Enlaces accesibilidad

Ford trasladará a Almussafes la producción de la fábrica belga de Genk, que cerrará

  • El desmantelamiento de la planta belga supondrá la supresión de 4.300 empleos
  • Los sindicatos de Almussafes dicen que el cierre "no es una buena noticia"
  • El Gobierno belga, "consternado", habla de "duro golpe" para la economía belga

Por

La dirección de Ford ha mantenido este miércoles una reunión con  el comité de empresa de la fábrica que el grupo estadounidense tiene en la localidad valenciana de Almussafes para comunicar a los  sindicatos de manera oficial la decisión de la multinacional de  cerrar su planta belga de Genk y trasladar la producción de estas  instalaciones a la factoría valenciana. El cierre de Genk supondrá la desaparición de 4.300 puestos de trabajo.

Según han explicado fuentes sindicales a Europa Press, la dirección les ha comunicado esta decisión  de Ford Europa que supone un "primer paso" del plan de  reestructuración de la compañía, aunque no les han proporcionado  ningún detalle de fechas de cierre de la planta belga y sobre cuándo  y cómo asumiría Almussafes esa producción.

La empresa automovilística quiere reorganizar su actividad en Europa para responder a la bajada de sus ventas en este continente.

Desde la representación sindical de UGT y CC.OO. en la planta han  rechazado evaluar la decisión de cierre de la  factoría belga hasta que la  dirección de la compañía no ofrezca los detalles. En este sentido, se  han remitido a una próxima reunión del comité de empresa europeo, en  el que se abordarán las consecuencias de la medida.

En este sentido, desde UGT han apuntado el "sabor agridulce" que  produce la decisión, mientras que CC.OO. ha considerado que no es  "una buena noticia para Ford Europa y la marca", y han expresado su  "máxima solidaridad" con los trabajadores de la factoría belga.

Traslado de los modelos Mondeo, S-Max y Galaxy

Previamente, Ford había comunicado la decisión de cerrar la planta  de Genk y de trasladar su producción a Valencia a los sindicatos de  la fábrica belga, según Luc Prenen, representante de los trabajadores en esa planta.

Prenen ha avanzado que la intención de la compañía es trasladar la  producción de los modelos Mondeo, S-MAX y Galaxy a la factoría de  Almussafes, según informa la agencia Reuters.

"La dirección ha decidido cerrar la planta de ensamblaje y las  actividades de prensado en Genk al final del actual ciclo de  producto, que terminará en 2014", expuso el sindicalista, quien se ha dirigido  a los trabajadores a través de un megáfono.

El Gobierno belga, "consternado"

El Gobierno de Bélgica se ha declarado "consternado" por la decisión de Ford Europa. "El Gobierno federal está consternado por el anuncio del cierre de Ford Genk", señaló el Ejecutivo belga mediante un comunicado de prensa, en el que también indicó que la decisión es un "drama" para los trabajadores y las economías regional y general de Bélgica.

"En estos momentos tan difíciles, el Gobierno se une a los 4.300 trabajadores y sus familias, así como a los otros 5.000 de numerosas empresas subcontratadas afectadas", ha señalado el Ejecutivo belga, que considera el cierre de la fábrica como "un duro golpe" para la economía del país.

Su primer ministro, el socialista francófono Elio di Rupo, se ha reunido con la dirección de Ford Europa, que llegó a la sede del Gobierno belga con una fuerte escolta policial, así como con el presidente del gobierno regional flamenco, el democristiano Kris Peeters (CD&V), quien ha destacado que "es una ducha de agua fría". "Hemos hecho todo lo posible para mantener la planta abierta", ha dicho.

Por su parte, la ministra belga de Empleo, Monica De Coninck, ha expresado su incomprensión respecto al cierre de la planta de Genk, y se ha preguntado si la decisión no supone "poner a competir a los países europeos unos contra otros".  De Coninck ha recordado que el constructor estadounidense recibió numerosos subsidios para mantener su producción en Bélgica, que ahora, según admitió, serán difícil de recuperar.