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La Junta Militar dará visados a todos los trabajadores de Naciones Unidas

  • Esta decisión llega tras la visita a la zona de Ban Ki-moon, el secretario general de la ONU
  • Lo más urgente es dar un techo a los afectados ante la llegada de los monzones
  • La Junta mantiene los controles de carreteras para filtrar los accesos al delta del Irrawady

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Unos supervivientes del ciclón Nargis hacen tareas de reconstrucción a las afueras de Rangún, en Birmania, ante la llegada de las lluvias monzónicas.
Unos supervivientes del ciclón Nargis hacen tareas de reconstrucción a las afueras de Rangún, en Birmania, ante la llegada de las lluvias monzónicas.

La Junta Militar de Birmania ha aprobado la concesión de visados a todo el personal de Naciones Unidas (ONU) casi un mes después de que el ciclón Nargis causara en el país más de 134.000 muertos y desaparecidos, ha indicado este jueves la organización multilateral. Mientras sobre el terreno lo más urgente es dar un techo a los afectados ante la inminente llegada de la estación de los monzones.

La decisión de conceder los visados llega después de que el pasado día 23 el Secretario General de la ONU se entrevistara con el Jefe de la Junta Militar, del que arrancó la promesa de dejar entrar a los trabajadores de la organización. lunes, las autoridades birmanas se comprometieron a permitir la entrada de los cooperantes internacionales tras la reunión en Rangún del secretario general de la ONU, Ban Ki-moon y el jefe de la Junta, el general Than Shwe.

Controles de carreteras

El régimen birmano mantiene, sin embargo, controles en las carreteras de acceso al delta del Irrawady, donde impide el acceso a cooperantes que no tengan permiso especial. Se acusa a la Junta, además, de utilizar estos controles para requisar parte de la ayuda.

Según la ONU, la ayuda internacional ya ha alcanzado a un millón de personas, menos de la mitad de los 2,5 millones de víctimas que sobrevivieron al ciclón, que arrasó Birmania el pasado 2 de mayo.

El Gobierno birmano calcula que necesitará 11.000 millones de dólares (7.000 millones de euros)

para la reconstrucción del sur del país, mientras que Naciones Unidas solicita a los donantes unos 200 millones de dólares (121 millones de euros) para atender durante los próximos tres meses las necesidades más urgentes de los damnificados.

La amenaza de los monzones

A la espera del total despliegue de la ayuda, lo más urgente para los afectados por el ciclón es conseguir un techo antes de que llegue la estación de los monzones, según ha destacado el experto de la ONU, Jemilah Mahmood, Tras visitar el delta del río Irrawaddy.

Mahmood afirmó que "la asistencia internacional sólo llega a un pequeño porcentaje de la gente afectada lo que no es suficiente". Mahmood, quien pasó 12 días en Birmania, declaró al servicio de noticias de la ONU que "en estos momentos el alojamiento es la primera necesidad. Las lluvias han comenzado y pronto empezarán los monzones", al explicar que los damnificados siguen en tiendas y otros en casas temporales o refugiados en colegios.

Las clases comienzan la semana próxima y todavía no se sabe dónde estudiarán unos 500.000 escolares que se han quedado sin colegio, y los agricultores del delta del Irrawaddy, el granero del país, no tienen una perspectiva mejor porque cuando aparezcan los monzones no podrán plantar.