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Salud

5 prácticas diarias para seguir cuidándote después de las vacaciones

  • ¡Cuidarte a lo largo del año no es tan difícil!
  • En 'Para Todos La 2' la psicóloga Patricia Ramírez te da cinco prácticas para sentirte bien en tu día a día

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Para Todos La 2 - Vuelta a la rutina con 5 sencillas prácticas

La vuelta de las vacaciones es dura, no solo porque vuelves a una rutina que a veces asfixia o retomes unos horarios y un trabajo estresantes, sino porque dejas de practicar todo lo que es más placentero. Pero sentirse bien y cuidarte a lo largo del año tampoco es tan difícil ni lleva tanto tiempo si te lo propones.

Para ayudarte, en ‘Para Todos La 2’, la psicóloga Patricia Ramírez te da cinco prácticas sencillas para practicar a diario y seguir sintiéndote bien. ¡Vamos con algunas!

1. Una siesta al día

Un estudio publicado en la revista Sleep Health afirma que las siestas de entre 20 y 30 minutos de duración pueden ralentizar el proceso de envejecimiento del cerebro y con ello mantenerlo en buena forma a lo largo del tiempo. Donde puedas, pero échate una cabezadita. No solo cuidará de tu salud, sino que además sienta de maravilla y ayuda a afrontar la tarde con más energía y concentración. No te sientas culpable por descansar un rato y parar si tienes la oportunidad, posiblemente serás más productivo el resto del día.

Las siestas de entre 20 y 30 minutos pueden ralentizar el proceso de envejecimiento

Las siestas de entre 20 y 30 minutos pueden ralentizar el proceso de envejecimiento

2. El hábito de la mono tarea

La multitarea ni existe ni se la espera. Nadie es capaz de hacer varias cosas a la vez, aunque nos hayan vendido esta película. La multitarea estresa e incrementa tus errores. Acostúmbrate a estar a una sola cosa con todos tus sentidos en esa actividad, sea profesional, social o personal, estate a lo que estás. Los beneficios son múltiples, mayor disfrute, mejora de la concentración y de la atención, rapidez, creatividad y más éxito en lo que hagas.

3. Comprométete con un estilo de vida más slow

Si tuvieras tiempo de pararte a observar cinco minutos una calle concurrida, te darías cuenta de la velocidad a la que viven las personas, tanto las que van circulando como las que andan. Ir todo el día con prisa activa nuestra respuesta de ansiedad.

Proponte empezar a realizar alguna de tus actividades diarias a otro ritmo. Desde conducir a la velocidad adecuada, andar sin prisa, hablar un poco más despacio o comer lentamente saboreando. ¡Verás como tu ansiedad disminuye!

4. Tómate a diario un ratito para ti

Necesitas dedicarte tiempo, ya sea meditando, haciendo ejercicio, leyendo o practicando cualquier otra afición. La vida durante 11 meses no puede ser solamente trabajo. Tienes que ajustar y organizar tu día para que quepas tú, al fin y al cabo, tú eres lo más importante de tu vida.

5. Dormir y evitar pantallas

Necesitas el sueño como la vida misma. Trata de irte un poco antes a la cama. Robarle horas navegando en internet, enredando con las redes o viendo un capítulo de una serie es robarle tiempo a la vida. El sueño está relacionado con nuestra salud mental, física y hasta con la longevidad. Tu cuerpo y mente necesitan las horas de descanso apropiadas para poder recuperarse del desgaste del día a día, no lo olvides.