Enlaces accesibilidad

La Comisión Europea empeora con fuerza la estimación de crecimiento de la zona euro

  • Bruselas cree ahora que se expandirá un 1,3% este año, seis décimas menos de lo previsto hace unos meses
  • Rebaja drásticamente las estimaciones de Alemania y Países Bajos y, sobre todo, de Italia, que apenas crecerá

Por
Empeora seis décimas la previsión de crecimiento de la zona euro este año

Bruselas ha rebajado con fuerza las previsiones de crecimiento en la eurozona durante 2019. El Ejecutivo comunitario considera ahora que el PIB de los Diecinueve se expandirá un 1,3%, seis décimas menos de lo que había pronosticado anteriormente, sobre todo por el peor comportamiento de las grandes economías, sobre todo Alemania e Italia -ambos a la cola de la UE-, pero también Países Bajos y Francia.

En el caso de España, el país resiste y crecerá un 2,1%, sigue por encima de la media comunitaria, "pero de una forma menos marcada que en años anteriores", según ha señalado el comisario europeo de Asuntos Económicos, Pierre Moscovici, en rueda de prensa.

"Nuestra previsión se revisa a la baja, en particular, para las mayores economías de la eurozona. Eso refleja factores externos, como las tensiones comerciales y la ralentización en mercados emergentes, sobre todo, en China", ha declarado en un comunicado el vicepresidente de la Comisión para el Euro, Valdis Dombrovskis.

Italia y Alemania, a la cola de la UE

Esto explica, por ejemplo, lo que ocurrirá en Alemania, país muy vinculado a las exportaciones y al comercio mundial. La locomotora europea tirará menos de sus socios europeos al expandirse su PIB este año un 1,1% (siete décimas menos de lo estimado en el mes de noviembre por la Comisión Europea).

Respecto a Italia, el Ejecutivo comunitario señala que su economía comenzó a perder impulso a principios de 2018 -en gran medida al menor dinamismo del comercio mundial- y que entró en recesión a finales del año por la menor demanda interna, sobre todo en la inversión.

Para 2019 prevé un crecimiento del 0,2%, un punto menos que lo señalado hace unos meses, una perspectiva sujeta "a una gran incertidumbre" relacionada con la política gubernamental y el aumento de los costes de financiación (prima de riesgo).

Francia y los Países Bajos, la segunda y la quinta economía de la zona euro, también se expandirán menos. En concreto lo harán un 1,3% y un 1,7%, respectivamente.

Del otro lado, las previsiones comunitarias muestran a Malta (5,2%), Irlanda y Eslovaquia (4,1%) como los países que más crecerán el año que viene. Uno de los pocos a los que, además, se le ha subido la estimación para este año es Grecia, cuya economía se expandirá un 2,2%, justo el doble que Alemania.

Las tensiones comerciales, China y el Brexit, a tener en cuenta

La Comisión Europea ha explicado que la actividad económica se "moderó" en la segunda mitad de 2018 por un menor crecimiento del comercio global, porque "la incertidumbre debilitó la confianza" y porque algunos Estados miembros se vieron afectados "por factores internos temporales", como "tensiones sociales e incertidumbre en materia de política presupuestaria".

Este es el caso de Francia -con las protestas de los chalecos amarillos- e Italia -con las diferencias con su presupuesto entre Roma y Bruselas-.

A nivel global, las tensiones comerciales "siguen siendo motivo de preocupación" a pesar de que "se han reducido en alguna medida". Otros factores a tener en cuenta son el proceso del Brexit, la economía de China -que "se puede estar ralentizando más de lo previsto"-, los mercados financieros y "muchos mercados emergentes", que son "vulnerables a los cambios bruscos en el clima de riesgo y las expectativas de crecimiento".

Resurgen las preocupaciones sobre la sostenibilidad de la deuda

Bruselas también ha hecho referencia a otros aspectos que tendrán un impacto negativo en el incremento del PIB, y ha señalado que las "preocupaciones" por el vínculo entre los bancos y la deuda pública, así como por la sostenibilidad de la deuda "están resurgiendo en algunos países de la eurozona".

"Ser consciente de estos riesgos crecientes supone la mitad del trabajo. La otra mitad es escoger la combinación adecuada de políticas, como facilitar la inversión, redoblar los esfuerzos para llevar a cabo reformas estructurales y perseguir políticas fiscales prudentes", ha señalado Dombrovskis en una nota de prensa.

Las previsiones macroeconómicas de invierno del Ejecutivo comunitario también revisan a la baja el crecimiento del PIB en 2020 tanto en los países que comparten la moneda única (hasta el 1,6%) como en los Veintiocho (al 1,7%). En sus estimaciones de otoño, publicadas en noviembre, la CE esperaba que crecieran el año que viene un 1,7% y un 1,8%, respectivamente.