Enlaces accesibilidad
Reino Unido

Rishi Sunak, el multimillonario de origen indio que podría hacer historia en Reino Unido si llega a Downing Street

  • Fue uno de los primeros ministros en dejar el cargo antes de la dimisión de Boris Johnson
  • Durante la pandemia ganó popularidad gracias a las generosas ayudas económicas que aprobó para el país
  • Richi Sunak, primer lider 'tory' de origen indio

Por
Rishi Sunak en un acto público de la campaña de las primarias del Partido Conservador
Rishi Sunak en un acto público de la campaña de las primarias del Partido Conservador

Rishi Sunak, el exministro de Finanzas británico que dimitió a principios de julio por desacuerdos con la gestión de Boris Johnson, es ahora uno de los dos candidatos para suceder al primer ministro y liderar el Partido Conservador.

Como titular de Finanzas, Sunak ganó popularidad gracias a las ayudas económicas que puso en marcha durante la pandemia de la COVID-19. Sin embargo, su imagen se ha visto manchada por algunos escándalos, entre ellos la multa que recibió por asistir a una de las fiestas celebradas en Downing Street durante el confinamiento.

“Rishi Sunak fue ministro de Finanzas durante un par de años y eso significa que comprende muy bien la posición económica en la que se encuentra Reino Unido”, asegura a RTVE.es el profesor de Política en la Queen Mary University of London, Tim Bale, quien señala que después de ser multado “probablemente hubiera sido mejor para él haber renunciado antes por cuestiones de principio”. “Al final solo dejó el barco cuando se hundía”, añade.

Si gana la carrera por el número 10 de Downing Street, este millonario de origen indio podría hacer historia, al convertirse en la primera persona de color y el primer hindú practicante en ocupar el cargo, en una ruptura histórica de Reino Unido con el pasado.

Un millonario de origen indio

Nieto de inmigrantes originarios de la región india de Punjab, Rishi Sunak nació en la ciudad del sur de Inglaterra de Southampton. Sus padres, un médico general y una farmacéutica, llegaron a Reino Unido desde África Oriental, donde emigraron sus abuelos en la década de 1960.

El mayor de tres hermanos, Sunak muestra su historia familiar como un ejemplo de superación que tanto gusta a los conservadores, aunque rápidamente se vinculó con la élite cuando estudió en Winchster College, un elitista internado privado para chicos.

Después de licenciarse en Filosofía, Política y Economía -una carrera elegida comúnmente por la clase política de Reino Unido- por la Universidad de Oxford, Sunak completó sus estudios con un máster en Administración de Empresas en la Universidad estadounidense de Stanford gracias a una beca Fulbright.

Durante su época universitaria conoció a su esposa, Akshata Murty, hija de un multimillonario indio y cofundador de la multinacional Infosys. Antes de entrar en política, Sunak trabajó en el sector de las finanzas, en particular en Goldman Sachs y fundó su propio fondo de inversión.

El matrimonio tiene una fortuna conjunta de 730 millones de libras (alrededor de 846 millones de euros), lo que le convierte en las personas número 222 dentro de la lista de los más ricos de Reino Unido, según el diario ‘The Sunday Times’.

Para la profesora de Ciencias Políticas de la London School of Economics, Anne Phillips, la riqueza de Sunak y su mujer podría considerarse como uno de sus puntos negativos para llegar a Downing Street. “Una desventaja es que es extraordinariamente rico, más allá de lo que la gente podría imaginar”, señala Phillips. “Le resulta muy complicado contar una historia convencional sobre sí mismo que le haga parecer lo suficientemente común como para que los votantes puedan pensar que les representa”, añade.

Por su parte, Bale cree que la mayoría de los británicos cree que “Sunak realmente no vive en el mundo real”, aunque destaca que muchos opinan que “si alguien tiene dinero, probablemente sepa cómo administrarlo”. “Por lo tanto, pude ser una ventaja a la hora de dirigir un país”, asevera.

Fiel defensor del 'Brexit' y aplaudido durante la pandemia

La desenfrenada carrera política de Sunak comenzó en 2015 cuando fue elegido diputado por el Partido Conservador por Yorkshire, en el norte de Inglaterra. El entonces parlamentario se convirtió en uno de los primeros partidarios del divorcio de Reino Unido de la Unión Europea.

