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Rusia celebra su "día de la victoria" mientras los líderes de la UE se citan en Leópolis con la guerra de Ucrania de fondo

Militares rusos participan en el desfile militar del Día de la Victoria
Militares rusos participan en el desfile militar del Día de la Victoria EFE/EPA/MAKSIM BOGODVID / HOST PHOTO AGENCY RIA NOVOSTI

Rusia celebra este viernes el 80º aniversario de la victoria del Ejército rojo sobre los nazis con un gran desfile militar en Moscú y rodeado de grandes líderes mundiales que abogan por un nuevo orden mundial alternativo. En contraposición, y haciendo manifiesto de un mundo cada vez más polarizado, los ministros de Exteriores de la UE se citan en Leópolis para mostrar su apoyo a Ucrania en la guerra. Sucede en un momento clave en las negociaciones en el que Occidente pretende lograr un alto al fuego favorable para Kiev.

El presidente ruso, Vladímir Putin, rompió en octubre de 2024 su aislamiento diplomático con la cumbre del grupo BRICS. Este viernes se ha vuelto a reunir con muchos de sus homólogos con los que se encontró hace más de seis meses. Ha estado rodeado de una treintena de mandatarios extranjeros, entre ellos los de China, Xi Jinping; Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva; Venezuela, Nicolás Maduro, y Cuba, Miguel Díaz-Canel. El gran ausente ha sido el primer ministro de la India, Narendra Modi, ausente debido a la situación que se vive en su país en medio de la escalada militar con la vecina Pakistán.

El mandatario chino, Xi Jinping, que no visitaba Rusia desde hace dos años, es el invitado de honor. Su presencia en la Plaza Roja simboliza la solidez de la alianza entre Moscú y Pekín, a pesar de los intentos de Washington por generar tensiones entre ambos países. Ocurre también tras el reciente acercamiento entre Putin y el presidente estadounidense, Donald Trump.

Al otro lado de la frontera, en Leópolis, se han dado cita la jefa de la diplomacia comunitaria, Kaja Kallas, y varios ministros de Exteriores, entre ellos el español, José Manuel Albares, o el inglés, David Lammy. Conmemorando el Día de Europa, han honrado a los caídos ucranianos en la guerra. Esta visita reafirma el respaldo comunitario al establecimiento de un tribunal especial que juzgue "la agresión militar rusa contra Ucrania", según dijo antes de emprender el viaje la alta representante de Bruselas.

Durante la reunión, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, ha reivindicado la necesidad de crear un tribunal especial para juzgar la agresión militar rusa. "Porque si una sola guerra se queda sin castigo, vendrán más guerras. Es exactamente por lo que (el presidente ruso) Vladímir Putin comenzó la guerra a gran escala contra Ucrania", ha dicho a los representantes desplazados a Leópolis.Allí, los jefes de las diplomacias de la Unión Europea, de Dinamarca, Italia, Países Bajos y Francia han firmado un acuerdo para destinar 1.000 millones de euros generados por los activos rusos congelados a la producción de armamento en Ucrania que se enviará directamente al Ejército de Kiev.

De fondo, la guerra en Ucrania

Putin ha asegurado que Rusia seguirá combatiendo la tergiversación de la historia de la contienda mundial, la rehabilitación del nazismo y las brutalidades que siguen cometiendo los abanderados de esas "destructivas ideas". Ante sus tropas que exhiben el poderío bélico ruso, el mandatario ha apoyado a los soldados que participan en la campaña militar en Ucrania desde el 24 de febrero de 2022. "Todo el país, la sociedad, el pueblo apoya a los participantes en la operación militar especial. Nos sentimos orgullosos de su valentía y tesón, esa fuerza de espíritu que nos ha otorgado siempre y únicamente la victoria", ha recalcado.

Seguidamente, por la plaza han desfilado más de 11.500 soldados rusos y de otros 13 países, junto a máquinas de guerra como misiles intercontinentales, drones de asalto y los históricos tanques soviéticos T-34. Moscú se ha convertido estos días en una fortaleza de máxima seguridad. Además del notable incremento del dispositivo policial en las calles, las autoridades han decidido limitar el uso de internet en el centro de la capital en previsión de posibles ataques.

Ruptura del alto el fuego

Con motivo de esta cita, e igual que hizo en Pascua, Putin declaró un alto el fuego "por motivos humanitarios" de tres días que Ucrania no aceptó. El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, aceptó la tregua pascual, pero rechazó categóricamente la del Día de la Victoria tras calificarla de "farsa" e insistió en su demanda de que Moscú baje las armas durante un período de 30 días prorrogables. En este contexto, ambos países se han acusado repetidamente de violar el alto el fuego.

Desde el jueves, día del comienzo de la tregua, "Rusia cometió 734 violaciones del alto el fuego y 63 operaciones de asalto, 23 de las cuales siguen en curso", ha denunciado el ministro ucraniano de Asuntos Exteriores, Andrii Sybiha. El Ministerio de Defensa ruso ha indicado, por su parte, que Kiev había llevado a cabo 488 ataques contra objetivos rusos y que trató dos veces de romper la frontera en la región de Kursk.