Estados Unidos veta unilateralmente en el Consejo de Seguridad de la ONU una resolución humanitaria sobre Gaza
- El país norteamericano ya se ha opuesto en reiteradas ocasiones a resoluciones críticas con la ofensiva israelí
- El lenguaje del documento ha sido suavizado deliberadamente para facilitar el consenso
Estados Unidos ha vetado unilateralmente una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que exigía un alto el fuego "inmediato, incondicional y permanente" en Gaza. El país norteamericano ya se ha opuesto en reiteradas ocasiones a resoluciones críticas con Israel, pese a que en esta ocasión el lenguaje del documento había sido redactado para evitar confrontaciones directas.
"Estados Unidos ha sido claro: no apoyaremos ninguna medida que no condene a Hamás ni exija su desarme y abandone Gaza", ha declarado al Consejo la embajadora interina de Estados Unidos ante la ONU, Dorothy Shea, antes de llevarse a cabo la votación.
En la misma línea, el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, ha asegurado que se ha enviado "un mensaje contundente" al vetar en solitario una resolución "contraproducente". "No apoyaremos ninguna medida que no condene a Hamás (...) o ignore el derecho de Israel a defenderse", ha dicho en un comunicado. Rubio, además, ha criticado a los miembros del Consejo que han votado en contra al señalar que éstos "se niegan a reconocer" la realidad de un resolución que "socava los esfuerzos diplomáticos para alcanzar un alto el fuego".
"Agradezco al presidente Trump y al Gobierno estadounidense por apoyar a Israel y vetar esta resolución unilateral en el Consejo de Seguridad de la ONU", ha expresado por su parte el ministro de Exteriores israelí, Gideon Sa'ar, en un mensaje en X. "La resolución propuesta solo fortalece a Hamás y socava los esfuerzos estadounidenses por lograr un acuerdo sobre la toma de rehenes", ha señalado.
Hamás ha condenado enérgicamente el veto y lo ha calificado de "acto arrogante" y "desprecio por el derecho internacional". Según el grupo islamista, la postura estadounidense refleja una "parcialidad ciega" hacia Israel y brinda respaldo a lo que consideran una "guerra de exterminio" liderada por Netanyahu.
En un comunicado, Hamás también ha acusado a Washington de permitir la continuación de crímenes de lesa humanidad en Gaza y ha cuestionado la credibilidad de las instituciones internacionales. También ha instado a la comunidad global a presionar por un alto el fuego inmediato y a exigir responsabilidades a Israel.
La iniciativa ha sido impulsada por los diez miembros no permanentes del Consejo. Ello garantizaba el respaldo necesario para su aprobación si no había veto por parte de los cinco permanentes —Estados Unidos, Rusia, China, Francia y Reino Unido—.
Lenguaje suavizado para propiciar el consenso
El lenguaje del documento se suavizó deliberadamente, con apenas una mención a Israel en el preámbulo y sin críticas explícitas, en un intento de facilitar un consenso. De hecho, el texto llevaba dos semanas negociándose entre los quince miembros del Consejo hasta alcanzar "un razonable consenso", como aseguró el representante de Eslovenia, Samuel Zbogar.
La resolución contenía solo tres demandas principales: un alto el fuego inmediato e incondicional; la liberación de los rehenes israelíes en manos de Hamás; y la eliminación de todas las restricciones a la entrada de ayuda humanitaria, así como la restauración de los servicios esenciales en la Franja.
No obstante, el preámbulo incluía un llamado a la retirada total de las fuerzas israelíes de Gaza, un punto que ha resultado inaceptable para Washington. Como contrapeso, el texto también expresaba un apoyo explícito a los esfuerzos diplomáticos liderados por Catar, Egipto y Estados Unidos para retomar las negociaciones de paz.
La devastadora situación humanitaria en Gaza, con bloqueos, matanzas y servicios colapsados, ha provocado un giro en la actitud de aliados tradicionales de Israel como Francia, Alemania y el Reino Unido, aunque Estados Unidos sigue siendo el mayor sostén diplomático del Gobierno del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, en el Consejo.
De hecho, esta es la sexta ocasión que Washington se opone a un texto de esta clase. Si EE.UU. se hubiera abstenido, habría sido la primera resolución de este tipo adoptada por el Consejo desde el recrudecimiento del conflicto en Gaza.
Israel muestra su rechazo a cualquier alto el fuego
Israel se ha opuesto unilateralmente a cualquier alto el fuego sin condiciones, argumentando que Hamás no puede permanecer en Gaza. Desde que en marzo finalizara una tregua de dos meses, las fuerzas israelíes han intensificado su ofensiva en el enclave, donde el conflicto sigue provocando un desastre humanitario.
Según el Ministerio de Salud de Gaza, los bombardeos israelíes han matado a 45 personas solo este miércoles. La cifra total de muertos palestinos supera los 54.000 desde octubre de 2023, según fuentes locales.
Mientras tanto, la ayuda sigue siendo escasa. Tras el levantamiento parcial del bloqueo israelí el 19 de mayo, apenas han ingresado suministros. El nuevo sistema de distribución —encabezado por la fundación estadounidense Gaza Humanitarian Foundation— opera desde solo tres puntos bajo un esquema criticado por la ONU.
Hospitales gazatíes también han denunciado que más de 80 personas han muerto y cientos han resultado heridas cerca de estos puntos de reparto en los últimos días, muchas de ellas por disparos.
Brasil exige investigar los ataques a centros de ayuda humanitaria
El Gobierno de Brasil ha pedido una "investigación independiente y célere" sobre los recientes ataques del Ejército israelí a centros de distribución de ayuda humanitaria en Palestina. En un comunicado, la cancillería ha calificado de "absolutamente inaceptable" el uso del hambre como arma de guerra y el ataque a personas que buscan alimentos.
El Ejecutivo de Luiz Inácio Lula da Silva ha reiterado su condena a estos bombardeos, que han causado "cientos de civiles muertos y heridos". Ha exigido el cese inmediato de las operaciones militares israelíes y la protección de la población civil palestina, incluyendo niños, mujeres y ancianos. Además, ha reclamado la retirada total de las fuerzas israelíes de los territorios ocupados, el levantamiento de las restricciones a la ayuda humanitaria y la liberación de todos los rehenes.
Lula, cada vez más crítico con Israel, ya denunció el domingo que la ofensiva contra Gaza constituye "un genocidio" y acusó al Gobierno de Netanyahu de actuar por venganza.
