Los seis acusados de violar en grupo a una joven en Rubí aceptan entre 2 y 10 años de prisión
- Dos de los procesados han aceptado 10 años; dos, 9 años y otros dos han asumido una pena de 2 años
- Además, tendrán que indemnizar con 30.000 euros a la víctima, que tiene una discapacidad psíquica del 35%
Seis hombres que afrontaban penas de hasta 60 años de cárcel por violar en grupo a una joven en una nave industrial de Rubí (Barcelona) en diciembre de 2022 han aceptado penas de entre dos y diez años de cárcel tras reconocer los hechos ante la Audiencia de Barcelona.
La sección sexta de la Audiencia de Barcelona ha condenado este jueves "in voce" a los seis procesados, después de alcanzar un acuerdo con las acusaciones y de indemnizar con 30.000 euros a la víctima, que tiene una discapacidad psíquica del 35%, frente a los 80.000 que solicitaba inicialmente la Fiscalía.
En concreto, dos de los procesados han aceptado sendas condenas de diez años de cárcel, dos se han conformado con nueve años y otros dos han asumido penas de dos años —que el tribunal les podría suspender y evitar su ingreso en prisión— por un delito de agresión sexual en grado de tentativa.
Clima de sometimiento
Los seis acusados, que tenían entre 19 y 26 años, han asumido así que la noche de 26 de diciembre de 2022 violaron por turnos a la joven, de 25 años y que sufría un trastorno de afectividad, tras llevarla a una nave industrial abandonada y alejada del núcleo urbano, en la que crearon un clima de sometimiento.
Según el escrito de acusación que han asumido íntegramente, los procesados lograron que la víctima acudiera a la nave, aprovechándose de la relación afectiva que desde hacía tiempo mantenía con uno de ellos, y la violaron en grupo mientras la joven lloraba y pedía que la dejaran en paz.
Inicialmente, la Fiscalía acusaba a los seis procesados de cuatro delitos de agresión sexual con penetración, a cuatro de ellos como supuestos autores materiales de las acusaciones y a otros dos en calidad de cooperadores necesarios, por permanecer en la nave observando cómo se perpetraba la violación, sin impedirlo.
Los cuatro principales acusados se encuentran en prisión preventiva mientras que los otros dos, en libertad provisional, podrían librarse de entrar en la cárcel si el tribunal accede a la petición de su defensa para que se les suspenda la condena por violación.
Además de las penas de cárcel, el tribunal ha impuesto a los procesados penas de hasta diez años de libertad vigilada y la prohibición de acercarse o comunicarse con la víctima, que a raíz de los hechos sufre un síndrome de estrés postraumático con ideas de muerte y autolisis.