Enlaces accesibilidad

Queserías Menorquinas suspende pagos tras recibir un millón del Gobierno balear

  • Ya son cinco las empresas de Nueva Rumasa en concurso de acreedores
  • Las siguientes podrían ser las bodegas del grupo Garvey

Por

Las empresas de Nueva Rumasa

Alimentación: Postres Dhul, lácteos Clesa, batidos Cacaolat, helados Royne, conservas y salsas Apis, chocolates Trapa, chocolates Elgorriaga, helados Neiss, lácteos Letona, huevos Hibramer, Batidos Ryalcao, zumos y horchatas La Levantina, lácteos Sali, huevos Matines y caramelos Aldusa.

Bodegas y bebidas: jerez Garvey, rioja Marqués del Campo Nuble, rioja Campo Burgo, toro Marqués de Olivara, rioja Conde de Romanones, brandy de jerez Conde de Garvey, jerez Zoilo Ruiz Mateos, distribuidora Los Conejos y penedés Cavas Hill.

Patrimonial: Inmobiliarias Reunidas.

Distribuidoras: Distribución Retail, Distribución Reta.

Comunicación: Radio Libertad.

Deporte: Rayo Vallecano

Nueva Rumasa ha solicitado el concurso voluntario de acreedores para Queserías Menorquinas después de que el Gobierno balear decidiera concederle un millón de euros para garantizar la continuidad de la actividad productiva y mantener los puestos de trabajo.

Con esta solicitud en los juzgados de Baleares, ya son cinco las empresas de la familia Ruiz-Mateos que suspenden pagos, junto con Dhul, Carcesa (Apis y Fruco), Cacaolat y Clesa.

De otro lado, el concurso para las bodegas gaditanas Garvey, Valdivia, Zoilo Ruiz-Mateos y Teresa Rivero se va a presentar de forma inminente, posiblemente esta semana.

Según fuentes del sector, previsiblemente también irán a concurso otras empresas del holding fundado por José María Ruiz-Mateos como Hibramer.

Deudas hipotecarias y bancarias

Las principales firmas alimentarias y bodegueras de Nueva Rumasa, entre las que figuran Dhul, Clesa, Elgorriaga, Trapa, Queserías Menorquinas (Tranchettes) y Carcesa (Fruco y Apis), suman deudas hipotecarias cercanas a los 150 millones de euros.

La deuda bancaria del conjunto de empresas de Nueva Rumasa supera los 700 millones de euros, lo que, unido a los pagos pendientes a proveedores, eleva el pasivo a alrededor de 1.000 millones de euros.

Los principales acreedores son Banco Santander y Banesto, que, según datos de la compañía, suman 330 millones en créditos. Ruiz-Mateos en una serie de cartas al presidente del Santander, Emilio Botín, admitió que su situación financiera era mucho peor que lo que llegó a trascender a los inversores.

Protestas de Clesa

Alrededor de 80 trabajadores de Clesa en Madrid se han concentrado ante la sede de la Dirección General de Trabajo, donde el Gobierno celebra una reunión con la dirección de Nueva Rumasa y con los sindicatos UGT y CCOO para abordar la situación que atraviesa el grupo y analizar medidas que puedan atenuar las consecuencias sobre el empleo.

La plantilla de Clesa en Madrid, a la que la empresa adeuda cuatro pagas, con lo que el Fogasa cubriría las nóminas impagadas, asume que posiblemente la planta de Herrera Oria tenga que cerrar, pero con esta movilización muestra su apoyo a los representantes sindicales que buscan soluciones para el mantenimiento de la actividad en las empresas viables, según explica el portavoz de CC. OO. en el comité de empresa de Clesa, Luis Muñoz.