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María Esclapez desmonta mitos sobre la gordofobia: "La diversidad de cuerpos es una realidad"

  • María Esclápez, psicóloga, desmonta mitos y estereotipos sobre la gordofobia. ¿Qué es? ¿Qué rol tienen las redes sociales?
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Gordofobia: mitos y estereotipos, por María Esclapez
La psicóloga María Esclapez, al frente del programa La cámara de Gesell, analiza los mitos y estereotipos sobre gordofobia.

En 2001 nos hicieron creer que Bridget Jones, una chica graciosa pero fracasada y torpe, estaba gorda. La película marcó a toda una generación y, a pesar de que Bridget resultó un personaje entrañable, el estereotipo cogió fuerza. Han pasado veintidós años y nada ha cambiado; aún a día de hoy se sigue pensando que el éxito está asociado a la delgadez y la gordura al fracaso.

Gordofobia y redes sociales

La gordofobia es la discriminación y estigmatización constante que miles de personas sufren día a día por sobrepeso u obesidad; un problema social y cultural arraigado en nuestra sociedad que afecta intensamente a la vida de personas en todo el mundo. Como sociedad, tendemos a invalidar a quienes no se ajustan a lo que se denomina cuerpo normativo.

Las redes sociales son testigo de ello: los usuarios insultan a quienes consideran que no encajan en un físico concreto, discuten acerca de la importancia de la salud y aluden a la falta de hábitos saludables como origen del sobrepeso de las personas a quienes critican.

Desde su atalaya llena de estereotipos y el poder que en muchos casos da el anonimato, se creen poseedores de la verdad sin saber que sus palabras contribuyen a alimentar el estigma. No son conscientes del daño que hacen a quienes están al otro lado. De hecho, las consecuencias pueden llegar a ser devastadoras para quienes la sufren: burlas, humillaciones, exclusión social, asociación del peso con la valía personal (si estoy más delgado valgo más, puedo hacer más planes y me merezco más cosas buenas; si estoy más gordo valgo menos, puedo hacer menos planes y me merezco menos cosas buenas), baja autoestima, ansiedad, depresión y, aunque sea contrario a las creencias de mucha gente, también trastornos de la conducta alimentaria (TCA, por sus siglas).

El TCA no va a asociado a un peso determinado

Como ves, este tipo de diagnósticos, como la anorexia, la bulimia o el trastorno por atracón, no solo se reserva para las personas extremadamente delgadas, y es que el TCA no va a asociado a un peso determinado. Como este, otros muchos mitos y creencias acompañan a la gordofobia.

La mayoría de ellos giran, como veíamos antes, en torno a los hábitos de las personas que la sufren, como por ejemplo, no tener fuerza de voluntad, no comer sano o no hacer ejercicio. Sin embargo, la realidad es que el sobrepeso o la obesidad pueden estar ligados a otros factores como la toma de medicación, los problemas psicológicos o psiquiátricos, los factores genéticos o los problemas hormonales.

Lamentablemente, estos estereotipos están muy extendidos entre la población y lo que es peor: normalizados. Estos prejuicios están tan arraigados en nuestra sociedad que, incluso, a veces, sin saberlo, colaboramos a perpetuarlos, sin reparar en el grave perjuicio que causa a las personas que no “encajan en la norma”.

Las redes son solo la punta del iceberg

La gordofobia traspasa pantallas y está presente en muchos ámbitos de la vida, como por ejemplo, aulas de colegios e institutos (dando paso al bullying), proyectos audiovisuales, consultas médicas o tiendas de ropa y mundo de la moda en general.

Mara Jiménez y Jasone Alonso han sufrido un calvario y su experiencia en La Cámara de Gesell nos aportará mucha luz para comprender por qué debemos seguir trabajando para erradicar todos estos mitos y estereotipos. El objetivo: construir una sociedad inclusiva, respetuosa y libre de prejuicios, donde todas las personas, tengan el tipo de cuerpo que tengan, sean respetadas.

La diversidad de cuerpos es una realidad. Todas las personas merecen respeto, tengan el cuerpo que tengan. Construir un futuro más justo y compasivo para todos y todas está en nuestras manos.