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Supercopa ACB 2011

El Regal Barcelona logra su cuarta Supercopa ACB tras remontar al Caja Laboral

  • Victoria del conjunto azulgrana por 73-82 en la gran final
  • Navarro, máximo anotador con 24 puntos y MVP del partido
  • El azulgrana, nombrado mejor jugador por tercera vez consecutiva

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El Barça se impone en la Supercopa ACB

Ficha técnica:

73 - Caja Laboral (20+22+17+14): Heurtel (8), Oleson (5), San Emeterio (4), Teletovic (15) y Seraphin (9) -cinco inicial-; Prigioni (14), Ribas (8), Nemanja Bjelica (2), Reggie Williams (6), Milko Bjelica (2) y Dorsey (-).

82 - FC Barcelona Regal (25+13+20+24): Huertas (11), Navarro (24), Eidson (9), Lorbek (12) y Ndong (12) -cinco inicial-; Sada (5), Ingles (2), Mickael (-), Wallace (5) y Vázquez (2).

Árbitros: Pérez Pizarro, Conde y Jiménez. Sin eliminados por faltas.

Incidencias: Final de la Supercopa 2011, disputado en el Bilbao Arena de Miribilla ante un total de 7.800 espectadores.

El Regal Barcelona vence en la final de la Supercopa ACB al Caja Laboral e iguala con el conjunto vitoriano en número de títulos, cuatro. El conjunto azulgrana volvió a tirar de remontada, como hiciera el día anterior en la semifinal contra el Madrid para acabar ganando (73-82).

El alero Juan Carlos Navarro, una vez más, fue el máximo anotador del partido (24) y el jugador mejor valorado (27). El capitán logra su tercer MVP consecutivo, de igual manera que su equipo consigue su tercer título seguido. Es la cuarta Supercopa para Navarro y la quinta para Pete Mickeal, que antes las había logrado con el Caja Laboral cuando se llamaba Tau Vitoria.

Fue el de Sant Feliu, junto a un gran Boniface Ndong (24 de valoración) el que de nuevo guió a su equipo cuando iban siete puntos abajo a falta de pocos minutos para el final. Un parcial de 13-0 en el último tramo del partido machacó anímicamente a los de Dusko Ivanovic, que durante casi todo el partido fueron mandando en el electrónico.

El campeón de Liga suma un nuevo título, pero el torneo en general deja buenas sensaciones a los aficionados al baloncesto español. Si el Madrid demostró ser un digno rival el viernes, el Caja Laboral dio motivos para la esperanza a sus hinchas.

Los baskonistas empezaron marcando el ritmo al principio, un ritmo frenético con intercambios de canastas por parte de los dos equipos. Demasiada efectividad en ataque y poca defensa, para desesperación de los entrenadores. El parcial del primer cuarto, 20-25 a favor del Barça, no se mantuvo en los tramos siguientes.

Los de Xavi Pascual supieron rehacerse al buen arranque del Caja Laboral gracias a los puntos de Marcelinho Huertas y de Navarro. Pero ellos solos no bastaban, por lo que los triples de Wallace y Eidson contribuyeron bastante a la remontada en los primeros diez minutos.

La balanza volvió a inclinarse del lado de los vitorianos en el segundo parcial, gracias a una mayor intensidad defensiva de los hombres altos y a unos buenos minutos de Reggie Williams, uno de los fichajes de la temporada.

El norteamericano encadenó canastas con buenas acciones defensivas, permitiendo que los suyos firmaran un parcial de 10-0 con el que dar la vuelta al electrónico. Antes ya había dado una buena impresión el francés Kevin Seraphin, de 22 años, con buenas acciones bajo los aros.

La igualdad fue la tónica del partido en los siguientes minutos y se sucedieron las alternativas en el marcador, aunque el Caja Laboral iba por delante la mayor parte del tiempo. No obstante, las diferencias eran cortas, apenas de siete puntos la máxima.

Esa fue la que logró el Caja Laboral al inicio del último cuarto, gracias sobre todo a dos triples inmensos de Prigioni, el mejor de los baskonistas (14 de valoración) y segundo anotador de su equipo tras Teletovic, con 14 y 15 respectivamente.

Se echó de menos en el conjunto de Ivanovic la aportación ofensiva de San Emeterio, que empezó enchufado y terminó diluyéndose. Como el resto del equipo, que después de las canastas de Prigioni encadenó una serie de errores en ataque y se estancó en 65 puntos.

Además, entraron demasiado pronto en el 'bonus' de faltas personales, lastrando su defensa. Empezó entonces el festival Navarro, que llevó a los culés a la victoria con el parcial ya mencionado de 13-0. Las siguientes canastas del Caja Laboral solo sirvieron para maquillar el resultado, no para optar a una victoria que se les escapaba a cada segundo.