Enlaces accesibilidad

Consejos para ahorrar energía y frenar el cambio climático

Por

Se puede ahorrar energía y, lo que es más importante, una buena suma de dineroWWF ofrece unos consejos muy útiles para frenar el cambio climático y mejorar nuestra calidad de vida:

En el hogar 

Hay muchas formas de ahorrar energía y conseguir una reducción significativa del presupuesto que destinamos a la energía:

  • La lavadora y el lavavajillas hay que utilizarlos a plena carga y con programas de baja temperatura. Se puede ahorrar energía y agua, y tanto las prendas como las vajillas prolongarán su vida útil.
  • Las bombillas de bajo consumo ahorran hasta un 80% de energía y duran ocho veces más que las incandescentes. Un ejemplo: Una bombilla de bajo consumo de 11 o 15W ahorra hasta 68 euros si se compara con otra incandescente que ilumine lo mismo, y evita la emisión de casi media tonelada de CO2 a la atmósfera.
  • Si va a comprar un electrodoméstico nuevo, aprovéchese del Plan Renove de Electrodomésticos, con el que se pueden obtener ayudas económicas para la compra de aparatos eficientes. Los ciudadanos pueden informarse en sus Comunidades Autónomas.
  • Todos los nuevos electrodomésticos están clasificados según su eficiencia energética y el agua que consumen. Los mejores son los de clasificación A porque son los que menos consumen.
  • Hay que descongelar el frigorífico antes de que la capa de hielo supere los 3mm de espesor. Con esto se ahorra hasta un 30% de energía. Las temperaturas óptimas de conservación son 6º para el frigorífico y -18º para el congelador. Casi todos los aparatos tienen un termostato para ajustarlos.
  • Una ducha puede ser mucho más saludable para la piel que un baño y supone un ahorro de agua mucho mayor. A la hora de lavarse los dientes o de enjabonarse se pueden ahorrar miles de litros de agua si se cierra el grifo.

En la oficina

  • En el trabajo se puede reducir mucho la factura energética si se apagan los ordenadores mientras se descansa para comer o cuando termina la jornada laboral. Los equipos de bajo consumo eléctrico llevan la etiqueta Energy Star.
  • El papel de oficina se puede reciclar. Cuando imprimas los folios por una cara se les puede dar la vuelta para reutilizarlos por la otra. Además, es conveniente utilizar la función de impresión a doble cara.

Transporte

  • El coche contamina más en los trayectos inferiores a 3 km porque el motor está frío y su combustión no es óptima.
  • Es mucho mejor utilizar el transporte público, ya sean trenes o autobuses. Mucho más saludable puede ser el uso de la bicicleta para los desplazamientos cortos siempre que en la zona no sea peligroso.
  • Si no hay más remedio que usar el coche, conviene ponerse de acuerdo con amigos, compañeros de trabajo o familiares para ir juntos en coche.
  • Si se para más de medio minuto, conviene parar el motor.
  • Hay que llevar una correcta presión en los neumáticos. Una presión incorrecta acorta la vida útil de los mismos y aumenta el consumo de combustible y el riesgo de sufrir un accidente.
  • El Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía, IDAE, ofrece en su web una base de datos de cuánto consume y cuánto contamina cada coche.

Climatización

Hay que regular la climatización y no cometer excesos que, aparte de incrementar la factura, perjudican a las vías respiratorias. Cualquier diferencia de temperatura superior a 12º con la que hay en el exterior no es aconsejable.

Consejos para el verano

  • Se recomienda instalar toldos, cerrar las persianas y correr las cortinas en el día para evitar el calentamiento.
  • Conviene ventilar la casa en las horas más frescas del día, las primeras de la mañana y durante la noche.
  • Un ventilador puede ser suficiente para mantener un confort que el uso del aire acondicionado. Además, reseca menos el ambiente.
  • Si se va a instalar el aire acondicionado:
  • Los aparatos que más ahorran son los de clasificación energética A.
  • La temperatura óptima es 25º.
  • Hay que cerrar puertas y ventanas cuando se encienda el aparato. Un buen aislamiento de la casa rebaja mucho la factura eléctrica.
  • Al encender el aparato no hay que bajar el termostato a una temperatura más baja de lo deseado para que enfríe más rápido. Este comportamiento provoca resfriados y un gasto innecesario.

En invierno

  • Un buen aislamiento, bajar las persianas, o cerrar las cortinas por la noche, evitan pérdidas de calor.
  • La temperatura óptima de la calefacción es 19º ó 20º. Si se quiere airear la sala, es suficiente con mantener diez minutos la ventana abierta. Mientras tanto hay que apagar la calefacción.

Las etiquetas de los electrodomésticos

Son obligatorias en frigoríficos, congeladores, lavavajillas, lavadoras y secadoras eléctricas. Nos informan sobre la eficiencia energética de estos aparatos, consumos, rendimientos, capacidades, ruidos, etc. El IDAE ofrece una completa base de datos sobre el consumo energético de los electrodomésticos que se comercializan en España.

Estas etiquetas nos pueden servir de mucha ayuda a la hora de decidirnos entre un modelo u otro. Muchas veces, el precio de un aparato puede no ser tan importante como los consumos que realizará durante su vida útil,  pues el bajo consumo puede amortizar en poco tiempo el mayor precio que suele estar asociado a los aparatos más eficientes.

Hay 7 clases energéticas que van de la letra A (Más eficiente) a la letra G (Menos eficiente) en función de los consumos eléctricos:

  • A <55% Bajo consumo de energía
  • B 55-75%
  • C 75-90%
  • D 90-100% Consumo de energía medio
  • E 100-110%
  • F 110-125% Alto consumo de energía
  • Clase Energética Consumo Energético Evaluación

Cuanso se va a comprar un electrodoméstico, hay que comparar sólo los que tengan la misma clasificación energética. Es posible que un frigorífico de clase G sea más barato en la tienda que otro de clase A+, pero la factura eléctrica del primero va a ser mucho mayor que la del segundo.

La etiqueta energética contiene datos sobre el consumo energético de los electrodomésticos, la capacidad, el ruido, etc.