En todo el litoral de la Costa Brava, especialmente en Girona, hay olas de más de cinco metros, que han llegado a rozar los 10 metros en alta mar. Acercarse a espigones y paseos marítimos es muy peligroso.
Se trata de un temporal de primera categoría que se prevé que golpee la costa catalana, de norte a sur. Las rachas de viento pueden llegar a 70 kilómetros por hora. Seguirá lloviendo durante las próximas 36 a 58 horas, en algunas zonas del interior de Cataluña, la acumulación de agua ya supera los 100 litros por metro cuadrado.
La jefa de servicios de emergencias, Montse Font, afirma que "todo el agua que cae baja y queda acumulada en el terreno y ríos y afluentes pequeños son los que nos preocupan más". Este es el caso del río Mano, que ha superado el umbral de peligro. Ha obligado a desalojar una residencia.
En Cataluña este viernes es festivo y hay mucha movilidad, sobre todo, en cuanto a desplazamientos cortos. De momento, hay quince carreteras afectadas.
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