La delegación ucraniana en Estambul ofrece a Rusia una reunión entre Putin y Zelenski a finales de agosto
- Ambas partes han acordado un nuevo intercambio de prisioneros que incluye tanto a civiles como a militares
- Guerra Ucrania - Rusia, en directo
Rusia y Ucrania han finalizado la tercera ronda de conversaciones de paz en Estambul tras menos de una hora y sin un acuerdo, pese a la presión del presidente estadounidense, Donald Trump, contra Rusia para alcanzar la paz antes de 50 días. Ambas partes han acordado seguir manteniendo los contactos de cara a futuros encuentros.
El único pacto alcanzado ha sido otro intercambio de prisioneros, que esta vez incluirá tanto a civiles como militares, según la agencia de noticias TASS. Entre las propuestas, la liberación de civiles rusos capturados en Kursk a cambio de militares ucranianos. De hecho, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha confirmado tras la reunión cómo se ha completado la novena etapa del intercambio de prisioneros acordado en Estambul.
Por otro lado, la delegación ucraniana ha ofrecido a su contraparte la posibilidad de una reunión cara a cara entre los mandatarios de ambos países y en presencia de sus homólogos turco y estadounidense a finales de agosto. En junio, Putin ya adelantó que su disposición para reunirse solo sería para sellar un acuerdo de alto el fuego.
El líder de la delegación rusa, Vladimir Medinsky, también ha reiterado que una reunión potencial entre líderes es para "firmar documentos y no para negociar". En cambio, ha sugerido la creación de tres grupos de trabajo —político, militar y humanitario— para definir las principales cuestiones en disputa antes de alcanzar la paz.
Ausencia de acuerdos, pese a la disposición a reunirse
El ministro de Exteriores turco, Hakan Fidan, abrió la reunión instando a ambas partes a lograr avances a partir de los memorandos de demandas redactados en junio. El ministro de Exteriores ucraniano, Rustem Umerov, señaló antes del encuentro que su país estaba "listo ayer, hoy y mañana para una reunión de líderes".
Sin embargo, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, ya advirtió a comienzos de semana que no se esperaban "milagros", mientras calificaba las posiciones de ambas partes de "diametralmente opuestas". La delegación ucraniana ha señalado que las conversaciones entre ambas partes demuestran que Moscú necesita desarrollar un "enfoque constructivo".
Por su parte Medinsky ha defendido que su país ha cumplido con sus acuerdos humanitarios y ha pedido a Ucrania que evalúe la posibilidad de declarar varias treguas cortas como antesala para un acuerdo duradero.
Visiones enfrentadas para lograr un alto el fuego
En la última reunión, Rusia presentó un documento con dos alternativas para alcanzar una tregua: la retirada de las tropas ucranianas de las cuatro regiones que afirma haberse anexionado —Donetsk, Lugansk, Zaporiyia y Jersón— junto con el reconocimiento de la anexión de Crimea; así como la renuncia de Ucrania a ingresar en la OTAN.
La delegación ucraniana, por su parte, ha insistido en anteriores reuniones en un alto el fuego incondicional, la retirada de las tropas rusas de los territorios ucranianos capturados y, entre otras peticiones, la devolución de los niños secuestrados. En este último, de los 339 nombres entregados en su momento por Kiev, Rusia solo ha aceptado devolver 10.