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La UE propone implementar un arancel del 50% para las importaciones de acero debido al exceso de producción global

  • Según la Comisión Europea, el objetivo de esta medida es "salvar las plantas acereras y empleos europeos"
  • El mercado europeo se ve inundado de importaciones de acero subsidiado procedente de China y la India
La UE propone implementar un arancel del 50% para las importaciones de acero debido al exceso de producción global
El vicepresidente de la Comisión Europea responsable de Prosperidad y Estrategia Industrial, Stéphane Séjourné, en Estrasburgo (Francia), el 7 de octubre de 2025. CHRISTOPHE PETIT TESSON
RTVE.es / AGENCIAS

La Comisión Europea (CE) propondrá este martes reducir a la mitad las importaciones de acero libres de aranceles permitidas en la Unión Europea y aumentar el arancel que se aplica a partir de esa cuota hasta el 50%. El objetivo de estas medidas es luchar contra el exceso de capacidad de producción global en el sector, que se debe principalmente a la subsidiada industria china.

La medida ha sido adoptada este martes por el Colegio de Comisarios, pero tendrá que ser aprobada por la Eurocámara y los Estados miembros y sustituirá a partir del 30 de junio de 2026 a la actual salvaguarda comercial para el acero. De este modo endurece sus condiciones para hacer frente a la situación que afronta la industria europea por la competencia desleal de terceros.

La CE calcula que, gracias al arancel del 25% al acero extranjero, se ha reducido la entrada en un 15% desde el pasado mes de abril. A pesar de esto, el número es insuficiente para la industria. El vicepresidente del Ejecutivo comunitario para Industria, Stéphane Séjourné, ha adelantado en la red social X los puntos claves de la medida que presentará esta tarde oficialmente junto al comisario de Comercio, Maros Sefcovic. Según Séjourné, esta medida pretende "salvar las plantas acereras y empleos europeos".

Además, el Ejecutivo comunitario prevé obligar a que los importadores informen del país en el que se produjo la primera fundición y vertido del acero para mejorar la transparencia sobre el origen del metal. El objetivo es evitar que se eludan los aranceles o sanciones declarando una procedencia distinta, por ejemplo, tras realizar solo una pequeña transformación en otro país.

Sobreproducción global

Bruselas busca hacer frente al problema global de exceso de producción en el sector del acero. Debido a esta situación, la fabricación mundial supera en cinco veces la demanda de la UE y su mercado se ve inundado de importaciones abaratadas gracias a subsidios y otras políticas estatales, sobre todo procedentes de China y la India, pero también del sudeste asiático.

La UE lleva años buscando solucionar el problema en foros internacionales, especialmente con China, a la que considera "principal responsable" del exceso a nivel mundial y, lejos de paliar el problema, "está empeorando". De ahí que la Comisión no vea "otra opción" que limitar las importaciones para evitar una situación que podría ser "fatal" para la industria europea.

La situación ha hecho que en la última década la cuota europea en el mercado mundial del acero haya caído al 8% y la capacidad de producción instalada en el continente al 67%. A todo esto se suma la guerra arancelaria por la que Estados Unidos ha impuesto un arancel del 50% a todo el acero europeo. Este gravamen podría generar un desvío aún mayor de importaciones de terceros hacia la UE.

Competencia desleal

Los mayores proveedores de acero a la Unión Europea, y principales afectados por el endurecimiento del arancel, son Turquía, la India, Corea del Sur, Vietnam, China, Japón, Reino Unido y Ucrania.

Séjourné, en una comparecencia ante la comisión mixta para la UE del Congreso y el Senado en España la semana pasada, explicó que en Europa "no hay competitividad para el acero". Explicó que, a escala global, se compite en un mercado "totalmente libre" en el que China puede vender una tonelada de acero a un precio de entre 200 y 300 euros gracias a las subvenciones estatales. Europa, por su parte, lo vende a 500 o 600 euros.

Además, durante esa comparecencia, consideró que el acero es parte de la soberanía nacional y justificó medidas proteccionistas porque "sin acero" no funcionarían otras industrias como la del automóvil o defensa.

Negociaciones país por país

Después de reducir en un 47% la cuota de toneladas libres de aranceles, hasta los 18,3 millones, el Ejecutivo comunitario prevé negociar "tan pronto como sea posible" con los países interesados en el seno de la Organización Mundial del Comercio (OMC). La Comisión tendrá especialmente en cuenta a los países candidatos para la adhesión a la UE, como Ucrania (que además tiene necesidades urgentes de seguridad), pero solo prevé eximir de la salvaguarda a los miembros del Área Económica Europea (EFTA): Noruega, Islandia y Liechtenstein.

Por otro lado, la Comisión espera que la medida dé un aliciente a EE.UU. para negociar la situación del acero, después de que este quedase fuera del acuerdo comercial de julio que garantizó un arancel tope del 15% al grueso de productos europeos.

"Creemos que ofrecerá una base para entablar negociaciones con EE.UU. sobre la adopción de medidas conjuntas para abordar el exceso de capacidad, pero también para examinar la relación bilateral que tenemos sobre el acero y, con suerte, encontrar un mejor trato que el 50% actual", ha explicado un alto funcionario.

Patronal del acero

La patronal europea del acero, Eurofer, ha celebrado este martes la propuesta de la CE. "Las disposiciones desveladas por la Comisión responden a las necesidades del sector y representan un auténtico salvavidas para los productores de acero y empleados del sector en la Unión Europea", ha explicado la organización en un comunicado. Han instado a la Eurocámara y los Estados miembros a aprobar esta medida con "urgencia" para que pueda entrar en vigor a principios de 2026, antes de que expire la actual salvaguarda.

Eurofer ha destacado que esta medida nada tiene que ver con los gravámenes al acero de EE.UU. ya que la UE establece un sistema de cuotas "justas" de acero libre de aranceles, cumpliendo con las normas de la OMC.

La patronal también ha valorado positivamente que la medida sea revisada, en principio cada dos años, para comprobar que la cuota corresponde a la situación de mercado. Según el director general de la patronal, Axel Eggert, "el objetivo último de reducir las importaciones desleales que inundan el mercado de la UE es permitir que nuestras plantas de acero operen de nuevo en niveles de utilización viables, del 80-85%".

Actualmente, las fábricas europeas funcionan al 67% de capacidad, lo que provoca cierres y despidos. Eggert ha explicado que un tercio de la demanda de acero se cubre con "importaciones a precios por debajo de coste y con altas emisiones". Eurofer también espera que la medida renueve el diálogo "con la Administración Trump para eliminar las tarifas del 50% a las importaciones de acero de la UE y relanzar el trabajo para formar una alianza contra el exceso de capacidad global".