Enlaces accesibilidad

Los Veintiocho han aprobado de forma definitiva el presupuesto de la UE para 2014-2020

  • Las políticas de cohesión se llevan el 34%, seguidas por la agricultura, 29%
  • Se destinan 125.614 millones a competitividad, crecimiento y empleo

Por
Sede del Consejo de la UE en el edificio Justus Lipsius en Bruselas
Sede del Consejo de la UE en el edificio Justus Lipsius en Bruselas.

Presupuestos UE 2014-2020

Techo de compromiso: 959.988 (3% menos)

Techo de gasto: 908.400

Política agrícola: 373.179

Fondos de Cohesión: 325.149

Competitividad, crecimiento y empleo: 125.614

Horizonte 2020 (I+D): 69.000

Administración: 61.629

Europa Global: 58.704

Conectando Europa (transporte, energía, redes): 29.299

Seguridad: 15.686

Empleo joven: 6.000

En millones de eurosEn millones de euros

El Consejo de la Unión Europea (UE), la institución que representa a los Estados miembros, ha dado luz verde definitiva al presupuesto plurianual comunitario de 2014 a 2020, el último paso necesario para su entrada en vigor en enero.

"La decisión de hoy marca el final de dos años y medio de negociaciones y permite que la nueva generación de programas de inversiones de la Unión Europea puedan ser puestos en marcha a partir del 1 de enero de 2014", señalan los Veintiocho en un comunicado.

El presupuesto comunitario para los próximos siete años fija en 959.988 millones de euros los compromisos -el importe máximo de pagos futuros a los que se puede comprometer la UE- y en 908.400 millones los pagos, lo que supone un 3,5% y un 3,7% menos en comparación con el marco plurianual de 2007 a 2013.

Esto "asegura la disciplina presupuestaria en la Unión Europea, reflejando la particular presión presupuestaria a la que los Estados miembros se están enfrentando actualmente en el ámbito nacional", asegura el Consejo.

Los países destacan que el presupuesto 2014-2020 pone el acento en invertir para "fomentar el crecimiento y crear empleo", para lo que se ha aumentado en más de un 37% la dotación asignada al capítulo dedicado a la "competitividad", respecto a 2007-2013.

En el presupuesto plurianual las mayores partidas corresponden a las políticas de cohesión económica, social y territorial (34%), agricultura (29%), competitividad para el crecimiento y el empleo (13%) y desarrollo rural (9%).

La partida dedicada a competitividad para el crecimiento y el empleo ha aumentado desde los 91.495 millones de euros (9,2% del presupuesto anterior entre 2007-2013) hasta los 125.614 millones.

También se destinarán 70.000 millones de euros del Fondo Social Europeo para la creación de empleo (10.000 millones al año) y 6.000 millones de euros para la lucha contra el paro juvenil en los próximos dos años en las regiones donde el desempleo supera el 25%, de los que España recibirá unos 1.900 millones.

La política agrícola y medioambiental de la UE contará con 373.179 millones de euros, mientras que al apartado de cohesión se dedicarán 325.149 millones de euros.

Negociaciones para la inversión

El Parlamento Europeo y el Consejo continúan ahora las negociaciones para cerrar los cerca de 70 programas de inversión europeos para este periodo, que se encuentran "concluidos o en proceso de ser finalizados" y se adoptarán formalmente antes de finales de año, según el Consejo.

Las negociaciones sobre los recursos propios de la UE también están en curso, un punto en el que el Parlamento Europeo logró la creación de un grupo de alto nivel para reformar el sistema de ingresos comunitario.

El principal acto legislativo sobre los ingresos europeos tendrá que ser aprobado por los estados miembros -pasando por sus parlamentos nacionales, en la mayoría de los casos- una vez que reciba el visto bueno unánime del Consejo y de que la Eurocámara publique su opinión al respecto. "Dado que este proceso lleva algo de tiempo, se espera que la decisión entre en vigor de manera retrospectiva, como en los anteriores periodos presupuestarios plurianuales", indica el Consejo.

Además, durante las negociaciones parlamentarias los eurodiputados lograron incluir una cláusula de revisión que obligará a la CE a presentar en 2016 propuestas para reformar el presupuesto a largo plazo en función de las circunstancias económicas.

También se acordó una mayor flexibilidad para mover los fondos inutilizados de un año a otro y, en el caso de los compromisos, entre distintas partidas de gasto, y se abrió la puerta a acortar el marco presupuestario a cinco años, coincidiendo con el ciclo político de las instituciones europeas.

Si se mantiene el calendario previsto, la CE deberá presentar su nueva propuesta para el próximo marco presupuestario plurianual antes del 1 de enero de 2018, con el objetivo de que entre en vigor en 2021.