La relación entre Francisco y León XIV, el heredero que intentará cerrar las heridas abiertas por su predecesor
- Prevost fue una de las grandes apuestas de Bergoglio, y durante los últimos años ha sido su estrecho colaborador
- Su talante más moderado le posiciona como puente entra las facciones conservadora y reformadora del catolicismo
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El estadounidense Robert Francis Prevost, que se ha convertido en el pontífice 267º de la historia bajo el nombre de León XIV, tiene un perfil muy cercano al de su predecesor, el papa Francisco, y al igual que él está considerado como reformador y progresista. Sin embargo, su talante más moderado le posiciona como puente entre las facciones conservadora y reformadora que dividen al catolicismo tras los 12 años de pontificado de Francisco, que han abierto heridas en la ortodoxia de la Santa Sede.
Sus primeras palabras como obispo de Roma incluyeron una evocación para su mentor. "Gracias, papa Francisco", dijo Prevost durante su primera intervención desde el balcón de la Basílica de San Pedro. "Dios que nos ama a todos e incondicionalmente. Aún mantenemos en nuestros oídos, esa voz débil, pero siempre valiente del papa Francisco bendiciendo en Roma", añadió.
Un recuerdo que también continuó el viernes, en su primer día como cabeza de la Iglesia católica. León XIV abrió su agenda de actos con una misa en la Capilla Sixtina ante los cardenales que le escogieron, y en esta primera homilía pidió continuar la misión de Francisco, cuya tumba visitó el sábado.
Una de las apuestas de Francisco
Con un carácter más templado, Prevost fue una de las grandes apuestas de Francisco, que lo designó responsable de los obispos de todo el mundo y de su comisión para Latinoamérica. Este misionero de la antigua Orden de San Agustín ha sido en los últimos años un estrecho colaborador del difunto papa.
En 2014, cuando ejercía como prior general de los agustinos de Chicago, Francisco le puso al frente de la diócesis peruana de Chiclayo, como administrador apostólico. Un año después fue nombrado obispo de esta ciudad y desde 2018 fue vicepresidente segundo de la Conferencia Episcopal de Perú.
Después de pasar en total dos décadas en el país sudamericano, en 2023 el pontífice argentino le reclamó en Roma para hacerle cardenal y nombrarle prefecto del Dicasterio para los Obispos, el ministerio vaticano que elige a los monseñores de todo el planeta. Al frente de esta poderosa institución, que controla una enorme red internacional de prelados, asistió también a las pugnas de su mentor, el papa Francisco, con los conservadores católicos, plasmadas por ejemplo con la destitución del obispo estadounidense Joseph Strickland en noviembre de 2023.
Francisco también situó a Robert Prevost como presidente de la Pontificia Comisión para América Latina gracias a su gran conocimiento sobre la realidad de este continente, que le ha valido el respaldo de los cardenales tanto del sur como del norte, muchos de estos últimos críticos con Francisco.
"Un segundo papa Francisco"
Aunque cauto, se ha pronunciado en numerosas ocasiones en línea con el papa Francisco, defendiendo la idea de un clero "cercano al pueblo", diametralmente opuesto a la figura de un "directivo" o "un gestor".
Según augura su propio hermano, John Prevost, Robert "será un segundo papa Francisco", y cuenta cómo en realidad "quería ser misionero, no quería ser obispo ni cardenal".
En el programa Las mañanas de RNE, el oficial del Dicasterio de los obispos y sacerdote de Zaragoza, Fernando Arregui, ha definido a León XIV como "un hombre tremendamente sencillo, comprometido y con una gran calidad humana". Arregui lo conoce de cerca y, aunque asegura que era de confianza del papa Francisco, por lo que la línea es parecida, considera que la principal diferencia con su predecesor está en la forma de expresarse. "Es una persona equilibrada y serena, le gusta ser cauto y reflexivo", asegura, antes de calificar al nuevo pontífice como "un hombre de consenso".
En esta misma línea, también en los micrófonos de RNE, monseñor Jordi Bertomeu, que ha sido enviado personal del papa Francisco para misiones especiales y oficial de la Doctrina de la fe, y conoce al nuevo papa, cree que León XIV "es una persona capaz de lograr un consenso entre muchas partes". En las apuestas previas al cónclave, opina que "pasó desapercibido precisamente por su carácter, porque es un hombre de un perfil bajísimo". "Es la némesis de Trump. Es decir, donde vemos un Trump histriónico, él es muy dulce, muy sencillo, y prefiere escuchar... Es un hombre que vive entre varios mundos", comenta.
"Yo quiero pensar que el nombre León... Yo no creo que sea tanto por León XIII, un papa de la doctrina social de la Iglesia, como por León, el amigo de Francisco, el que continúa la labor de Francisco", opina.
Referencia a León XIII
Sin embargo, ambas ideas son correctas, como el mismo papa explicó en su reunión con el Colegio Cardenalicio este sábado. Allí, el pontífice estadounidense señaló que "llamado a proseguir" el camino de Francisco, pensó en tomar el nombre de León XIV. La razón principal, indicó, es que el papa León XIII, con la histórica encíclica Rerum Novarum, "afrontó la cuestión social en el contexto de la primera gran revolución industrial y hoy la Iglesia ofrece a todos su patrimonio de doctrina social para responder a otra revolución industrial y a los desarrollos de la Inteligencia Artificial, que comportan nuevos desafíos en la defensa de la dignidad humana, de la justicia y el trabajo".
El prior general de la Orden de San Agustín y amigo personal de Prevost, el español Alejandro del Moral, coincide en que la elección del nombre papal deriva de la consideración de que León XIII "fue un gran papa". En este sentido, el clérigo subraya la importancia de las palabras "justicia" y "paz" en su primer discurso desde el balcón central de la basílica de San Pedro.
Del Moral destaca el carácter "muy equilibrado, muy espiritual" del nuevo pontífice, y cree que es "una persona verdaderamente cercana a todos", que "quiere a todo el mundo, pobres y ricos".
Aunque, en efecto, León de Asís fue el discípulo más íntimo de San Francisco de Asís, una figura clave en su vida espiritual y un testigo privilegiado de su legado. Fue un fraile franciscano que acompañó a Francisco en su vida de pobreza y predicación, y en quien este confió profundamente. Se le atribuyen varios escritos que recogen palabras y experiencias del santo, y su testimonio ha sido clave para conocer la vida y espiritualidad de San Francisco.
No hay que olvidar que Jorge Bergoglio escogió su nombre papal en honor a San Francisco de Asís, porque quería reflejar una Iglesia humilde, pobre y al servicio de los más necesitados, tal y como vivió el santo.
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