomienda a sus clientes que lleguen al aeropuerto "con mayor antelación" y permite facturar gratis el equipaje de mano para "agilizar el paso" por el control de seguridad.
La acción sindical ha sido secundada por 21 trabajadores de los más de 850 que forman parte de la plantilla de Trablisa en Barajas. Sin embargo, la compañía ha denunciado la existencia de una huelga de celo (cuando se ralentiza la actividad) que "incumple los servicios mínimos del 100% decretados por la Delegación del Gobierno", y que, por tanto, ejercerá "todas las acciones legales que le asisten en derecho".
En este sentido, la empresa considera que este paro es "ilegal, abusivo y desproporcionada", según la firma de seguridad, que también ha subrayado que se trata de una huelga novatoria, que está "expresamente prohibida por el ordenamiento jurídico".
Las reclamaciones de los huelguistas
Trablisa ha explicado que el comité de huelga exige pluses salariales que superan los 1.000 euros al mes, el incremento de un 75% del valor de las horas extra o que la empresa asuma el aumento del coste del aparcamiento, así como la equiparación con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para la jubilación a los 52 años entre otras exigencias.
La empresa de seguridad ha afirmado que estas peticiones son "inasumibles" y "ajenas" a sus competencias. Defiende también que los paros se producen en un momento en el que la compañía "cumple estrictamente con todas las obligaciones derivadas de los acuerdos con el comité de empresa, con las del convenio colectivo y las específicas del centro de trabajo en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas".
Además, Trablisa ha lamentado las molestias causadas a los viajeros y usuarios del aeropuerto madrileño durante el lunes y ha reiterado que seguirán trabajando para demostrar el carácter "ilegal" y "abusivo" de esta huelga.
El Gobierno de Ayuso considera que es un "plan de Moncloa"
En el plano político, el consejero de Presidencia, Justicia y Administración Local de la Comunidad de Madrid, Miguel Ángel García Martín, ve en esta huelga del personal de seguridad un "plan elaborado por el propio Palacio de la Moncloa para tratar de reventarlo todo".
En una entrevista en Onda Madrid, ha señalado que "ese deterioro de todas esas infraestructuras que son críticas, que son fundamentales, pues lógicamente afectan a la marca España y afectan a la marca de nuestra región". Ha afirmado que el Gobierno del país está "simplemente en modo supervivencia" debido a la corrupción que rodea al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que quiere "reventarlo absolutamente todo y postrarse de hinojos ante los partidos independentistas".
También ha reprochado al Gobierno que se dedique a "alentar a los violentos y a la kale borroka" cuando tendría que dedicarse a "proteger la ley". En su opinión, "es el propio Gobierno el que tiene que proteger la ley, que es el que tiene el monopolio de la fuerza", pero no ha hecho uso de ella al no dar instrucciones a la Policía o la Guardia Civil "para que los violentos triunfen y den esa imagen de caos en nuestro país".
