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Obama, satisfecho con los "avances" logrados en el G-20 sobre la crisis de deuda de la eurozona

  • El presidente de EE.UU. subraya que el mundo está decidido a apoyar a Europa
  • Aseura que el plan de rescate envía "una firme señal" de que la UE está "vivita y coleando"
  • Sarkozy niega presiones a Grecia e Italia para que cambien sus gobiernos

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La canciller alemana, Ángela Merkel, dialoga con Obama antes del comienzo de una sesión de trabajo en Cannes.
La canciller alemana, Ángela Merkel, dialoga con Obama antes del comienzo de una sesión de trabajo en Cannes.

El presidente de EEUU, Barack Obama, ha asegurado este miércoles que la cumbre del G-20 clausurada en Cannes ha conseguido encaminar "avances" contra la crisis de la deuda en la eurozona pero ha ironizado con la complicación de los mecanismos de decisión de la UE en un reflejo de la desesperación de algunos de los líderes internacionales por la gestión de la crisis de deuda.

En una rueda de prensa a la clausura de la cumbre, Obama ha citado entre esos progresos la decisión de Italia de invitar al FMI a supervisar su proceso de reformas, el camino emprendido para resolver la situación griega y la identificación de herramientas para "apoyar" el plan de rescate europeo.

Decidido a apoyar a Europa

"En lo que concierne a Europa, hemos venido a Cannes para discutir con nuestros amigos europeos la forma en la que podrían hacer para poner en marcha el plan que acordaron la semana pasada para resolver la crisis", ha detallado Obama, que se ha mostrado desde un principio exigente con la eurozona para que concrete sus planes para tranquilizar a los mercados, tal y como dejó claro a su llegada a la cumbre en una rueda de prensa con el presidente francés, Nicolás Sarkozy.

En esos dos días, ha ironizado Obama, ha aprendido mucho sobre los "laboriosos" mecanismos de decisión de la Unión Europea, aunque se ha mostrado confiado en la capacidad de Europa para superar los retos planteados, siempre y cuando, ha subrayado, se implanten rápidamente.

Según ha apuntado, el resto de la comunidad internacional está decidida a apoyar a Europa en su lucha contra la crisis, pues si la UE no crece ello perjudicará a toda la economía global.

La comunidad internacional "está dispuesta a asistir para asegurarnos de que se protege a la economía global en tanto Europa resuelve" su crisis, ha señalado.

Escepticismo internacional

Pero ese compromiso ha distado mucho de ser concreto. "Apenas hay ningún país aquí que esté preparado para colaborar con el fondo de rescate", ha reconocido la canciller alemana, Angela Merkel.

De hecho, potenciales inversores soberanos como China o Brasil se han negado a dar aún ningún compromiso concreto para el fondo de rescate y han subrayado que en todo caso lo harían a través del Fondo Monetario Internacional.

"Europa necesita poner su propia casa en orden", ha resumido el tono de muchos de los participantes de la cumbre la primera ministra australiana, Julia Gillard.

Y es que la visita de Obama y otros líderes no europeos a Cannes se ha visto ensombrecida con lo ocurrido en Grecia, donde el posible referéndum planteado por el primer ministro heleno, Yorgos Papandréu, dilataba seriamente la aplicación del plan acordado y también por las dudas respecto a la credobilidad de Italia, fortalecidas por el comportamiento de su primer ministro, Silvio Berlusconi.

Sarkozy: No ha habido presión sobre Grecia e Italia

En este sentido, el presidente francés ha rechazado en la rueda de prensa posterior a la cumbre haber ejercido presión alguna para conseguir un cambio de Gobierno en Grecia o Italia durante los últimos días.

Así respondió el jefe del Estado francés a una pregunta formulada en la conferencia de prensa final de la Cumbre del G20, donde además ha añadido: "trabajaremos con el Gobierno griego sea cual sea su composición".

"Todo el problema reside en la reconciliación de Europa con sus pueblos", ha agregado Sarkozy, quien se mostró molesto con el periodista de un medio británico que le planteó la pregunta al respecto y apeló a la nacionalidad de este para reprochársela.

"Si no se cumplen las reglas se sale de Europa", ha sentenciado el presidente francés, quien ha añadido: "no elegimos los Gobiernos".