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La OCDE destaca la alta temporalidad en España aunque haya mejorado la situación laboral

  • Uno de cada cuatro nuevos contratos es temporal, el doble que en la OCDE
  • El informe alerta de que el empleo puede no recuperarse antes de otra recesión

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Un camarero de un chiringuito en Torremolinos
Un camarero de un chiringuito en Torremolinos.

La OCDE dice en su Informe de Perspectivas de Empleo 2016 que la situación laboral en España ha mejorado, aunque indica que la mayoría de nuevos contratos aún son temporales y que más reformas podrían ser necesarias para reducir la segmentación.

El informe, que se presentó simultáneamente en Tokio y otras ciudades del mundo, indica que la reforma laboral de 2012 "no generó ningún efecto negativo a corto plazo" pese a ser implementada en el momento más agudo de la crisis. Esta reforma ha ayudado a abordar la "profundamente arraigada segmentación" del mercado español mejorando los incentivos para la contratación permanente, afirma.

Los análisis de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) sugieren que la reforma incrementó en un 45% la proporción de contratos indefinidos dentro del total de nuevas contrataciones.

Sin embargo, la gran mayoría de nuevos empleos aún son temporales, por lo que el organismo cree que una serie de "reformas adicionales" podría reducir la brecha en los costes de extinción que existe entre contratos indefinidos y temporales.

La temporalidad duplica en España la media de la OCDE

En total, uno de cada cuatro puestos de trabajo en España siguen siendo con contrato temporal, por debajo de los niveles de 2007 (cuando se situaba por encima del 30%), pero también por debajo de la media OCDE, que está en el 11%.

El informe considera que la situación del mercado laboral en España ha mejorado "de manera continua durante los últimos dos años", y que la tasa de ocupación aumentó en el cuarto trimestre de 2015 en cerca de tres puntos porcentuales con respecto a su peor nivel tras la crisis -a principios de 2013- hasta alcanzar el 51,3%.

No obstante, esa tasa está por debajo del nivel precrisis -cuando estaba en torno al 60%- y de la media OCDE, que es del 60,2%. La brecha de 5,7 puntos porcentuales en España prevista para 2017 es la segunda mayor entre los 34 países de la organización, sólo por detrás de Grecia, que al cierre del próximo año aún mantendrá una tasa de empleo 6,9 puntos porcentuales por debajo de la existente a finales de 2007.

Riesgo de no recuperar el empleo antes de una nueva recesión

"Una recuperación total de empleo sigue estando ciertamente lejos (en estos países) y existe el riesgo de que no se consiga antes de que se produzca una nueva recesión", advirtió el director de la OCDE de Asuntos Sociales, Empleo y Trabajo, Stefano Scarpetta.

En 2017, el mercado laboral español mantendrá el buen tono, aunque la creación de puestos de trabajo se desacelerará en línea con el menor crecimiento de la economía, con un ritmo de creación de empleo del 2,1%, por detrás de Turquía (2,8%) e Irlanda (2,4%) y en línea con Luxemburgo y Grecia.

En cuanto al paro, el club de los países desarrollados estima que para el último trimestre de 2017 la tasa se habrá reducido ya por debajo del 21% actual hasta un 17,8%.

El documento vuelve a alertar sobre la situación de los parados de larga duración (aquellos que llevan sin trabajar un año o más) y que en España suponen más de la mitad de los desempleados (1,4 millones de personas), muy por encima del promedio OCDE del 34%. Para este colectivo, recomienda seguir potenciando los programas de activación, como los de capacitación o de apoyo a la búsqueda de empleo.

El 12,9% de los jóvenes españoles son ninis

También subraya los riesgos para el colectivo nini, aquellos de entre 15 y 29 años que ni estudian ni trabajan y que suponen en España el 12,9% de todos los jóvenes, uno de los niveles más altos de la OCDE, cuya media está ligeramente por encima del 5%. Esa proporción de jóvenes con dicho perfil está además 3,4 puntos porcentuales por encima del nivel precrisis.

Además, al igual que sucede también en países como México o Turquía, más del 50% de los "ninis" en España no terminaron la educación secundaria. A esto se añade el que más de un tercio de los jóvenes españoles que no tienen empleo y no se están formando viven en hogares en los que ningún familiar trabaja.

La OCDE pide para ellos "políticas efectivas" que los reconecte con el mercado laboral y evite que caigan en la pobreza y la marginación.