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Economía

La inflación también impacta en la crianza: "Es muy difícil tener otro hijo"

  • Las familias afrontan un gasto medio de 672 euros por hijo al mes, 85 euros más que en 2018, según Save The Children
  • Los expertos piden más becas escolares y de comedor para evitar que más niños entren en riesgo de pobreza

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Criar un hijo, cada vez más caro por el impacto de la inflación
El gasto medio aumenta a medida que los hijos crecen, impulsado por las compras de comida, ocio y aparatos electrónicos.

Sara y Sergio han dejado de permitirse “lujos” como salir a cenar fuera de casa para poder pagar la guardería de su hijo. No tienen facturas pendientes, pero llevan seis meses sin poder ahorrar nada, algo que antes sí podían hacer.

Una de las tareas de las familias con hijos es organizar el gasto en comida, ropa y ocio para poder ahorrar. Sin embargo, con la subida de precios, esto se ha vuelto más difícil y muchos hogares tienen que apretarse más el cinturón para poder asumir gastos necesarios para el desarrollo de sus hijos y que se han visto afectados por el impacto de la inflación, disparada en agosto al 10,5%, según ha confirmado este martes el INE.

Criar a un hijo o una hija es hoy más caro que hace unos años. Concretamente, cuesta 672 euros de media al mes, 85 más que en 2018, según el informe El coste de la crianza 2022 de Save The Children. Esto se traduce en 8.064 euros anuales, un 14,5% más que los 7.044 de hace cuatro años.

Más dificultades añade a la rutina de familias numerosas como la de Isabel y Félix, que tienen siete hijos. "Lo he notado, sobre todo, en comprar comida", nos cuenta ella, y aunque tienen el bono social térmico, controlan las horas para poner lavadoras. Ahora se añaden los gastos de una ‘vuelta al cole’ más cara que otros años.

Según el INE, en 2021 el 21,7% de población estaba en riesgo de pobreza, una cifra que subía al 28,7% en el caso de menores de 16 años. Los expertos advierten que es probable que la crisis de la inflación empeore esta situación y piden más ayudas públicas para evitar que aumente la pobreza infantil.

Comida, conciliación, excursiones... ¿Cuáles son los principales gastos?

Según el estudio de Save The Children, la mayor parte del gasto mensual de las familias se destina a la comida, un 17,4% del total, seguido muy de cerca por la conciliación, con otro 17,3%. Este último término se refiere al desembolso que tienen que hacer padres y madres para compaginar la crianza con sus trabajos y que, en el caso de familias monoparentales, puede ser más difícil de asumir. Se centra en la escuela infantil y guardería en los primeros cuatro años de edad, y más adelante en actividades extraescolares y canguros.

En el caso de Sara y Sergio, ambos trabajan y pagan 200 euros al mes por la guardería de su hijo porque les han concedido una beca de educación infantil. No obstante, en agosto se han esforzado más en ahorrar porque en septiembre tienen que pagar otros 150 euros por el uniforme.

A la lista se añaden las excursiones, cumpleaños e imprevistos (14,1%), y las compras de ropa y calzado (7,9%). También son importantes los gastos de la vivienda, que abarcan un 12,5% del total y consisten en reformas y ampliar habitaciones para adecuar la casa a una vida con hijos.

De esta forma, llenar la nevera, pagar la guardería y adecuar el piso suman prácticamente la mitad del gasto total, según los datos de la organización. Además, este desembolso varía en función de la comunidad autónoma y mientras que la media en Andalucía es de 641 euros, en Cataluña sube a 819 euros, un 27,8% más.

Más gastos a medida que los hijos crecen

Las necesidades de los niños y niñas van cambiando con su desarrollo, y el gasto aumenta a medida que crecen. Criar a un hijo de hasta 3 años cuesta de media 556 euros al mes, mientras que la cifra sube a 736 euros si tiene entre 13 y 17 años, según Save The Children.

En los primeros tres años de vida, la conciliación concentra el 32% del total y las necesidades se basan en comida, ropa y calzado, cuna y reformas en la casa. Entre los 4 y los 6 años la conciliación sigue teniendo un lugar importante y se compran más juguetes y ropa, pero también libros, estuches y mochilas, algo que se mantiene en etapas posteriores. Cuando tienen de 7 a 12 años, crece considerablemente el gasto en comida, cumpleaños, excursiones y vacaciones.

La situación cambia en la adolescencia, de 13 a 17 años, cuando se compran más móviles y videoconsolas y aparece la paga semanal. Además, esta etapa es el preámbulo de otro gasto importante para las familias: la universidad.

