Obama ofrece más de 800 millones al corazón de la industria automovilística para coches eléctricos

• El 50% de las ayudas al sector irán destinados a los grandes de Detroit y al estado de Michigan
• Busca acelerar el desarrollo y la producción de baterías eléctricas
• El objetivo es recortar la dependencia del petróleo y reestructurar toda la industria

Obama presenta las ayudas a los coches eléctricos en Wakarusa (Indiana).

Barack Obama concederá al menos 1.200 millones de dólares (830 millones de euros) en subvenciones al estado de Michigan y a los tres grandes de Detroit (General Motors, Ford y Chrysler) para acelerar el desarrollo y producción de baterías que se instalarán en vehículos eléctricos.

En concreto, empresas e instituciones del estado de Michigan- donde se encuentra Detroit- percibirán casi 1.000 millones de dólares para la producción de baterías.

Además, GM recibirá subvenciones por valor de 240 millones de dólares, de los que 106 millones se destinarán a la planta de montaje de baterías que tiene previsto construir en la localidad de Brownstown Township.

Por su parte, Ford obtendrá 100 millones de dólares y Chrysler unos 70 millones para "desarrollar, validar y poner en funcionamiento 220 monovolúmenes y 'pickup' híbridos". 

Reducir el consumo de petróleo

Así lo ha anunciado en la factoría que el fabricante de camiones Navistar tiene en la localidad de Elkhart (Indiana), donde ha detallado su plan para reducir el consumo de petróleo fomentando la construcción de coches eléctricos, que tendrán una cuantía total de 2.400 millones (1.678 millones de euros) y se repartirá en 48 proyectos.

"Si queremos reducir nuestra dependencia del petróleo, proporcionar trabajos a los estadounidenses y reafirmar nuestro sector manufacturero como uno de los mejores del mundo debemos producir los vehículos avanzados y eficientes del futuro", ha defendido.

Tres partidas

La Casa Blanca espera que las subvenciones,  junto a otros 2.400 millones de dólares que las empresas invertirán por su cuenta, permitan la creación de miles de puestos de trabajos.

Más de la mitad de la cifra presupuestada, 1.500 millones de dólares, será entregada a empresas basadas en EEUU para producir baterías y componentes y aumentar la capacidad de reciclaje de las primeras.

Otros 500 millones de dólares serán para producir motores eléctricos y otros componentes del árbol motor de ese tipo de vehículos.

El resto, 400 millones, irán destinados a la compra de miles de vehículos híbridos y eléctricos para realizar pruebas, evaluar su rendimiento, instalar infraestructura para recargar vehículos eléctricos y proporcionar capacitación.