Claves de la decisión israelí de ocupar Gaza: así es el plan de Netanyahu que pone al límite a los palestinos
- MSF advierte que el plan israelí es "un paso más en la limpieza étnica"
- Guerra de Israel en Gaza, última hora en directo
Israel ha lanzado una nueva amenaza para la población gazatí. El gabinete de seguridad del Gobierno ha aprobado en la madrugada de este viernes a un plan para ocupar la Ciudad de Gaza, en el norte del enclave palestino, que acerca el objetivo militar propuesto por el primer ministro, Benjamín Netanyahu, de hacerse con la totalidad de la Franja.
Tras diez horas de reunión del Gabinete, el comunicado solo confirma la aprobación de "la propuesta del primer ministro para derrotar a Hamás" y los primeros pasos a ejecutar de la misma, lo que deja varias dudas sobre cuáles serán las consecuencias reales de este nuevo órdago de Israel en la situación humanitaria de los gazatíes.
En la actualidad, solo el 12% de la Franja acoge a toda la población restante en el enclave, y la nueva ocupación planteada empeorará el hacinamiento de los palestinos.
¿Ocupación de Ciudad de Gaza o toda la Franja?
El comunicado del Gobierno israelí indica que el Ejército "se prepara para hacerse con el control de Ciudad de Gaza", una localidad de un millón de habitantes (la mitad de la población del enclave) ubicada en el norte de la Franja, cuyos habitantes serán desplazados al sur antes del 7 de octubre, segundo aniversario de los ataques de Hamás en Israel que dieron pie a la guerra.
No obstante, horas antes de la reunión, Netanyahu avanzó a la cadena estadounidense Fox News que su objetivo es ocupar todo el territorio de Gaza, aunque no para quedárselo ni gobernarlo, sino mantener un "perímetro de seguridad".
Por lo tanto, según señalan varios medios israelíes, la operación en Ciudad de Gaza solo se trataría de un primer paso en el objetivo principal de ocupar todo el enclave y luego ceder su control a un "gobierno civil" que no abogue por la destrucción de Israel.
¿Qué consecuencias humanitarias tiene la operación israelí?
Al inicio de la ofensiva militar israelí en Gaza vivían dos millones de personas hacinadas, de las que más de 61.000 han sido asesinadas. En la actualidad quedan ocho campos de refugiados, situándose uno de ellos en Ciudad de Gaza, por lo que la nueva ocupación ocasionará nuevas consecuencias catastróficas para la población.
El responsable de la Unidad de Emergencias de Médicos Sin Fronteras (MSF), José Mas, indica a RTVE.es que una operación militar sobre CIudad de Gaza con la situación actual de hacinamiento tiene unos "riesgos enormes para los gazatíes", con "un enorme potencial de incrementar exponencialmente el número de víctimas directas por violencia".
Mas denuncia que "estamos viendo un genocidio que toma diferentes formas, retransmitido en directo, y si la ofensiva se traslada a estas zonas, el resultado solo puede ser más sufrimiento para una población civil que vive ya una situación humanitaria apocalíptica".
El plan de Netanyahu también afectará al acceso de las organizaciones humanitarias como MSF a la población, que ya a duras penas alcanza a abastecerse de comida y agua en "cantidades muy precarias y del todo insuficientes", indica el responsable de la organización humanitaria.
“Todo lo que es necesario para vivir está siendo destruido de manera sistemática“
"Estamos trabajando en un contexto donde todo lo que es necesario para vivir está siendo destruido de manera sistemática. Hemos llegado a un punto en el que hasta la ayuda humanitaria se ha convertido en arma letal", denuncia Mas, que cree que los últimos anuncios son un paso más en el plan de Israel para "llevar a cabo una limpieza étnica en la Franja mediante su campaña genocida contra el pueblo palestino".
"Esto va en contra del derecho internacional y, sin duda, acabará con la vida de muchos palestinos en Gaza. Cada minuto que pasa en Gaza es peor que el anterior", sentencia Mas.
También desde MSF, la coordinadora Pascale Coissard ha señalado en el Canal 24 horas que el nuevo plan de Israel de ocupar la Ciudad de Gaza "supondría otra vez un desplazamiento masivo" de los gazatíes.
Coissard asegura que "desplazarles otra vez va a ser una catástrofe humanitaria como no la hemos visto nunca". "Va a ser un drama en salud mental, pero también va a provocar muchísimas muertes", ha añadido.
¿Cuáles son los principios israelíes para terminar con la guerra?
La nueva medida israelí aprobada por el Gabinete de Seguridad incluye cinco principios para terminar con la guerra:
-El desarme de Hamás
-El regreso de todos los rehenes con o sin vida (20 vivos y 30 muertos)
-La desmilitarización de la Franja de Gaza
-El control de la seguridad israelí en el enclave
-El establecimiento de una administración civil alternativa "que no esté vinculada a Hamás ni a la Autoridad Palestina"
El desarme completo de Hamás y la no retirada total de fuerzas israelíes rompen con las líneas rojas del grupo terrorista, por lo que las opciones de un acuerdo de alto el fuego se vuelven a alejar.
Además, el quinto punto supone una declaración de intenciones del Gobierno israelí de cara a las futuras relaciones con la Autoridad Nacional Palestina (ANP), que gobierna en zonas limitadas de Cisjordania ocupada. Israel insiste en que no quiere que el Ejecutivo de Mahmud Abás forme parte de esa futura administración.
¿Quiénes se oponen a Netanyahu?
La iniciativa para ocupar Ciudad de Gaza llega impulsada a nivel ejecutivo, no militar, puesto que el jefe del Ejército israelí, Eyal Zamir, durante la reunión presentó un plan alternativo a ocupar Gaza que consiste en rodear sus ciudades y campos de refugiados y hacer incursiones puntuales.
Además, Zamir afirmó que entrar por tierra en zonas donde hay rehenes podría poner en peligro sus vidas. Sin embargo, una mayoría de ministros del Gobierno consideraron que el plan alternativo presentado por Zamir "no conseguiría ni la derrota de Hamás, ni la vuelta de los rehenes".
La respuesta de la oposición al Gobierno ha sido contundente. Su líder, Yair Lapid, ha afirmado que la medida "es un desastre que conducirá a muchos más desastres" y que no tiene en cuenta "el desgaste y el agotamiento de las fuerzas combatientes".
La ONU, antes incluso de que la operación se ponga en marcha, ha pedido que se "detenga inmediatamente" al considerar que se trata de un acto contrario al dictamen de la Corte Internacional de Justicia que exige a Israel que ponga fin a su política de ocupación.
Varios países se han sumado a esta petición, como Reino Unido, que considera que la decisión israelí de tomar el control de Gaza "es errónea" e insta al Gobierno de Jerusalén a reconsiderarla, o España, que la condena al señalar que "solo provocará más destrucción y sufrimiento".
Una de las reacciones más contundentes ha sido la de Alemania, uno de los apoyos más férreos de Israel. El canciller alemán, Friedrich Merz, ha señalado en un comunicado que el plan de Netanyahu no permite comprender cómo Israel pretende alcanzar los objetivos de desarmar a Hamás, lograr la liberación de los rehenes y emprender rápidamente negociaciones para un alto el fuego y ha decidido suspender hasta nuevo aviso las exportaciones al Estado hebreo de armamento.