Las facturas del hogar, lo que más ha subido

Hay ámbitos que han subido de forma más pronunciada en los últimos cuatro años, primero por la pandemia y después por la guerra de Ucrania. Siguiendo los datos del informe, lo que más se ha encarecido, han sido los gastos corrientes del hogar, un 53%, que se refieren al gas y electricidad, agua, basuras y comunidad, y que suponen un lastre importante para muchas familias que tienen facturas atrasadas.

Detrás están los muebles, cunas, carritos y sábanas, que han subido un 30%, y el ocio y los juguetes, que se han incrementado un 25%. No obstante, revela que hay ámbitos que se han mantenido prácticamente en el mismo nivel, como la sanidad, el transporte, la conciliación y la higiene, que incluye pañales, toallitas húmedas y cremas en las primeras etapas, y compresas y tampones en la adolescencia.

'Vuelta al cole': la demanda de material de segunda mano se dispara un 67%

Tras las vacaciones de verano llega la ‘vuelta al cole’, que este año está siendo la más cara de los últimos años. Por ello, las familias buscan cómo ahorrar para pagar el comedor, el material escolar y los libros de texto, que han subido un 12% con respecto al curso pasado y suponen de media un coste de 200 euros por niño.

Este es precisamente un gasto importante para Isabel y Félix, que tienen siete hijos. Aunque reutilizará cuadernos, ha tenido que comprar libros nuevos y asegura que han sido algo más caros. Hará que los pequeños hereden los uniformes de los mayores, pero es probable que tenga que comprar ropa nueva y, según nos explica, “un par de zapatos colegiales cuesta hasta 10 euros más”.

De media, la 'vuelta al cole' costará a las familias 400 euros por niño y, para afrontarlo, más de la mitad de padres y madres reducirá sus gastos personales, según un informe reciente de Appinio. En este escenario, muchos buscan un oasis en el mercado de segunda mano, donde la demanda de libros de texto seminuevos ha crecido un 67%, según un estudio de Milanuncios.

En todo este curso, las familias gastarán de media 2.186 euros por hijo, una cifra más alta que en años anteriores, según la encuesta anual de la OCU sobre los costes del inicio de año escolar. Aquí se incluyen la matrícula, material, rutas de transporte, uniformes y actividades extraescolares, entre otros. La organización apunta que no será un gasto homogéneo: mientras que en Castilla-La Mancha llega a 1.195 euros, en Cataluña sube hasta 2.787, más del doble.

Las familias ya no pueden ahorrar

Aunque es necesario poner foco al daño económico que ha supuesto la inflación para las familias más vulnerables, tampoco hay que olvidar cómo ha afectado a hogares que antes no tenían dificultades y que ahora, con la subida de precios, ven imposible poder ahorrar.

“Desde hace seis meses no ahorramos absolutamente nada”

Desde hace seis meses no ahorramos absolutamente nada”, señalan Sara y Sergio, que antes de tener a su hijo podían guardar algo de dinero a final de mes, pero ahora centran sus esfuerzos en recortar algunos de sus gastos propios para pagar el carrito y la guardería.

Esto puede suponer un problema de mayor calado y lastrar aún más la natalidad, que está en mínimos históricos. Sin poder ahorrar y con el encarecimiento de la vida, Sara y Sergio consideran inviable tener otro hijo, aunque les gustaría poder hacerlo: “Es muy difícil tener otro hijo porque no nos podríamos gastar otros 200 euros de guardería al mes más los pañales, toallitas, comida…”.

Evitar que aumente la pobreza infantil

Según la Encuesta de Condiciones de Vida del INE de 2021, la más reciente, el 28,7% de los menores de 16 años se encuentra en riesgo de pobreza en España. En el documento se refleja el impacto de la pandemia, pero “es probable que esta crisis de inflación tenga un impacto en el incremento de la pobreza”, nos explica Gabriel González-Bueno, especialista en políticas de infancia de UNICEF España.

En 2021 ya creció el número de hogares que no podían mantener su casa a la temperatura adecuada, ni tampoco comer carne o pescado cada dos días. El experto teme que esto se acentúe y señala que podría afectar más a las familias monoparentales.

Por ello, pide que se mejore el acceso al Ingreso Mínimo Vital (IMV) para reducir la pobreza infantil porque “estamos viendo que muchas familias se quedan fuera por sus condiciones o procesos burocráticos”. En el ámbito de la infancia, desde la organización piden más becas y garantizar la gratuidad de libros de texto, comedor y transporte escolar, especialmente para hogares con menores ingresos.

Como reflexión, recuerda que muchos de estos niños han vivido la crisis de 2008, la del coronavirus y, ahora, la de la inflación, lo que puede afectar a su bienestar psicológico: “Tenemos que conseguir que afecte lo menos posible a su desarrollo como adultos. De ello depende la sociedad que somos, pero también la que vamos a ser”.