“Durante el referéndum, Sunak estaba dispuesto a salir de la Unión Europea, pero desde entonces creo que su problema es que ha sido más pragmático sobre el ‘Brexit’ de lo que les gustaría a algunos conservadores”, opina Bale. “Creo que se ha sentido muy incómodo con la forma en la que Reino Unido ha interpretado la situación de Irlanda del Norte y le preocupa desencadenar algún tipo de guerra comercial con la UE porque eso, claramente, no sería bueno para la economía del país. Esto creo que en cierta medida le ha perjudicado con algunos miembros del Partido Conservador”, añade.

Su primer puesto en el Gobierno británico fue bajo la entonces primera ministra Theresa May como subsecretario de Estado Parlamentario en el Departamento de Vivienda, Comunidades y Gobierno. Después de la renuncia de May, apoyó la candidatura de Boris Johnson a primer ministro y bajo su mandato fue nombrado secretario jefe del Tesoro. En febrero de 2020 fue nombrado titular de Finanzas y apenas unas semanas después de asumir el cargo, la pandemia de la COVID-19 golpeó en Reino Unido. Como ministro durante la pandemia ganó popularidad debido a las generosas ayudas económicas que ideó y aprobó para el país, que impidieron el cierre de numerosas empresas y la pérdida de empleo.

Dimiten los ministros de Finanzas y Sanidad del Reino Unido

Los expertos coinciden en que los británicos consideran que Sunak fue un ministro “competente” y que su trabajo en la cartera de Finanzas durante la pandemia “estuvo bastante bien”. “Parece ser bastante inteligente y la mayoría de los economistas opina que comprende mejor lo que se debe hacer para abordar la crisis económica actual que Liz Truss”, indica el profesor de Políticas de la Universidad de Sussex, Paul Webb, refiriéndose a la otra candidata para liderar el Partido Conservador.

Su etapa como ministro de Finanzas culminó con su dimisión por desacuerdos con la gestión de Boris Johnson y por sus prioridades económicas. Fue el segundo ministro en abandonar su cargo en el Ejecutivo de Johnson -después de que lo hiciera el titular de Sanidad, Sajid Javid-, precipitando una crisis que llevó al primer ministro a renunciar hasta que se eligiera a su sucesor.

“Era obvio que Boris Johnson había perdido popularidad entre el electorado y que estaba implicado en escándalo tras escándalo. Seguir apoyando su cargo como primer ministro era darle al partido pocas o ninguna oportunidad en las próximas elecciones”, señala Webb. “Es posible que las cosas no mejoren mucho después del cambio de líder, pero al menos pueden argumentar que Reino Unido está bajo una nueva administración”, recalca.

Escándalos que manchan su imagen

A pesar de que la popularidad de Sunak mejoró debido a su labor durante la pandemia, su imagen se ha visto manchada por una serie de escándalos. Uno de ellos afecta directamente a su mujer, después de que se filtrara que no tenía domicilio fiscal en suelo británico, lo que significa que no pagaba impuestos en Reino Unido sobre los beneficios obtenidos en el extranjero.

En abril de 2020 también se filtró que el propio Sunak contaba con un permiso de residencia permanente en Estados Unidos mientras era ministro de Finanzas. Su esposa cambió su estado fiscal y el político ya había rechazado su permiso de residencia en el momento en el que se filtraron las informaciones, pero dañaron en gran medida a su popularidad.

“Realmente creo que el escándalo relacionado con el estado fiscal de su esposa le ha afectado de cara a los votantes, así como a los miembros del Partido Conservador. Del mismo modo el hecho de que tuviera el permiso de residencia que le permitía vivir y trabajar en Estados Unidos”, indica el profesor de la Queen Mary University of London.

“El hecho de que tuviera el permiso de residencia que le permitía trabajar en Estados Unidos hizo que la gente sintiera que Sunak formaba parte de una especia de élite cosmopolita que puede ir a vivir y trabajar en cualquier lugar. Es algo muy comprometido realmente en la política de Reino Unido”, subraya Phillips.

También manchó su imagen el ‘partygate’, el escándalo por las fiestas del Gobierno de Boris Johnson durante el confinamiento. Sunak fue multado junto al primer ministro por participar en una de las fiestas que violaron las normas anticovid. Aunque su popularidad se vio afectada, no fue de forma tan severa como la de Johnson.

“Creo que hay un grado de simpatía con Sunak en el sentido de que fue multado por aparecer en una fiesta de cumpleaños de Bois Johnson simplemente porque llegó antes a lo que pensaba que era una reunión normal”, opina Bale. “La gente no le ve de la misma forma que a Johnson, pero no renunció cuando recibió la multa”, asevera.