EE.UU. condena la decisión de Francia de reconocer al Estado palestino: "Solo sirve a la propaganda de Hamás"
- Macron reconocerá en septiembre al Estado palestino en línea con la política exterior de España, Irlanda y Noruega
- Mientras Israel condena "enérgicamente" la decisión, Hamás lo ve como "una medida positiva"
Después de que Francia haya anunciado que reconocerá en septiembre al Estado palestino, la Administración estadounidense ha reaccionado con un claro rechazo. El Gobierno de Donald Trump ha insistido en que se trata de "una decisión irresponsable" que "solo sirve a la propaganda de Hamás y representa un retroceso para la paz".
La reacción norteamericana era la esperable, ya que la Casa Blanca es el gran padrino de los hebreos. Desde el inicio de la ofensiva israelí en la Franja de Gaza, tanto Trump como su predecesor, Joe Biden, han hecho que su país se mantenga como el principal proveedor de armas de Israel y también ha bloqueado constantemente resoluciones de la ONU críticas con Tel Aviv.
En este sentido, en julio, el embajador de Washington en Israel, Mike Huckabee, declaró que un Estado palestino independiente no era un objetivo de la política exterior estadounidense y el propio Trump lo reiteró en sus declaraciones. A los pocos días de tomar posesión, propuso deportar forzadamente a los dos millones de personas que viven en Gaza para crear allí un resort, algo que fue visto por gran parte de la comunidad internacional como una propuesta de "limpieza étnica".
Sin embargo, Macron llevaba meses inclinándose por esta medida como parte de un intento por mantener viva la idea de una solución de dos Estados, a pesar de la presión tanto de Estados Unidos como de Israel para no hacerlo. La decisión de Francia, que alberga las comunidades judía y musulmana más grandes de Europa, podría impulsar un movimiento hasta ahora dominado por naciones más pequeñas y generalmente más críticas con Israel.
Aumenta la presión en Reino Unido para reconocer a Palestina
El anuncio de Emmanuel Macron ha reavivado el debate diplomático en Europa y ha puesto en el foco en el Reino Unido, donde crece la presión sobre el Gobierno laborista del primer ministro, Keir Starmer. Aunque insiste en que el reconocimiento debe esperar a que se logre un alto el fuego en Gaza, varios parlamentarios laboristas y figuras políticas como el alcalde de Londres, Sadiq Khan, han reclamado dar el paso.
Por otro lado, la influyente comisión de asuntos exteriores del Parlamento británico ha declarado que "el Gobierno no puede seguir esperando el momento perfecto, porque la experiencia demuestra que nunca lo habrá". Por su parte, Starmer ha señalado que "el reconocimiento del Estado palestino debe formar parte de un plan más amplio para la solución de dos Estados".
Sin embargo, en términos de política exterior, Londres rara vez ha divergido de los Estados Unidos, más aún en el caso israelí, donde el presidente Trump mantiene una posición de apoyo incondicional a Tel Aviv.
"Deseamos un Estado palestino, pero hoy la urgencia es poner fin al sufrimiento extremo en Gaza", se ha limitado a señalar el ministro de Ciencia y Tecnología, Peter Kyle. Starmer tiene previsto discutir este viernes con los líderes alemán y francés las maneras de presionar a Israel para que ponga fin a su guerra en Gaza.
En esta línea, Portugal también se ha declarado abierto a reconocer Palestina, y participará en una cumbre en Nueva York auspiciada por Francia y Arabia Saudí para impulsar la solución de dos Estados.
Estados Unidos e Israel apelan al 7 de octubre
Es por ello, que el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, ha insistido en que la decisión francesa "es una bofetada en el rostro de las víctimas del 7 de octubre". En línea con la postura de Washington, primer ministro, Benjamin Netanyahu, ha condenado la decisión "enérgicamente", al argumentar que "premia el terrorismo y corre el riesgo de crear otro Estado aliado de Irán, como ocurrió con Gaza".
En esta visión también han insistido la mayoría de miembros de su Gobierno. Desde el inicio del conflicto, Israel ha justificado su asedio sobre Gaza tras el ataque perpetrado por Hamás el 7 de octubre de 2023, y por ello sostiene que reconocer al Estado palestino en este momento equivaldría a recompensar a Hamás.
Quien sí ha celebrado el anuncio es la milicia palestina que gobierna de facto en el enclave. Hamás lo ha considerado como "una medida positiva en la dirección correcta para lograr justicia para el pueblo palestino oprimido". Para el movimiento, la posición de Francia representa "un avance político que refleja la creciente convicción internacional sobre la justicia de la causa palestina y el fracaso de la ocupación en su intento de tergiversar los hechos u obstaculizar la voluntad de los pueblos libres".
De la misma forma, el vicepresidente de la Autoridad Palestina, Hussein Al Sheikh, ha declarado que la decisión del presidente francés, Emmanuel Macron, reflejaba "el compromiso de Francia con el derecho internacional y su apoyo al derecho del pueblo palestino a la autodeterminación y al establecimiento de un Estado independiente".
Solución de los dos Estados
Macron llevaba meses inclinándose por reconocer al Estado palestino como parte de un intento por mantener viva la idea de una solución de dos Estados. El anuncio de esta decisión llega en un momento clave, justo antes de la conferencia de la próxima semana, y busca brindar al equipo francés en las Naciones Unidas un marco para trabajar con otros países que también están considerando reconocer un Estado palestino o que aún tienen dudas al respecto.
Esta decisión se ve rodeada por una oleada de denuncias que acusan a las fuerzas israelíes de matar de hambre a la población gazatí, haciendo del hambre un arma de guerra. El jueves número de muertos palestinos en la Franja aumentó a 59.587, con 143.498 heridos desde que estalló el conflicto.
Francia seguirá los pasos de países como Noruega, Irlanda y España, que en mayo de 2024 reconocieron de manera coordinada el Estado palestino en las fronteras anteriores a 1967 e instaron a otras naciones a hacer lo mismo. Eslovenia respondió al llamamiento ese mismo mes, al igual que Armenia, que lo hizo a mediados de junio. Aunque en Europa apenas superan la decena, 148 de los 193 países de la ONU ya reconocen a Palestina, que tiene estatus de observador no miembro en Naciones Unidas.