Fomento prevé abrir AENA al capital privado en 2013, aunque falta definir el modelo

• La privatización parcial del anterior Gobierno se paralizó a principios de año
• Pastor: la liberalización del transporte ferroviario de pasajeros abaratará el AVE

El Gobierno tiene previsto dar entrada al capital privado en el accionariado del gestor aeroportuario AENA el próximo año, aunque aún estudia el modelo que seguirá para esa privatización parcial. Según ha indicado este martes la ministra de Fomento, Ana Pastor, se retoma así el proceso puesto en marcha por el Ejecutivo anterior y que se paralizó a principios de año porque suponía vender las "dos joyas de la corona", en relación  al aeropuerto de Madrid-Barajas y El Prat (Barcelona).

Durante un acto organizado por la Cámara de Comercio de EE.UU en España, Pastor ha señalado que su departamento ha tratado de dar un giro a la gestión de AENA para reducir su deuda, para lo que ha puesto en marcha un plan de austeridad con el que se han ahorrado 70 millones en lo que va de año.

Así, Fomento espera que este plan logre un ahorro de 100 millones de euros al final de 2012, ha señalado Pastor, quien ha recordado que la deuda acumulada por AENA asciende a 14.000 millones de euros.

La liberalización de Renfe "rebajará las tarifas de AVE"

La ministra también se ha referido a la liberalización de Renfe y ha asegurado que esa apertura del transporte ferroviario de pasajeros conllevará "una sustancial rebaja de precios" en las tarifas de la alta velocidad.

Pastor ha subrayado que con esta medida -que debería entrar en vigor en julio de 2013- se ampliará el acceso de los ciudadanos a los trenes AVE.

Según la ministra, el modelo actual "es difícilmente sostenible" ya que, según ha advertido, arrastra un endeudamiento de unos 20.000 millones de euros.

"Es absolutamente ineficiente", ha señalado Ana Pastor, quien ha denunciado que ahora cuesta 2.500 millones de euros a los contribuyentes y sus resultados son negativos. Como ejemplo ha apuntado que el transporte de mercancías pierde 90 millones de euros al año y representa el 4% del mercado.

Pastor ha defendido que las medidas previstas para el sector -como la partición de Renfe en cuatro sociedades o la desaparición de Feve- pretenden poner fin a esa situación.

Esas medidas, según la ministra, "pondrán en valor" a Renfe, por lo que ha añadido que "la liberalización, lejos de un riesgo, es una fuente de oportunidades".

En esta línea, también ha advertido a los sindicatos que "la liberalización es la única garantía de mantenimiento del empleo".

No estudia crear una empresa pública de autopistas

Por último, la responsable de Fomento ha asegurado que "no está  sobre la mesa" constituir una empresa  nacional de autopistas para integrar a las vías de pago que actualmente afrontan  un riesgo de quiebra. Desmiente así las informaciones publicadas por algunos medios de comunicación, que  aseguran este martes que ese ministerio negocia con la banca la creación de esa empresa pública.

"Lo que estamos haciendo es consolidar en los presupuestos del  próximo año las ayudas que tenemos articuladas para algunas de estas  empresas que están atravesando una situación difícil", ha indicado.

En este sentido, se ha referido a las denominadas cuentas de  compensación con las que Fomento busca amortiguar la disminución de  ingresos de las empresas que gestionan estas vías y que derivan de la disminución del tráfico. La vigencia de estas cuentas se ha ampliado hasta 2018, al tiempo que se han mantenido la fórmula de  préstamos participativos, con los que se pretende atajar el efecto de  los sobrecostes de las expropiaciones de suelo realizadas para construir las vías.

"El modelo concesional español es un modelo de éxito, pero en este  caso se está viendo afectado por dos elementos, como son los costes  de las expropiaciones y la caída de los tráficos", ha subrayado la  ministra.

En la actualidad, nueve concesionarias  de autopistas corren riesgo de quebrar: cinco están ya en  concurso de acreedores (las radiales de Madrid R-4, R-3 y R-5) y una más (entre Cartagena y Vera), en  preconcurso. Todas están participadas por grandes grupos  constructores y entidades financieras.