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La UE debate suspender su acuerdo de asociación con Israel "mientras dure la guerra" en Gaza

  • Albares considera que es un paso en la buena dirección para aumentar la entrada de ayuda humanitaria en Gaza
  • Los ministros de Exteriores tienen previsto debatir el último plan de Trump sobre el envío de armas a Ucrania
Banderas europeas ondeando ante un edificio de oficinas moderno con fachada de cristal y estructura de acero visible.
Banderas europeas ondeando frente a la Comisión Europea GETTYIMAGES
RTVE.es

Los ministros de Asuntos Exteriores de la Unión Europea se reúnen este martes para debatir una posible suspensión del Acuerdo de Asociación con Israel. El tema es polémico para los 27, ya que mientras que algunos países, entre ellos España, acusan al Gobierno de Benjamín Netanyahu de violar el derecho internacional, otros como Alemania justifican las acciones hebreas en territorio palestino.

Suspender las relaciones requeriría una decisión unánime, algo que es prácticamente imposible de conseguir por países como Austria, Alemania y Hungría, que apoyan a Israel incondicionalmente. En este sentido, la jefa de la diplomacia comunitaria, Kaja Kallas, acostumbrada a señalar con contundencia las acciones de Moscú contra Kiev, ha insistido en que el bloque ha observado "algunas señales positivas" de Israel en la lucha contra la crisis humanitaria en Gaza, después de año y medio de asedio y 57.000 palestinos muertos.

Este proceso por el reconocimiento del pueblo palestino en Bruselas ha estado liderado por el Gobierno español, que este martes volverá a pedir al Consejo de Exteriores que suspenda el acuerdo de asociación con Israel mientras dure la guerra. En este sentido, el ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, considera que es un paso en la buena dirección para aumentar la entrada de ayuda humanitaria en la Franja. Sin embargo, para el portavoz, la llegada de alimentos y medicinas a Gaza es lo mínimo. A su llegada a Bruselas, ha considerado que esa petición no es "nada extravagante ni extraordinaria".

Madrid ha propuesto suspender el acuerdo de asociación de la UE, un embargo a la venta de armas al país y aumentar la lista de sancionados que intentan "malograr" la solución de dos Estados. Estas acciones que Albares va a pedirá durante la jornada a sus homólogos son independientes del acuerdo alcanzado la semana pasada entre la UE e Israel para facilitar la ayuda humanitaria a Gaza, que España considera como "un buen paso" y que reclamaba desde "hace mucho tiempo" y al que no se opone siempre que se respeten ciertas "salvaguardas".

De la misma forma, Albares ha razonado que, "si el derecho internacional dice que los asentamientos israelíes, y así lo ha declarado en muchas ocasiones también el Tribunal Internacional de Justicia, son ilegales, la Unión Europea tiene que tomar medidas y claridad en su propia norma sobre etiquetado de productos que vengan de los asentamientos".

Trump y la guerra en Ucrania

Esta reunión coincide con la propuesta de la administración Trump de comprar armas estadounidenses para Ucrania y por ello, los ministros también tienen previsto debatir el último plan estadounidense. La Casa Blanca ha sugerido que sus aliados europeos adquieran miles de millones de dólares en equipo militar estadounidense que pueda transferirse a Ucrania, mientras Kiev busca la manera de defenderse mejor de la intensificación de los ataques rusos.

Trump anunció la iniciativa el lunes durante una reunión en la Oficina Oval con el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, quien ha estado trabajando con países europeos para coordinar la compra de armas estadounidenses. El plan está diseñado para permitir que Estados Unidos canalice más potencia de fuego a Ucrania para combatir a las fuerzas rusas durante su ofensiva militar de verano, a la vez que alivia la carga financiera de Washington.

El aumento de los envíos de armas, sumado a las posibles nuevas sanciones que Trump ha prometido si no se alcanza un cese de los combates en 50 días, podría impulsar al presidente ruso, Vladímir Putin, a las conversaciones de paz que el republicano ha defendido durante meses, hasta ahora con pocos resultados.