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El Mundial de clubes, el escenario perfecto para el fútbol brasileño

  • Los equipos de la Brasileirão aprovechan el Mundial de clubes para confirmar el buen momento que atraviesan
  • Fluminense y Palmeiras, clasificados para cuartos, se jugarán el pase a semis contra Al Hilal y Chelsea
El Mundial de clubes: el escenario perfecto para el fútbol brasileño
Gol Cano (3') Fluminense - Inter de Milán AFP
RTVE.es

El fútbol brasileño vuelve a alzar la voz en el escenario internacional. Con Palmeiras y Fluminense en cuartos de final del Mundial de clubes, Brasil se convierte junto con Alemania en el único país con dos representantes entre los ocho mejores. Un dato que sirve para confirmar el buen momento por el que pasa el futbol brasileño, que también vive ilusionado con la llegada de Carlo Ancelotti a la selección.

Palmeiras firmó una primera fase convincente en el Grupo A, donde compartió grupo con Porto, Al Ahly e Inter Miami. El conjunto paulista sumó siete puntos que le permitieron avanzar como líder. El sorteo lo emparejó con el actual campeón de la copa Libertadores, Botafogo, en un cruce 100% brasileño que garantizaba la continuidad de, al menos, un representante nacional, pero también aseguraba la eliminación de otro. El conjunto de Abel Ferreira necesitó la prórroga para imponerse por 1-0 y avanzar a la siguiente ronda.

Mientras que Fluminense, encuadrado en el Grupo F junto a Borussia Dortmund, Ulsan Hyundai y Mamelodi Sundowns, logró el pase como segundo clasificado con cinco puntos. En octavos, protagonizó una de las grandes sorpresas del torneo al eliminar por 2-0 al Inter de Milán, actual subcampeón de la Champions League.

Gilberto Silva: "El fútbol brasileño sigue muy vivo"

Precisamente, Gilberto Silva, campeón del mundo en 2002 comentaba el buen momento por el que pasa Brasil en unas declaraciones para FIFA: "Ver a dos equipos brasileños en cuartos es una señal de que el fútbol de nuestro país sigue muy vivo. Muchos pensaban que no podíamos competir con los europeos, pero la verdad es que tenemos talento y estructura. Este torneo lo está demostrando".

Más allá del dato, sus palabras reflejan una realidad que va más allá de Brasil. El buen rendimiento de los clubes sudamericanos en el torneo pone de manifiesto su capacidad para competir al más alto nivel, a pesar de las diferencias económicas respecto a Europa y de la ausencia de grandes figuras mediáticas.

En un escenario donde el poder financiero suele marcar diferencias, el contraste es evidente. Según datos de Transfermarkt, el Real Madrid es el equipo con mayor valor de mercado de la UEFA alcanzando los 1.340 millones de euros. En cambio, el club más valioso de la CONMEBOL, el Palmeiras, se sitúa en los 283 millones. Esa brecha pone aún más en valor el trabajo que están realizando entidades como Fluminense y el propio Palmeiras.

Un guiño al pasado… y al futuro

La celebración del torneo en Estados Unidos ha despertado inevitablemente recuerdos del Mundial de 1994, cuando Brasil levantó su cuarto título mundial tras 24 años de sequía. Tres décadas después, la selección brasileña volverá a disputar un Mundial en territorio estadounidense en 2026.

Quizás el gran rendimiento de los clubes brasileños venga por la adaptación al clima. Estamos viendo como los jugadores de los clubes europeos, acostumbrados al tiempo de Europa, sufren de muchas dificultades para terminar el partido. O tan solo, porque Estados Unidos es un país que a los brasileños le da buena suerte y pueden desatar su mejor futbol.

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Todas estas conjeturas, junto con el buen momento de forma de los clubes nacionales, sumado a la expectación generada por la llegada de Carlo Ancelotti al banquillo de la selección, genera un coctel explosivo en el cual la 'canarinha' se permite el lujo de soñar con el Mundial 2026.