Telefónica eleva un 10% más su oferta por Vivo

• Ofrece a Portugal Telecom 7.150 millones por su participación en la brasileña
• La empresa lusa celebra este jueves junta de accionistas extraordinaria

Telefónica ha elevado en 650 millones (un 10% más, hasta 7.150  millones de euros, la oferta a Portugal Telecom (PT) por su  participación en el operador brasileño Vivo, según ha informado el grupo  español a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) horas  antes de que este jueves por la mañana los accionistas de la empresa  lusa decidan sobre esta operación.

En concreto, la oferta "final y  definitiva" de Teléfonica es por el 50% que su socia PT tiene en  Brasicel, una sociedad con la ambas controlan el 60% de la operadora  móvil de Brasil.

Con esta última comunicación, el gigante español  ha elevado en 1.450 millones el precio por el que pretende comprar esa  participación, que en mayo fijó en 5.700 millones.

Dos meses de 'subasta'

Esta oferta  fue rechazada por el consejo de PT. El 1 de junio, Telefónica presentó  una nueva propuesta (6.500 millones de euros) y proponía además que, si  se aceptaba la oferta, vendería el 10% que posee en PT.

Entonces,  el consejo de la operadora portuguesa acordó convocar junta de  accionistas para este 30 de junio, en la que se sometería la venta del  50% de Brasicel a Telefónica "en los términos y precios contenidos en la  oferta o un precio superior".

En las últimas semanas, hubo una  gran tensión con el pronunciamiento en contra de la venta del presidente  de PT, Zeinal Baba, así como algunos de los principales accionistas,  mientras que importantes analistas han destacado las ventajas de la  operación para los accionistas y las dificultades de conseguir un precio  similar si se pierde esta oportunidad.

En estos días, Telefónica  propuso someter a la junta la posibilidad de repartir un dividendo  extraordinario si se aprobaba la operación, lo que fue rechazado por el  consejo del antiguo monopolio luso.

Además, Telefónica se deshizo, el pasado miércoles, de  un 8% de PT, con lo que pasó a tener sólo el 2%, con el aparente  objetivo de impedir que el grueso de sus títulos fueran excluidos de la  votación en la junta por conflicto de intereses.

Papel clave de los inversores extranjeros

No obstante, el  regulador bursátil portugués desmontó esta estrategia al considerar que  no se ha producido una venta efectiva de las acciones, ahora en poder  del banco suizo UBS y la gestora estadounidense TPG-Axon Capital. Así  pues, ese 8% puede quedar excluido de la votación.

Aunque PT no  ha revelado los accionistas confirmados para la reunión, convocada a  primera hora de este jueves, extraoficialmente se supo que se espera un  récord de afluencia (se calcula que será cercana al 80% del capital).

A  la venta de Vivo a Teléfonica se opone el llamado núcleo duro de  accionistas portugueses de la compañía, que controlan una cuarta parte  de sus títulos y encabezan el grupo financiero Espirito Santo (7,99%),  el banco estatal Caixa Geral (7,3%) y Ongoing (6,74%).

Entre los  accionistas extranjeros, que pueden inclinar la balanza a uno u otro  lado, destacan, además de los compradores de los títulos de Telefónica,  el fondo norteamericano Brandes Investment Partners (7,89%) y el grupo  británico Barclays (2%).

La última oferta mantiene las dos  posibilidades presentadas el pasado día 1 de que la venta se realice de  una vez o en tres plazos. El interés de Telefónica ha hecho que los  títulos de PT suban desde los 6,48 euros por acción que cotizaban en  mayo hasta los 8,26, aunque han llegado a cotizar a 9,12 tras la segunda  oferta.

El objetivo de Telefónica, en plena expansión internacional, es integrar Vivo con Telesp, la  empresa de telefonía fija que controla en Brasil. Al anunciar su primera oferta, la compañía presidida por César Alierta dijo que así generaría una sinergia  de 2.800 millones de euros.