Díaz pide a la CEOE "altura de miras" para pactar la reforma de la ley de prevención laboral: "Con la salud no se juega"
- Ve posible un acuerdo tripartito con los agentes sociales antes de que finalice noviembre
- Anuncia, además, que 2026 será declarado Año de la Seguridad y Salud en el Trabajo
La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, ha pedido este miércoles "altura de miras" a la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) para pactar la reforma de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, vigente desde hace 30 años, porque "con la salud no se juega". Díaz ha exigido "actuar cuanto antes" para reducir el número de muertes por accidentes de trabajo, que se situaron en 677 el pasado año.
"Me parece que la vida de la gente tiene que estar por encima de cualquier interés empresarial, sindical y partidista", ha señalado la vicepresidenta segunda durante la inauguración de unas jornadas para conmemorar las tres décadas del nacimiento de la norma. El acto se ha celebrado en el Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (INSST), a cuyos profesionales ha querido manifestar expresamente su reconocimiento por su labor en la mejora de la salud de las personas trabajadoras.
El Ministerio de Trabajo y los agentes sociales se encuentran trabajado desde hace más de un año en la revisión de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, aprobada en 1995, para adaptarla a los nuevos desafíos del siglo XXI. "Estoy completamente convencida de que somos capaces de llegar a un acuerdo tripartito", ha reivindicado Díaz, instando a lograrlo "antes de que finalice noviembre".
En este punto, se ha referido de forma directa al presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, a quien le ha dicho, que "más allá de las diferencias" que tengan en muchas materias, "la salud y la vida de las personas trabajadoras no pueden ser una de ellas".
"Creo que saben ustedes, yo negocio hasta con el diablo. Se puede negociar cualquier cosa, pero creo que la prevención y la vida de la gente trabajadora, desde luego, está por encima de todo. Y quiero decirlo hoy, porque es verdad que estamos en la antesala de cerrar este acuerdo", ha insistido.
La cifra de muertes se reduce, pero "siguen siendo graves"
La ley de 1995 supuso, a juicio de Díaz, "un punto de inflexión" e incorporó "una nueva cultura de prevención y la responsabilidad de las empresas". Entre otros, la vicepresidenta segunda ha destacado la reducción de casi a la mitad el número de muertes en accidentes de trabajo: de las cerca de 1.500 en 1990 a las 677 registradas el año pasado.
Sin embargo, se trata de cifras que "siguen siendo muy graves", ha denunciado la ministra, y que "exigen actuar". Y es que "reducir la precariedad laboral, significa reducir accidentes de trabajo, ganar salud", ha reivindicado.
Además, se ha referido a asuntos concretos como la conexión digital, que "nos está enfermando" y está provocando "una pandemia que es silenciosa, de estrés y de ansiedad"; o el hecho de que España sea el país que más externaliza los servicios de prevención y ha apostado por una gestión integrada con recursos propios de las empresas con el objetivo de "ser más eficaces".
Regulaciones más estrictas y más inspecciones
Entre las principales novedades, la norma contará con regulaciones más estrictas sobre agentes cancerígenos, biológicos y químicos, actualizando los valores límite medioambientales. Además, se mejorarán los sistemas de información y el registro de accidentes de trabajo o el cuadro de enfermedades profesionales; y se prevé intensificar la acción de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social.
"Y, todo ello, tendrá asegurado una perspectiva de género, lo que va a permitir actuar sobre colectivos feminizados de forma más precisa y eficaz", ha puntualizado el Ministerio.
Asimismo, Díaz ha destacado la modernidad de la futura ley, que responde a los retos de la época con enfoques y herramientas del siglo XXI. "Ponemos la inteligencia artificial, los algoritmos al servicio de la salud y del progreso de la mayoría social", ha insistido.
La vicepresidenta segunda ha anunciado, además, que 2026 será declarado Año de la Seguridad y Salud en el Trabajo, una acción que en su opinión muestra el compromiso del Gobierno con "erradicar la enfermedad en los puestos de trabajo, implicando directamente la salud y a la sociedad en su conjunto".