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Forlán y Agüero refrendan el estreno de Abel

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Diego Forlán, autor de dos goles, intenta batir al portero del Recreativo, Asier Riesgo
Diego Forlán, autor de dos goles, intenta batir al portero del Recreativo, Asier Riesgo

El Atlético de Madrid acabó con sus rebajas de enero y recuperó la senda de la victoria, que se le negaba desde el año pasado, con el revulsivo retorno de un Abel Resino que vaticinó que con él las cosas iban a cambiar. Dicho y hecho, el vestuario rojiblanco ha respondido con goles y tres puntos que acercan de nuevo al equipo a los puestos europeos [Todos los datos del partido].

La máquina de hacer goles como churros que había llevado al Atlético a una racha de quince partidos sin perder y que constituyó el augue y caída de Javier Aguirre volvió a engrasar siete partidos y cinco derrotas más tarde. La sociedad Agüero-Forlán fabricó los tres goles de la victoria en la primera parte, uno del pequeño argentino nada más empezar el partido y dos buenos remates del uruguayo que aseguraron la victoria en los primeros 45 minutos.

Apostó Resino por un equipo ofensivo, en cuyo flanco izquierdo atacaba Antonio López y Sinama Pongolle ocupaba el lugar de Maxi en el extremo derecho. Fue el francés, ex del Recreativo, el que dio un pase desde la derecha para que el 'Kun' rematara de cabeza, sin usar la mano como en aquella célebre ocasión, con la permisividad de la defensa andaluza.

No se esperaba quizá el equipo rojiblanco un inicio tan fácil, lo que aprovechó para encomendarse a su especialidad, los contraataques, aunque la defensa adelantada a punto estuvo de darle un susto tras una vaselina fallida de Colunga.

Pero dos contras lanzadas a toda velocidad por la conexión 'Kun'-Forlán terminaron con sendos mano a mano que no desperdició el uruguayo ante Riesgo rematando con gran calidad. Tuvo el Recreativo la opción de poner el 1-2 en el marcador (Mariano Pernía evitó el gol bajo la portería), pero era el día de la reacción del Atlético,

 

Con su ataque fino y la defensa segura, el equipo caminó seguro y prácticamente sin agobios. ¿Del todo? No, porque cuando acababa el partido, Forlán tuvo que pedir el cambio debido a un fuerte dolor en su pierna izquierda. Los análisis confirmarán si existe lesión, pero por lo demás el Atlético respira un poco más tranquilo.