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Fútbol

Aguirre y Mel viven en una cuerda floja de la que ya ha caído Garrido

  • El Betis tiene a Mel en el filo de la navaja tras caer en Copa ante el Córdoba
  • El coste del cese de Aguirre, el único motivo que le mantiene en el Zaragoza
  • Garrido destituido del Villarreal, al que ha entrenado en todas las categorías

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Entrenadores de fútbol
Juan Carlos Garrido, exentrenador del Villarreal y los técnicos de Zaragoza y Betis, Javier Aguirre y Pepe Mel.

El cruce de dieciseisavos de final de la Copa del Rey ha evidenciado la crisis que viven algunos entrenadores en sus banquillos de Primera División.

Nada más terminar el encuentro copero ante el Mirandés, el ya extécnico del Villarreal, Juan Carlos Garrido, confirmaba a la prensa que había sido destituido por el presidente Fernando Roig. Él ha sido el primero de una lista que podría ampliarse con la destitución de Gregorio Manzano que cuenta las horas como entrenador rojiblanco.

Pero además de ellos, Javier Aguirre, técnico del Zaragoza y Pepe Mel, entrenador del Betis, viven en la cuerda floja después de haber quedado eliminados de la Copa del Rey por equipos de categorías inferiores.

Garrido, entrenador profesional gracias al Villarreal

Tras un año y medio al frente del 'submarino amarillo' Juan Carlos Garrido se despide del que podía considerarse el equipo de su vida.

Gracias al conjunto castellonense, Garrido se convirtió en entrenador profesional, pero es además uno de los pocos técnicos que ha entrenado en todas las categorías del fútbol español en un mismo club.

En el Villarreal B logró tanto el ascenso a Tercera División (2002-2003) como a Segunda B (2008-2009). Después, tras la destitución de Ernesto Valverve, tomó las riendas del primer equipo el 1 de febrero de 2010.

Aunque debutó perdiendo por la mínima ante el Mallorca, Garrido consiguió que el Villarreal acabara séptimo en la liga, lo que le daba derecho a disputar la Europa League.

En la temporada 2010-11, Garrido logró llevar al 'submarino' hasta la cuarta posición en Liga y cayó en la seminales de la liga Europa ante el Oporto, que terminaría proclamándose campeón de la competición.

Sin embargo, y pese a las buenas sensaciones despertadas esta temporada, el conjunto 'amarillo' no ha sabido rehacerse tras la marcha de jugadores importantes como Cazorla o Capdevila, este verano.

Así, el Villarreal, que presumía de poder codearse con los grandes equipos de Europa, ha vivido la Champions como una auténtica tortura en la que no ha logrado sumar ni un solo punto.

Además, su imagen en el campeonato nacional no ha diferido mucho de la ofrecida en Europa. Cuarto por la cola en liga y empatado a puntos con el Sporting, que ocupa puestos de descenso, el fracaso ante el Mirandés ha sido la gota que colmó el vaso.

El Madrigal pidió la destitución de Garrido con una pañolada y el técnico valenciano se marchó agradeciendo al Villarreal todo lo que le ha dado.

Mel, en el filo de la navaja

Si los malos resultados del Villarreal han acabado por costarle el puesto a Garrido, algo parecido podría ocurrirle a Pepe Mel en el Betis.

El técnico madrileño vive en el filo de la navaja y todo el crédito que consiguió con el ascenso a Primera División parece que se le está agotando.

El conjunto verdiblanco tuvo un gran inicio de temporada, en el que incluso se llegó a situar liderando la tabla. Pero luego llegaron 10 jornadas sin ganar y en las que solo se sumó un punto. Así, el horizonte de Mel en el banquillo bético era muy negro, ya que además se avecinaban rivales de entidad.

Pese a todo, el Betis consiguió ganar al Valencia en casa y al Atlético en el Calderón, lo que daba algo más de vida al proyecto de Mel.

Sin embargo, la eliminación copera ante el Córdoba, que fundamentó su pase en el orden defensivo, amarga las Navidades a Pepe Mel. Ahora, el todavía técnico bético, tendrá que estar muy pendiente de la cuesta de enero en la que se enfrentarán a rivales complicados como el Sporting, el Barcelona o el Sevilla.

A Aguirre se le acaba el crédito

Una situación más complicada aún vive Javier Aguirre en el banco del Zaragoza. Cierto es que el mexicano logró 'in extremis' que los maños mantuvieran la categoría la pasada temporada, pero cada vez son más las voces discordantes que se alzan en su contra.

Quizá, la única razón para mantenerle en el cargo sería el coste de su despido, algo que en un club que está inmerso en un concurso de acreedores, es un motivo de peso.

Deportivamente, el Zaragoza es colista con solo 10 puntos y habiendo ganado solo dos partidos frente a 10 derrotas y cuatro empates. Los números, por tanto, son desalentadores y el 'alcorconazo' copero contribuye a empeorar una situación más que complicada para el 'vasco' Aguirre.

Sus próximos rivales: el Racing, el Getafe y el Levante podrían forzar la destitución del mexicano que necesita, sí o sí, ganar estos partidos para recuperar algo de crédito que le permita seguir dirigiendo esta nave.