Luis Carrión es el sustituto de Paunovic en el banquillo del Oviedo
- El entrenador catalán afronta su segunda etapa en el banquillo carbayón tras el despido del técnico del ascenso
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"Ilusionado y con muchas ganas", así es como recoge el diario asturiano La Nueva España que ha llegado a Oviedo el entrenador Luis Miguel Carrión. El que fuera entrenador carbayón durante la temporada 2023/24 es el sustituto de Veljko Paunovic tras el sorprendente despido del técnico serbio.
La noticia del primer cese en la Primera División agitó la mañana y dio a pensar que el Real Oviedo tenía atado un sustituto. Ese recambio es el entrenador catalán que llevara al equipo ovetense a la final del playoff de ascenso y que le granjeó su fichaje por la Unión Deportiva Las Palmas para debutar en la máxima categoría.
Ahora inicia su segunda etapa en el banquillo carbayón. Se encuentra a un equipo que ocupa la 17ª posición, fuera de los puestos de descenso, con 6 puntos sumados en 8 jornadas de Liga —con los malos tragos de enfrentarse a Real Madrid, Barça y Villarreal solventados—.
Segunda experiencia en Primera
Carrión abandonó Oviedo tras una gran temporada, pero no tuvo suerte en Las Palmas. Fue despedido tras nueve jornadas en las que la UD Las Palmas había cosechado tres empates y seis derrotas. Allí tenía firmado un contrato hasta el 30 de junio de 2026 y desde entonces ha residido en Córdoba sin volverse a sentar en los banquillos.
Su salida de Oviedo pareció más distante que lo que ahora se demuestra con esta incorporación. El Oviedo quería que siguiera y le ofrecía un proyecto ambicioso en Segunda, en lo económico y en lo deportivo. El técnico respondió al club asturiano que lo tenía que pensar y acabó firmando con Las Palmas.
Al llegar a la isla se aireó que el fichaje estaba atado desde hace tiempo y eso no gustó nada en Oviedo.
Es todo un órdago de la dirección del Real Oviedo. Despide a un entrenador querido por todos, pupilo del inolvidable Radomir Antic y responsable del ascenso histórico a la élite 24 años después. A Carrión es difícil que se le perdonen más de dos o tres tropiezos desde la grada.
